𝐓𝐞𝐚𝐜𝐡 𝐌𝐞 𝐓𝐨 𝐋𝐨𝐯𝐞 ♜⌜𝓚𝓸𝓸𝓴𝓶𝓲𝓷 ⌟♜

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Dedicado a RocioGriselda0

Jungkook se encontraba en la cocina de su casa, estaba trabajando con su computadora mientras Hanna le cocina algo de comer.

Suzy por alguna razón también estaba ahí jungando o simplemente quitando comiendo un poco de fruta y él solo la ignoraba.

—Toma kookie, come algo— ofreció Hannah, había dejado un Sandwich bien preparado frente a él, algo de fruta y una par de galletas.

Suzy se acercó a él y lo abrazo por la espalda.

—Te ves hermoso trabajando— dijo con cautela.

—¿Que es lo que quieres?— pregunto sin ganas el pelinegro.

—Esto— tomó el plato lleno de galletas y corrió alejándose de Jungkook.

—¡Devuélveme eso!— Jungkook corrió para alcanzar sus galletas, todo mundo sabia que el odiaba que tocaran su comida. así que empezo a perseguir a la chica e iniciando un pequeño juego entre ambos.

El juego que fue interrumpido por el timbre de aquella enorme casa, el pelinegro no era tonto él sabía de quién se trataba y le sorprendió un poco saber que llegó a buscarlo tan rápido.

—Suzy— la detuvo quitando el plato— ¿Puedes ir abrir por favor?

—No te preocupes, iré yo— habló Hanna.

Jungkook la tomó del brazo y negó con  su cabeza.

—Ve tu Suzy— ordenó el hombre.

—¿Pero..

—Ve.

La chica un poco confundida fue directo hacia la puerta.

Hanna lo miraba con desaprobación, sabia que se trataba del joven Jimin. Mientras que Suzy caminaba hacia la puerta la mujer le reprochó sus acciones.

—Sabes que eso lo puede lastimar ¿Verdad?— Jungkook la miro inmediatamente— No quiero que salga lastimado ninguno de los dos.

—Por favor, ese niño— dijo con grandeza— No puede lastimarme.

La anciana entendía que Jungkook no reconocía la importancia de las palabras cuando el corazón se niega aceptar lo evidente.

El pelinegro quería darle una pequeña lección al menor, sabía que vendría a buscarlo en cualquier momento, pero él necesitaba hacerle entender que nadie podía tratar de despreciarlo y estar como si nada.

Jimin se encontraba nervioso y esperaba que Jungkook se encontrara en casa, quería disculparse pero no tenía intenciones de regresar a lo mismo con aquel hombre.

Cuando la puerta se abrió el rubio se sorprendió bastante y no fue muy agradable ver quien se encontraba en aquella casa.

El malestar en su estómago se situó rápidamente, y si estaba nervioso anteriormente, ahora se sentía patético.

—Jimin— dijo la chica, un tanto sorprendida.

La pelinegra volteo su vista hacia Jeon.

—Yo venía... yo vine...— para Jimin esta situación era la más incomoda posible. Era de esperarse que la otra persona de quien se refería Jungkook que conocía su casa no se trataba de Hanna sino de Suzy.

Ellos estaban saliendo públicamente y quizá era algo serio para Jungkook— o eso pensó el rubio.

Y en un instante el dueño de sus pensamientos estaba también frente a él.