Capitulo III

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Sentada aquí ahora me doy cuenta que mis pensamientos y sensaciones de ese momento podrían resultar para cualquiera inconsecuentes y creo que ese fue el meollo del asunto que se fue desarrollando más tarde ese fin de semana, por un lado disfrute la noche con ella, desde el encuentro casual en la fila de la disco, el baile provocador en la pista y el sexo un poco agresivo, pero ¿Cómo podía explicarme a mí misma el placer que sentí cuando se rozaba en mi culo sin pudor, sin importar que no era capaz de ver su rostro? ¿Cómo podía soportar la idea de haber sentido placer en la forma en que con fuerza apretaba mis pezones y la satisfacción que sentí al mirarme en el espejo, luego de la ducha y ver las marcas y moretones tenues que tenía mi cuerpo? Por otro lado mi mente siempre mordaz y exigente me decía que eso no era normal, que las personas normales no tenían, lo que yo en ese tiempo catalogue de sexo masoquista, no se dejaban controlar de esa forma, ¿Cómo había sido posible ser así de pasiva en la cama? ¡Apenas la toque! fui un maldito mueble y yo no era así y hoy tampoco lo soy así entonces ¿de qué se trataba esto? Me sentía pésimo y, luego de ser regañada por mi madre por llegar de mañana sin avisarle, procedí a estar acostada todo el día sábado viendo mis películas favoritas, románticas y comedias, comiendo dulces y comida reconfortante mientras no dejaba de pensar en que la alocada mujer de la noche anterior no era yo.

Por la noche decidida a estudiar y ser productiva tome unos libros y me senté en el escritorio de mi habitación, trate de estudiar pero mi mente volvía a las imágenes de la noche anterior, sentía placer y culpa al mismo tiempo, se me revolvía el estómago, yo no era así, no me dejaba controlar pero era precisamente eso lo que le había permitido a Victoria ¿Quién podría disfrutar de ser controlada, golpeada y ser utilizada como juguete sexual? Solo una enferma, esa era la forma como me sentía, como una enferma con alguna patología sexual vergonzosa de la que nunca debería hablar.

Mi celular sonó y vi que tenía un nuevo mensaje de un número desconocido, se me apretó el estómago nuevamente y mi corazón se aceleró, abrí el mensaje, era ella, claro que era ella – hola, ¿Cómo estás? Espero que sin resaca, yo he tomado agua y pensado en ti todo el día, ojalá vernos pronto, besos, Victoria. – decía su mensaje sin más. Sonreí por un instante para luego volver a sentirme pésimo, me tire en la cama y lloré, no sé porque pero lo hice, me sentía con rabia por lo absurda de la situación, me daba vergüenza sentir placer de ser, lo que denominé una pasiva masoquista, además de cuestionarme el cómo me había metido en la cama con una perfecta extraña, todo era tan incorrecto y nada respondía a mi forma de ser, ¿Cómo había sido capaz?

Esa noche no conteste su mensaje, sentía que lo mejor era alejarme y dejar todo como una experiencia loca que no podría contarle nunca a nadie ya que todo lo acontecido me provocaba mucho pudor y vergüenza.

Mientras estaba en la cama pensando en todo esto tuve una epifanía, me incorpore de un salto, con los ojos un poco hinchados por el llanto, prendí mi computador, al cabo de unos minutos me sumergí en el internet y comencé a buscar información sobre el sexo masoquista, ser pasiva y dejar que tu pareja sexual controle todo. Grande fue mi sorpresa cuando tipié MASOQUISMO y encontré un artículo en Wikipedia que decía "Sadomasoquismo es un acrónimo de los términos sadismo y masoquismo, y se refiere a la práctica de dar y recibir placer por medio de actos que incluyen recibir o provocar dolor o humillación." Las fotos que acompañaban la publicación me provocaron rechazo y excitación al mismo tiempo, mujeres siendo golpeadas por hombres con látigos y fustas, amarradas de sus manos, incluso había una caricatura de los años 50, no podía creer lo que mis ojos veían. Continúe leyendo esa y otras publicaciones respecto del tema, me di cuenta que no era una parafilia como yo pensaba, me di cuenta que no era la única en el mundo que sentía placer con estas cosas pero a pesar de ello me seguía sintiendo descompuesta, no podía aceptar que esas cosas ¡me gustarán a mí!, seguía sintiendo que era como de gente pervertida.

⚠️🔞Deseos Ocultos - Nostalgia 🔞⚠️👭 (Libro I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora