Photograph ; hemmings

Capitulo uno

*Narra Izzie*

Era un día de clases normal como cualquier otro. Iba caminando por el pasillo de la escuela para dirigirme a mi primer clase del día cuando de repente veo al profesor Coleman (mi profesor de historia) quitándose un moco de la nariz y llevándoselo a la boca. La primera impresión que tuve al verlo fue de asco y gracia a la vez pero aguante las ganas de reírme.

Como soy la encargada el la sección de fotografía escolar decidí tomarle una foto en ese incomodo momento y subirla a la página web del instituto. No pensé que sería nada grave porque me pareció mas gracioso que otra cosa pero no fue así. Cuando el director Lovering se enteró de la existencia de la foto prácticamente enloqueció ya que consideró que lo que había hecho fue una falta de respeto pero yo no pensaba así, para mi solo era una broma inocente. Entonces me citó en su despacho para hablar sobre ello.

Golpeé la puerta de su oficina. -Adelante señorita Jones.- A pesar de lo gracioso que fue todo estaba aterrada,nunca antes había estado ahí antes por tener problemas de conducta y mucho menos pensé que lo estaría por un tema tan simple. -Tome asiento por favor.- Dijo el director sin levantar la mirada de su registro hasta que por fin decidió verme y preguntó.-¿En que estaba pensando para tomarle una foto al profesor Coleman en ese estado?

-No volverá a ocurrir.-Hablé con una voz suave y preocupada.Me había metido en en lío por algo tan corriente como una fotografía.

-Señorita Jones usted no es una alumna que hace este tipo de cosas, todo lo contrario es una de las mejores que hay en este instituto. Aún no puedo creer que esté sentada en mi oficina por tener problemas de conducta.-El director insistía que me disculpara con el profesor de Historia pero no me importaba, perdón era la única palabra que podía decirle.

Después de varios minutos de reproche me desorientó de la conversación con el director un pequeño ruido que salió de la ventana de la habitación. Miré y pude visualizar un par de hermosos ojos azules, solo podía ver sus ojos porque el resto de su rostro estaba tapado con la cortina de aquella ventana, seguro el cielo debe envidiar ese perfecto color. Su mirada estaba clavada en la mía, observándome como si quisiera traspasar sus ojos a través de los míos. Era imposible reaccionar cuando tenias algo tan perfecto frente a ti.

-¡Señorita Jones preste atención mientras le hablo!-El director levantó un poco la voz haciendo que chocara con la realidad.

-Lo siento.-Me disculpé volviendo la mirada hacia el.

-Señor Hemmings, no le han enseñado que es de mala educación escuchar conversaciones ajenas.-Preguntó el director retóricamente.-Puede pasar.

Entró un chico alto y con cabello rubio peinado hacia arriba.Vestía unos jeans negros que tenían un agujero en la rodilla derecha,una camiseta negra con letras blancas que decía YOU COMPLETE MEss y unos converse negros.Me fijé en su rostro y me dí cuenta que era el dueño de esos ojos azules que me habían distraído por unos segundos, también tenia un piercing de metal negro colgando de su labio inferior.Era demasiado perfecto,demasiado perfecto para ser verdad. -Lo lamento,aquí esta lo que me pidió.- El rubio se disculpó y le entregó al director unos papeles.Él los leyó y los volvió a leer varias veces.

-Bueno Hemmings, tus datos están en orden.Eso significa que ya eres un alumno mas del instituto, bienvenido.-

-Muchas gracias señor, no voy a desaprovechar la oportunidad se lo prometo.-Dijo el chico de ojos azules serio.

-Director Lovering.-Lo corrigió el y el chico asintió con la cabeza.-En cuanto a usted señorita Jones tendrá que disculparse con el profesor Coleman por lo sucedido, no voy a aplicarle ningún castigo ya que lo que hizo me pareció inofensivo así que espero que con la charla que le dí sea suficiente para que no lo vuelva a repetir otra vez.

-No volverá a pasar, se lo prometo.-Suspiré aliviada pensando que tomarían medidas drásticas como expulsarme o algo parecido.

-Señorita Jones sería tan amable de enseñarle a Hemmings su casillero, es el número 18.-Pidió el director y yo solo asentí mientras me daba las llaves.-Ah casi lo olvidaba, aquí tiene pero sea mas responsable con ella esta vez.-Me devolvió mi cámara de fotos.

-Gracias.-Sonreí ampliamente, por un momento pensé que no la iba a volver a ver nunca. Estaba contenta de volverla a tener en mis manos y solo había pasado unas horas sin ella.

-Ahora si pueden retirarse.-Ordenó el director y salimos de su oficina.

Todos estaban en sus respectivas clases así que el instituto en ese momento era un como un desierto.El chico nuevo y yo caminamos por el pasillo, el ambiente estaba tenso y se mostraba un silencio incomodo pero no sería yo la que iba a hablar primero porque soy muy tonta cuando se trata de de ser sociable, no iba a meter la pata diciendo cualquier cosa. De vez en cuando podía sentirlo mirándome de reojo pero decidí ignorarlo porque si le hacía caso a esos pequeños detalles terminaría poniéndome mas nerviosa de lo que aún ya estaba.

Llegamos a su casillero y le entregué las llaves, como ni siquiera tuve el valor para decirle "bienvenido" debido a mi timidez decidí irme a mi clase. Pero antes de que pueda darme media vuelta una voz ronca habló.

-Me pareció divertido lo que hiciste con el director.-No me miraba a los ojos, solo abrió su casillero y metió unos libros comos si no hubiese dicho nada.

-¿Escuchaste todo?-Le pregunté frunciendo el ceño.Sé que estuvo conmigo en la oficina del director la mayoría del tiempo pero no creí que sabía tanto.

-Yo solo estaba ahí para entregar mi inscripción, escuché bastante.-Frío y distante eran las palabras con las que podía describir a este chico. Cada palabra que salía de su boca las decía sin expresión alguna.

-No suelo hacer esa clase de bromas,es solo que pensé que no sería nad...-Dije rascándome la nuca, solía hacer eso cuando estaba nerviosa y entablar una conversación con el me ponía de ese modo. Pero el chico de lindos ojos me interrumpió.

-Sabes me encantaría seguir charlando contigo pero tengo clases ¿Dónde esta el salón de Ética?-Preguntó soberbio. Si iba a tratarme de esa forma para que demonios me hablaba.

-Siguiente pasillo, primera puerta a la derecha.-Le indiqué guardando mi cámara de fotos en la mochila.-No importa, yo también tengo clases.-Fingí no estar molesta por su actitud.

-Te veré luego.-Dijo seco mordiéndose las mejillas .

-Si eso creo.-Susurré confundida. Esta fue la conversación mas incómoda que jamás he tenido.-Adiós.-Me despedí mientras me alejaba caminando a mi clase.

-Adiós Isabella.-Abrí los ojos como platos cuando me llamó por mi nombre. Dí media vuelta para preguntarle como era que lo sabía porque no nos habíamos presentado y yo ni siquiera sabía el suyo. Pero cuando voltee era tarde,el ya no estaba solo yo era la única persona en ese pasillo.