To You | Kavin x Thyme |

06

Pronto oscureció más, Kavin estaba de pie en la puerta de la habitación.

—¿Seguro que estarás bien?—preguntó.

—Lo estoy, vete.

—¿Si sabes que regresaré en unos días?—Thyme asintió—Descuida que no le diré a nadie y ten, algo de dinero por si surge algo.

Kavin le entrego algo de dinero, Thyme lo aceptó porque quería comer cosas deliciosas y porque entre ellos no existía tal cosa como avergonzarse por algo así, tantos años de conocerse formaba esta clase de confianza.

—Cuídate.

Y sin decir algo más, sonrió de lado y se fue, Thyme lo vio hasta que su espalda desapareció en el pasillo.

Cerró la puerta y fue a dormir, ahora se sentía un poco mejor, sabía Kavin guardaría su secreto y lo protegería hasta que quisiera volver. Realmente se sentía feliz de haber hablado con su amigo, era algo que extrañaba, platicar con alguien conocido.

Los días siguientes fueron mucho mejores, Thyme comió delicioso, pudo conseguir algo más de ropa y dejaron de cobrarle por dormir en el motel, ¿esos eran los beneficios de tener un contacto llamado Kavin? Por que si era así, le pediría a su amigo que viniera más seguido.

Aún asi, Thyme no dejó de ayudar a la señora, cada que ella lo necesitaba, él estaba ahí. La gente del pueblo era muy amable y comenzaban a integrarlo, la mayoría era gente algo mayor, Thyme nunca había experimentado el amor de los abuelos así que era como si ellos lo fuera.

Se cumplió una semana y cuando Thyme terminaba de beber agua, pudo ver como el auto de Kavin se estacionaba, se despidió rápidamente y corrió hasta el auto.

Kavin hablaba por teléfono así que no se dio cuenta de que Thyme estaba a su lado, este quiso asustarlo y tocó la ventanilla del auto, desafortunadamente Kavin no se asustaba fácilmente con cosas como esas, solo sonrió, terminó la llamada, salió del auto y pellizcó juguetonamente la nariz de Thyme.

—¿Ya comiste?—fue lo primero que preguntó.

—No, ¿acaso me vas a invitar tu?

—Vamos, conozco un buen restaurante.

Kavin comenzó a caminar hacia la dirección opuesta, Thyme lo siguió poco después, algo se sentía extraño, Kavin caminaba con las manos en los bolsillos de su chamarra y miraba a su alrededor pero sin prestar atención en algo en específico, solo se detuvo después de algunos minutos frente a un restaurante algo sencillo, abrió la puerta y dejó que Thyme entrará primero.

Cuando ambos ordenaron comida, Thyme se atrevió a preguntar.

—¿Qué sucede contigo? ¿Está todo bien?

Fue en ese momento que Kavin lo miró a los ojos y asintió.

—Si, ¿por qué preguntas?

—Es que estás muy serio para ser tú.

—Thyme—comenzó a decir—¿Aún quieres encontrar a Gorya?

—Claro que quiero, ¿por qué? ¿Encontraron algo?

—Aún nada.

—Ella solo desapareció Kavin, ustedes dijeron que sería difícil encontrarla—suspiró—Solo quiero preguntarle algo.

Kavin llamó al mesero y pidió algo de alcohol.

—¿Quieres beber conmigo?—preguntó.

Thyme asintió y bebió de su vaso, el no solía hacerlo, pero al recordar a Gorya, realmente quería desahogarse, después de ese momento, ya no supo bien lo que pasaba a su alrededor, la voz y rostro neutro de Kavin estaban borrosos, su propia voz se sentía extraña, de pronto se encontraba llorando recargado en el hombro de Kavin.