Capitulo dieciséis

652 122 71
                                    

Luke no me dio tiempo de articular palabra alguna, ni siquiera de pensar que debía responder ante ello. Sus labios se estrellaron en los míos provocando que el suave tacto de estos lograran causar un cosquilleo en mi interior. No sabía que hacer, si corresponder o no. Pero mientras mas lo asimilaba una chispa de deseo se desataba dentro de mi haciéndome saber que no aceptaría separarme de él. Nuestros labios se movían en sincronía de una forma pasional, sin llegar a perder el toque de suavidad que solía agradarme. Era como si Luke y yo nos necesitáramos y no lográbamos quedar satisfechos el uno del otro.

Cuando los labios de ambos quedaron desunidos  ninguno de los dos formuló nada. Las miradas bastaban y las palabras sobraban, aquel momento era perfecto para no hablar. En ese instante recordé el reproche que Luke me planteó hace tiempo en el bar donde tomamos el café. ¿Porque siempre arruinas todo con tus preguntas? No me había dado cuenta que lo hacía, pero por mucho que me costara admitirlo era cierto. Es interesante como tan solo un par de palabras pueden desmoronar lo construido en un abrir y cerrar de ojos.

Luke se puso de pie para guardar en su funda la guitarra que había dejado a un lado. Colgó la mochila en su hombro para así abandonar el salón de música, pero antes de marcharse se detuvo en la puerta para observarme detalladamente y con inquietud jugueteó con su piercing haciendo que este se corriera un poco de su respectivo lugar.

-¿Te veré mas tarde? ¿Verdad?- Dijo con impaciencia, aún sin quitar su aura de mi. Asentí con la cabeza y él también lo hizo elevando las comisuras, sorprendido de que no me negara ante su propuesta. Luego de nombradas acciones lo vi desaparecer del ambiente.

                                                                                (...)

Fue la jornada escolar mas larga que he tenido que experimentar hasta el momento. En el fin de las clases después de lo sucedido con Luke no he conseguido volcar mi concentración en otra cosa que no sea en el beso que nos dimos. Nunca dejé que una persona me tomara por completo sin embargo él conseguía tener ese efecto en mi. Encasillar cuales eran mis sentimientos hacia él no era fácil. Porque la palabra sentimiento era demasiado grande, y decir que no sentía nada era innegable. Todo sería mas sencillo si tuviese en claro las cosas pero la claridad en estos momentos era escasa. Hacía memoria una y otra vez intentando cuando Luke pisó por primera vez el instituto. Su saber hacia mi no era normal y las posibilidades de que él me conozca  o me hubiese visto antes eran altas. La idea de que Luke sintiera algún tipo de atracción desde antes de que fuese alumno del instituto invadía mi cabeza sin previo aviso, y lo peor de todo era que él se sigue rehusando a responder mis dudas.

-Avísame cuando dejes de volar así volveré a hablarte.- Michael sentenció, chasqueando sus dedos muy cerca de mi rostro para que despertara de mis pensamientos.

-¿Nos vamos a casa?- Quise saber.

-Es lo que te estuve preguntando desde hace como diez minutos pero no respondes.- Se quejó.

- Lo siento.- Pedí disculpas.

-¿Que es lo que te sucede hoy?- Michael preguntó curioso.- Nicole me dijo que fuiste a buscar algo en el salón y luego nunca regresaste.

-No tenía muchas ganas de volver a la cafetería, eso es todo.- Me encogí de hombros. Él y yo no guardábamos secretos entre nosotros, pero no me entusiasmaba mucho contarle a Michael que Luke y yo nos besamos. Al menos no por el momento.

-De acuerdo.- Resopló, insatisfecho por no lograr sacarme algún tipo de información.- Si no quieres decirme.

Cuando uno no quiere escucharse a si mismo los auriculares con el volumen al máximo son la solución a todos los problemas. Pero es probable que mis tímpanos exploten porque sin importar que tan alta esté la música de mi reproductor las memorias de lo ocurrido hoy con Luke conseguían tomarme. Aún sigo sin comprender como fue que llagamos a un beso. Parecía que solo hace una semana Luke puso un pie en el colegio y hasta un par de horas ya nos habíamos besado. Las cosas pasaban tan rápido y tan lento a la vez. Meses atrás podía imaginarme a mi negando rotundamente ante la idea de él y yo teniendo ese tipo de acercamiento. Pero al sentir sus labios conectar con los míos decir que no quería desprenderme de ellos era poco, era como si aquel momento fuese al aire que necesitara para respirar. Luke me gustaba, y estoy segura que si me disponía a avanzar con él todo sería mucho mas difícil de lo que parece.

Photograph ; hemmingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora