taking sehun | sebaek.

c u a t r o.

―De ningún modo le hiciste honor a ese hombre cuando me lo describiste por teléfono el otro día ―murmura Seulgi, antes de beber su café.

Ignorándola, pues no quiero discutir lo apuesto que es Sehun, pregunto

―¿Dónde está Jisung?

―En la ducha ―responde simplemente.

Parándose, toma un trozo de tocino del plato de papel cerca del fogón donde estoy cocinando.

―¿Te gustaría ayudarme o esto son como vacaciones para ti?

―¿Vacaciones? ―Resopla―. Estoy lejos de mis hijos. Esto es como quedarse en un hotel cinco estrellas.

―¡Baekhyun! ―grita una voz demasiado familiar, cuando el sonido de la pantalla de la puerta trasera chirria abriéndose y se cierra de golpe.

―En la cocina ―mascullo, dándome cuenta que esta mañana va a ser de todo menos relajante. El pobre Sehun va a recibir todo el peso de lo arrogante y entrometida que es mi familia.

Kyungsoo, mi hermano pequeño, entra a la cocina, con unos enormes lentes de sol cubriendo sus ojos, que están indudablemente rojos y manchados con maquillaje mientras se recupera de su enorme resaca.

―¿Qué estás haciendo aquí? ―le pregunto mientras coloco otra pieza de tocino en el plato.

―Estaba de camino a casa desde la casa de un amigo ―murmura mientras saca una taza de la alacena y comienza a servirse café.

―¿Te las arreglaste para salir antes de que se despertara y te pidiera el número? ―se burla Seulgi desde donde está sentada en la mesa de la cocina.

Kyungsoo abre la boca, como si fuese insultado.

―¿Estás insinuando que abandoné una aventura de una noche?

―No insinúo ―aclara Seulgi.

Kyungsoo cierra la boca y se encoge de hombros.

―Fue algo así. ―Dejándose caer en la silla al lado de Seulgi, pregunta―: ¿Entonces dónde está el presidiario?

―¡Shhh! ―lo reprendo―. Bajará en cualquier minuto y no digas mierdas como esa frente a él.

―Acaba de salir de prisión. ―Kyungsoo bosteza―. ¿Qué más tenemos para hablar con él? ¿Política? ¿Noticas mundiales?

―¡Kyungsoo, te juro que si lo haces sentir incomodo le diré a mamá que estás teniendo sexo con cualquiera que tenga un pene! ―amenazo.

―Buenos días ―saluda una profunda voz y casi salto fuera de mi piel cuando me doy cuenta que es Sehun.

Está usando un pantalón corto de baloncesto y una ajustada camiseta negra, mostrando su musculoso cuerpo. Pasa un momento antes de darme cuenta que estoy mirándolo, mis ojos trazando cada tatuaje intrincado que pasa por sus brazos.

―Buenos... días ―tartamudeo―. ¿Cómo dormiste?

―Bastante bien, gracias.

Hay un incómodo silencio mientras los dos simplemente nos miramos, hasta que Kyungsoo se aclara la garganta. Levantándose, se acerca extendiendo su mano como si fuera alguna clase de debutante sureño.

―Debes ser Sehun ―indica lo obvio y le ofrece su mano educadamente, él la toma y la estrecha incómodamente. Algo me dice que no está acostumbrado a jovencitos educados, no es que Kyungsoo sea uno―. Soy Kyungsoo, el hermano menor de Baekhyun.