XXVIII

1.5K 160 69
                                    

-Yo... No quise molestarlos chicos, me voy- Dije intentando no alertarme y salir corriendo despavorido.

De repente, un chico águila me toma del cuello y me levanta, examinándome totalmente. El ave levanta la ceja impactado por ver las cosas de valor que llevaba conmigo (Anillos, mis tenis y la ropa que tenía en ese momento).

-Por

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Por... Por favor, sué... Suélteme.- Supliqué.

Haciendo caso omiso, el águila llama a sus otros amigos.
-Hey, vengan aquí. Este niño es riquillo, vean todo lo que tiene aquí... Lástima que tu guardaespaldas te ha perdido, mocoso.- Dijo mientras se acercaba cada vez a mí, apestaba a cigarro por lo que hice un gesto despectivo por el olor.

Los otros chicos se acercan a mí y me observan minuciosamente... Me sentía aterrado, quería huir pero me encontraba paralizado del miedo.

-Chicos, chicos... Por favor... Podemos llegar a un acuerdo, ¿no?- Dije con una risita nerviosa.

-¿Y qué jugosa propuesta nos traes, eh?- cuestionaba el águila desafiante, aún sosteniéndome del cuello.

-¡PUEDO DARLES TODAS MIS COSAS! Pero si da igual lo material, no se preocupen... Les daré todo lo que tengo pero por favor déjenme ir... - Contesté casi asfixiado.

Los pandilleros se miraron entre ellos, como si se comunicaran telepáticamente. Después de unos segundos de un debate silencioso, voltearon hacia mí.

-Vale, creo que hemos decidido que hacer contigo- Contesta uno de los pandilleros.

-¿Ah sí? ¿Me dejarán ir?- Dije con una sonrisa forzada.

-No.- Uno saca una bolsa negra.

-NO!-


...

En otro lado...

-¿Me creen, cierto?-

La eriza rosada y la ardilla asienten con la cabeza, totalmente impactadas con la historia que su amo les había contado.

-Chicas, tienen que ayudarme... No sé por donde empezar a buscar a Tails.- Comentaba el Cobalto con ojos llorosos.

-Él es todo lo que quiero...-

De vuelta al orfanato...

De ver todo en negro, pude ver la luz... Bueno, no de la manera en la que me gustaría, debido a que estaba atado de las manos y pies, en el que parecía ser el sótano del orfanato.

Pude escuchar a los pandilleros desde lejos.
-Intentaré venderlo al mejor postor... Díganme ignorante, pero no sé a que familia pertenece... O si en verdad creció en el seno de una familia poderosa, pero veré que podemos hacer, ¿vale?- Decía uno de ellos a lo lejos.

Estaba asustado, no podría decir que fui un niño rico de nacimiento, pero si descubrían a la familia que me había acogido cuando más lo necesitaba (Sonic) podrían hacerles daño.

Entre tanto pensamiento, los tipos volvieron hacia mí. Con la intención de tomarme a la fuerza, cerré los ojos por instinto...

Pero de repente, una sombra se ve a lo lejos. Había aparecido de la nada, justo detrás de los pandilleros.

¿Quién podría ser?

•Cuentos de media noche• (Sᴏɴᴛᴀɪʟs)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora