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Después de pasar todo el día consintiendo a su mejor amigo, Jimin había tomado una decisión. Se sentía estúpido pensando que al menos Jeon respetaría el no acostarse con nadie más mientras estaba él.

Sin importar la noche, tomó su auto y fue directo a la mansión Jeon, el guardia de seguridad lo dejó pasar sin preguntar nada, el hombre sabía que ese niño era un tesoro para su jefe.

Antes de bajarse del auto, la señora Lana salió de la casa a recibirlo. Jimin con una gran sonrisa saludo a la mujer y ella lo envolvió en sus brazos.

—Te extrañe un poco el día de ayer pequeño— confesó la mujer.

—Taehyung me necesitaba nana— mencionó con cariño el menor.

—¿Como esta él?— pregunto ella.

La señora Lana aun no conocía al peliazul, pero había escuchado a Jimin hablar tanto de él que pensaba que hasta lo había visto crecer.

—No esta muy bien, aun no ha querido decirme que paso.

—Eso no suena bien—dijo la señora.

—Lo se, me preocupa un poco— él rubio había estado tratando de saber que le pasaba a Taehyung pero él solo evadió todo y él respetaba eso, su mejor amigo se lo diría cuando este listo.

—¿No vas a pasar? Kook no tardará en estar aquí.

—¿Aún no ha regresado?

— Llamo para decirme que tardaría un poco para la cena, ya que tuvo una reunión a último minuto.

Si claro, entre las piernas de esa mujer— pensó el rubio.

—Vamos a dentro, lo esperare ahí.

Y así lo hicieron, se encontraban en la cocina bebiendo un poco de té y algunas galletas que Lana había preparado.

—Te notó un poco pensativo ¿Hay algo que no esta bien?

Jimin bajo la mirada a su té.

—Es solo que ... Quizá esta sea la última vez que me vea por aquí.

Lana lo miro sin entender nada, y Jimin levanto su vista de su té.

—Lo que quiero decir es que, es un poco difícil estar con Jungkook, muy pocas veces entiendo lo pasa por su cabeza y no se si quiera pasar por esto por más tiempo.

—Entiendo— habló ella— Jungkook no es una persona fácil de llevar, pero pensé que tu tenias el control.

—¿Que yo lo tenía?— pregunto él con sarcasmo— No creo que lo haya tenido ni por un segundo.

—No me parece así, realmente no entiendo que es lo que ustedes dos tienen pero algo si puedo asegurarte, no eres como los demás Jimin. Yo jamas creí presenciar el día que Jungkook estuviera enam...

—Veo que estas aquí— habló una tercera voz, interrumpiendo la conversación.

Las dos personas que estaban en la cocina voltearon y se encontraron con un muy serio Jungkook.

—Pasemos a mi despacho— ordenó el hombre si decir más.

El rubio antes de seguir al mayor miro a Lana y ella le sonrió dándole ánimos.

Jimin siguió al despacho al hombre frente a él, por lo que podía notar Jungkook estaba muy tenso y demasiado serio.

—Espero que estés aquí para darme una explicación de tu comportamiento, o al menos una disculpa— mencionó el mayor tomando asiento y cruzándose de brazos.

Jimin lo miro y soltó una risita, de verdad no  podía creer que este hombre fuera tan idiota.

—No tengo porque darte explicaciones de nada y mucho menos disculparme.

El pelinegro lo miro a los ojos, su mirada podía intimidar a cualquier pero Jimin no iba a ser uno más de las personas que estaban a sus pies.

—Ya veo, si es así te pediré que te retires de mi casa.

Para Jimin fue un poco duro de escuchar, de verdad este hombre no tenía corazón, ni sentimientos por nada.

—Esta bien, lo haré, pero antes me gustaría hacerte saber una cosa.— dijo el rubio firme y con toda la seriedad que se le permitía.

—Dime.— Jungkook se cruzo de piernas y llevo su dedo índice a su labio.

—Quiero terminar con todo esto.— inmediatamente el rubio termino sus palabras, el mayor bajo su pierna y se sentó alarmado.

—¿Que quieres decir con "terminar esto"?— interrogó volviendo rápidamente a su postura.

—Usted sabe a lo que me refiero con "esto"— Jimin se cruzo de brazos y lo miro fijamente— No quiero seguir teniendo sexo con usted.

El pelinegro por dentro estaba descolocado, no entendía porque el rubio estaba tomando esta decisión, y el extraño sentimiento de perder estaba atacando su mente, ¿o era su corazón?

—¿Puedo preguntar por qué tomaste esa decisión— pregunto desinteresado, o al menos eso quería aparentar.

—Creo que aprendi lo suficiente para conquistar a Tony— opinó el menor— Además a mi me gusta la exclusividad, y por lo que vi en las redes sociales usted no es alguien exclusivo.

Escuchar lo de Tony lo puso de mal humor, pero ahora creía entender porque el menor estaba actuando de esta manera.

—Estas celoso Jimin.— dijo con sorna.— Porque eso me pareció como un reclamo.

—¿Estas loco?— pregunto indignado el rubio— Estar celoso significa tener sentimientos por ti y créeme que lo único que siento por ti es lastima, ver como lo único que conoces es sexo y creeme no creo que pueda querer algo más allá de sexo no quiero nada contigo, eres alguien de pasatiempo.

Jungkook soltó una risa audible, estaba claro que se estaba burlando del rubio. Era más que evidente el motivo por el cual quería terminar con todo.

Jimin no podía permitirse estar ahí y que el idiota frente a él se estuviera burlando de sus sentimientos, aunque claramente trataba de ocultar que había evidentes celos.

Así que, descargo su enojo con las siguientes palabras.

—Esta tan metido en tu mundo perfecto, donde todos están a tus pies que piensas que yo haré lo mismo— dijo con sorna— No Jungkook, si yo estoy reclamando esto es porque respeto mi cuerpo y me da asco pensar que vas a tocarme después de tocar a alguien más— Esas palabras salieron tan crudas que Jeon se quedo en silenció.

—Controla tus palabras Jimin.

—Es todo lo que tenía que decir.

—Bien, entonces puedes retirarte— espeto con enojo.

El mayor no sabia porque aquello le había afectado tanto, Jimin salió del despacho y ni tan siquiera le regalo una última mirada

Las palabras de verdad llegaron a su mente,  el extraño sentimiento de angustia se estaba albergando dentro de sí, esto no podía ser así, esto no podía ser cierto.

Si era lo que pensaba que era, esto tenía que ser un error.

 𝐓𝐞𝐚𝐜𝐡 𝐌𝐞 𝐓𝐨 𝐋𝐨𝐯𝐞 ♜⌜𝓚𝓸𝓸𝓴𝓶𝓲𝓷 ⌟♜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora