•Cuentos de media noche• (Sᴏɴᴛᴀɪʟs)

XXXVI

Algo confundida, empieza a preguntar a los trabajadores.

-Eh... Chicos, ¿dónde está Sonic?, jeje...- Realmente la coneja no se encontraba feliz, se encontraba bastante molesta.

Su jugada de "enterrar a Tails" con su lindo vestido no había sido suficiente. Ella sacaba humo.

De vuelta con Tails...

Al sentarnos, Rouge y yo fuimos consentidos por Sonic, trayéndonos unas ricas hamburguesas recién hechas.

-Podría acostumbrarme a esto- Decía Rouge mientras saboreaba la deliciosa hamburguesa repleta de queso.

-¡Están deliciosas, Sonic! ¿Las hiciste tú?- Después de preguntar, Sonic se me quedó viendo con cara seria, para después soltar una carcajada.

-Créeme, si las hubiese hecho yo, ninguno de los dos saldría vivo de aquí-

Al terminar de comer, Rouge se levanta del asiento, agradeciendo por la deliciosa comida para posteriormente irse a su estudio nuevamente. Dejándonos a Sonic y a mí solos.

El cobalto abrió la boca, pero antes de que empezara a hablar, Cream aparece detrás de él.
-Hola Sonic, siento interrumpir... Bueno, no opinaste nada sobre mi vestido...- Decía Cream con un tono triste y tomándolo de la mano, intentando manipularlo.

-Oh, no te preocupes Cream... No interrumpes- Interrumpí sarcástico, levantándome de golpe y entrelazando mi mano con la de Sonic, haciendo que este se sonrojara.

Cream observó la acción y se mordió las mejillas, sabía que quería matarme en ese mismo instante, pero ambos sabíamos que no sería frente a Sonic, así que le sonreí de manera falsa y burlona.

-¿Y bien?- Cuestiona Cream, esperanzada de poder quitarme un poco de la atención de Sonic.

-Oh sí, lo siento. Es que Tails y yo ibamos de hablar de algo importante, ¿entiendes, no? De todas formas, te ves bien- Dijo Sonic mientras daba palmaditas a la cabeza de Cream, haciendo que esta rodara los ojos y se fuera rápidamente de la cocina, dejándome solo con Sonic.

-¿Puedo saber por qué tomaste mi mano tan de repente?- Pregunta Sonic, haciendo que me pusiera nervioso, sonrojándome al instante.

-Bueno, yo...- Dije, sin saber qué responder.

Después de escucharme decir lo anterior, sonríe.
-No te preocupes, pequeño. Está bien, soy solo tuyo- Dijo mientras me abrazaba, correspondiéndole al instante.

Lo que ninguno de los dos sabíamos, era que Cream estaba escuchando todo.
-Así que... Solo de Tails, ¿eh? Ya veremos-