Historias Cortas De Mpreg Y Omegaverse

119 Cuarta Historia

Puesto que Ai había tenido que ver los negocios de su jefe por casi un año, en el medio se había corrido la voz de que Ai siempre había sido el jefe y que Liam había sido un mero representante. Ai era unos años mayor que su jefe por sobre los 30 pero sin llegar a los 40, por lo que era creíble, el alfa no solía prestar mucha atención a su aspecto personal y físico por lo que seguía sin entender porque se lo creían. Ai se miró al espejo, su aspecto no era el de un impresionante alfa de alto nivel ni nada de eso, ese era Liam. El era un un Alfa de bajo nivel al cual seguir órdenes no le molestaba, había entrado a la organización cuando era el padre de Liam quien la lideraba, así que técnicamente llevaba cerca de 20 años en esa vida. Los rumores eran preocupantes porque eso ponía un blanco en su cabeza ¿Porqué esos imbeciles seguían creyendo eso? Ai llevaba un traje barato, para ser un Alfa era un poco bajo no excesivamente pero tampoco era como su jefe, el también tenía algo de grasa en el estómago por beber demasiado:traía el cabello alborotado y no tenía el porte que un mafioso debería tener, esto fue lo que le dijo a Liam mientras platicaban sobre sus negocios.

-Tu aspecto no tiene nada que ver -Liam lo miró, Ai era un gran amigo a pesar de que había tenido intenciones de matarlo varias veces-. Recuerda a Malaquias y al padre de Gio, ellos no se veían tan bien y era jefes de sus respectivas organizaciones.

-Lo se, pero no tiene sentido, yo no soy tan impresionante como para ser un jefe de la mafia.

-¿Quieres dejarlo? -tener un socio se sentía bien, pero no lo iba a forzar.

-No...no lo sé.

-Me costó mucho resolver mis asuntos después de que aiden me arruinó, pero lo e solucionado y los bebés ya tienen 6 meses por lo que si lo quieres dejar lo entiendo, sera difícil perder a mi socio pero lo entiendo.

-¿Socio? -Ai lo miró.

-Pues si, has demostrado ser un buen amigo a pesar de que yo no siempre soy el mejor y tuve planes muy crueles en tu contra. Además...fuiste por mi y eso es algo que nunca voy a dejar de agradecerte.

-¿De verdad querías matarme?.

-Si.

-De haberlo sabido te habría dejado con tu loco hermano -Ai bromeó intentando aligerar el ambiente-. ¿Crees que sea buena idea?.

-¿Qué cosa?.

-Ser tu socio -Ai no sabia como ser un jefe mafioso, ese no era su plan.

-Si, ya ocupaste mi puesto y la realidad es que tienes cabeza para esto y...con Bex y Aisén manipulandote te tendré de mi lado mucho tiempo -Bex había nombrado a su hijo como el tipo que lo había rescatado a él y a sus amantes y Ai no podía estar más feliz de que ese lindo bebé llevara su nombre, por su parte Gio había nombrado a su hijo Ian.

-Estoy muy feliz con eso, quiero mucho a Bex -a pesar de que Bex estaba muy cerca de los 30, su apariencia, personalidad y frescura hacían sentir a Ai que era muy joven y necesitaba protección. Esto saciaba de manera sana su necesidad alfa de proteger a un omega y sin levantar esperanzas de nada en nadie.

-¿Quieres un balazo también? -Liam bromeó.

-¿Te molesta el nombre de tus hijos?  Ellos casi se llaman igual que tu y Aiden.

-No quería que ninguno se llamara como yo, creo que este nombre está maldito, mi bisabuelo se llama Liam. A él lo mato mi abuela que le puso a mi padre Liam y a él lo mato Aiden, solo espero que la historia no se repita y mis hijos no me maten.

-Son unos niños maravillosos.

-Lo se, estoy muy feliz y por eso te voy a enviar a trabajar y a encargarme del resto de las cosas desde casa.

-Así que era eso -Ai fingió ofenderse.

-Si, me gusta hablar contigo.

-A mi también, estas mucho más relajado ahora.

-Desde hace tiempo quiero preguntarte algo -Liam lo miro serio al mismo tiempo que ponía su trago sobre la mesa de la sala donde charlaban.

-No.

-¿No?.

-No -Ai sonrió-. No estoy, nunca estuve y nunca estaré enamorado de ti ¿Eso era lo que ibas a preguntar?.

-Si -Liam se veía confundido-. Esta bien pero...¿Porqué no?.

-Diré esto con todo el respeto del mundo ya que a pesar de todo siempre serás mi jefe y te obedecere, pero tu eras un idiota, el peor imbécil que yo hubiera visto jamás con buena cabeza para los negocios pero parecía como que no supieras que hacer en la cama y a mi me gustan mis alfas más...digamos con mas experiencia.

-Y eso que lo dijiste con respeto.

-Es la verdad ¿Pero sabes quien si me gustaba?.

-¿Quién?.

-Tu papá, me habría puesto de rodillas ante el en cualquier momento si me lo hubiera pedido, el tipo me volvia loco.

-Que horror - Liam puso los ojos en blanco.

-Usted preguntó señor -dijo solemne y con diversión.

-Hace tiempo que dejaste de decirme señor.

-Lo hice?.

-Si, y me parece bien, sobre todo ahora que esto es una sociedad.