d i e c i s é i s.

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Mi herida en el pie me hizo olvidar tomar un ibuprofeno anoche, y como sabía que lo haría, mi cabeza está palpitando y también mi dedo del pie. Es sólo cuando mis riñones se sienten como si estuvieran a punto de estallar que me obligo a levantarme de la cama e ir al baño. Los acontecimientos de la noche anterior llegan a mí e inconscientemente me pateo. ¿Cómo pude dejar que esto sucediera? Obviamente, he desarrollado una atracción nada sana hacia Sehun, una que está completamente fuera de límites. Añádele el ser un hombre joven con, seamos sinceros, necesidades sexuales, tomé una decisión horrible bajo la influencia. Después de hacer mis necesidades, torpemente caminé hacia abajo, atraída por el aroma de tocino flotando en el aire.

Mi estómago retumba cuando entro en mi cocina, frotándome los ojos cuando los rayos de luz solar a través de la ventana de la cocina, cuando oigo:

―Buenos días.

Estuve apunto de saltar de mi piel cuando levanto la mirada para encontrar un hombre delgado cubierto, de cabeza a pies con tatuajes, sentado a mi mesa de cocina, tomando una taza de café. Su cabello oscuro es más largo en la parte delantera, que en la parte de atrás y tiene una barba bien recortada. Nada de lo que conozco debe ser del temor de Dios a mis ojos ante la vista de él, coloca su taza sobre la mesa con cuidado y se pone de pie rápidamente, la silla chirria, ya que se desliza hacia atrás, con las manos en el aire. Pero el movimiento repentino hace que me asusté mucho más.

―¡Sehun! ―grito tan fuerte como puedo―. ¡Sehun, ayuda!

―Mi nombre es Chanyeol. Soy amigo de Sehun ―explica el hombre mientras se mueve hacia mí con las manos todavía levantadas. Me apresuro a la mesa y agarro el cuchillo de carnicero y lo muevo hacia él.

―Quédate donde estás ―grito. Mi cabeza está palpitando, y todavía no había logrado frotar el sueño de mis ojos, pero si se acerca a mí, voy a clavar este cuchillo hasta llegar a algo. Esperemos que sea una arteria o algo que le haga sangrar rápidamente―. ¡Sehun!

Cuando escucho la mosquitera crujir al abrirse, casi me derrumbo en alivio. Sehun se apresura y se detiene en la puerta mirando la escena.

―Él simplemente se asustó. Traté de decirle que somos amigos, pero no quiso escucharme ―explica el hombre a la defensiva.

Miro a Sehun con los ojos abiertos.

―¿De verdad conoces a este tipo?

―Baek, nene ―dice Sehun, en voz baja mientras se me acerca―. ¿Puedes bajar el cuchillo? Por favor.

Estoy tan lleno de adrenalina que no puedo mover el brazo. Sehun me agarra por la muñeca y arranca el cuchillo de mi mano, lo arroja al fregadero antes de que me tome en sus brazos.

―Lo siento mucho. No pensé que te despertarías temprano y me sorprenderías con el desayuno. ―Él besa la parte superior de mi cabeza y sigue acariciando mi cabeza, tratando de calmarme―. Este es mi amigo, Chan. Él es el único que vino en la moto anoche. ―Pongo mi cabeza en su pecho y miro a Chanyeol mientras se pasa la mano por su cabello y sonríe.

―Siento haberte asustado. Es bueno conocerte finalmente ―ofrece.

Me alejode Sehun hasta que mi espalda golpea la esquina donde los lados del mostrador se encuentran. Pongo la mano en mi pecho mientras trato de calmar mi corazón.

―Tengo demasiada resaca como para tener miedo ―me quejo. Luego, mirando a Chanyeol, trato de darle una sonrisa amistosa―. Es un placer conocerte también. Pido disculpas por enloquecer.

―No hay necesidad. Creo que si fuera tú, y entrara para encontrar... bueno... para encontrar a alguien como yo sentado a mi mesa de la cocina, también tendría un ataque.

taking sehun  |  sebaek.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora