46. Hombre malo

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Quien con monstruos lucha, cuide de convertirse a su vez en monstruo. Cuando miras largo tiempo a un abismo, el abismo también mira dentro de ti. 

Friedrich Nietzsche


N. de la A.

Ya he puesto estos caracteres antes [...] y en este capítulo vuelven a parecer. Indican que se omitió un fragmento del texto. Esto para no alargar el texto y no hacerlo redundante (porque son detalles que ustedes ya los conocen)



La arena les picaba la piel y les golpeaba el rostro, sus pies poco a poco se iban cubriendo del polvo dorado, era evidente que la tormenta estaba tomando fuerza, sin embargo nadie se atrevía a decir algo. Los que estaban suficientemente cuerdos, podían escuchar a Temari tragarse sus propios chillidos y a Shikamaru diciéndole que se controlara; Kankuro decía algo para sí mismo que no era entendible para los demás, o tal vez, quizá sí, pero cada quien luchaba contra sus propios pensamientos y trataban de encontrar lógica para lo que en ese momento se suscitaba. 

No solamente lidiaban con el hecho que se habían llevado a su amiga, compañera, hermana y amante. Los secuestradores habían dejado un vestigio que era evidente, pero difícil de resolver.

Podría decirse que Ino era la persona que estaba psicológicamente más preparada, no obstante, eso no evitaba que sintiera un horrible puñal en su pecho y unas inmensas ganas de gritar cuando escuchó las palabras... "Se llevaron a mami" ¿Cómo saber que alguien estaba tras ella? Y era su culpa. Sakura, su mejor amiga, aquella mujer que consideraba su hermana se la habían llevado... pero iban a recuperarla.

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Ino no sabía cuánto había pasado desde que Gaara consolaba los lamentos de Joshira. Este seguía con su carita enterrada en el pecho de Gaara, mientras que este acariciaba sus cabellos y frotaba su espalda tratando de consolarlo.

—Gaara –dijo finalmente Ino yendo hacia ambos y tocó su hombro suavemente para llamar su atención- necesitamos seguir, una tormenta se acerca y debemos decidir qué hacer. También Joshira está herido y necesito curarlo.


Gaara seguía en shock, así que agradeció el gesto de Ino de indicarle qué hacer, en ese momento le era imposible decidir por sí mismo como actuar o qué pensar.

Todo le era tan confuso y tenía mucho miedo dentro de sí, justo en ese momento estaba abrazando a su hijo malherido y justo en ese momento la única mujer que ha amado podría estar en un grave peligro, más que miedo, estaba aterrado.

—Gaara, por favor –volvió a decir Ino que ya estaba hincada a un costado de Gaara tratando de separarlo de Joshira y poder obtener algo de información, antes de que fuera demasiado tarde.

La voz de Ino que los demás también quisieran acercarse, pero ella les lanzó una mirada y los señaló con su dedo índice en señal que se quedarán detrás de ella.

—Joshira, mi pequeño sobrino adorado –dijo Ino una vez que Gaara había soltado un poco a Joshira- ¿Puedes decirme qué pasó? –preguntó con voz sumamente cautelosa, tratando de no sonar asustada, pero sí siendo muy directa.

—Tía Ino –nombró Joshira comenzando a sollozar y fue directo a ella para abrazarla y volver a buscar una protección que le había sido arrebatada- fue mi culpa, se llevaron a mami por mi culpa.

—Joshira –llamó Kiba que decidió acercarse y tratar de ayudar en algo- personas malas se llevaron a tu Madre, pero las vamos a buscar y la rescataremos. Sé que tú trataste de ayudarla, pero ellos eran más fuertes, por eso no tienes porqué sentirte mal, al contrario, yo sé que tú hiciste todo lo posible para ayudarla en ese momento.

Accidentes Inevitables.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora