Capitulo 6

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*Narra Violetta*

-Cof, cof, cof...- fingió toser mi madre, en realidad le agradezco haberme sacado de ese momento tan incomodo.

León se se coloco a la par mía pero no me soltaba de la cintura, como pude me sali de su agarre y lo fulmine con la mirada, quien se creía este para venir con su perfecta sonrisa y sus aires de seductor.

-¿Acaso ustedes se conocen?- pregunto mi madre curiosa.

-Hmm... de conocernos no, pero tuvimos un encuentro algo casual- dijo León.

-Yo diría incomodo...- dije algo divertida.

-¿Incomodo? ¿Y eso por que?- pregunto el Sr. Blanco levantando una ceja.

-Es que bueno...- lo interrumpí.

-La novia del señorito aquí presente, se monto una escenita en la heladería del centro, yo y mi novio queriendo que no atendieran nos acercamos y bueno no fue muy agradable nuestro encuentro- les conté a todos.

-Ohh por Dios... que vergüenza León, ya te he dicho que esa muchachita solo te trae problemas, deberías salir con alguien como Violetta- dije guiñándome un ojo -es una lastima que tengas novio, linda.- añadió Cecilia la madre de León.

-Es cierto harían muy buena pareja ustedes dos- dijo el Sr. Blanco.

OK, esto se había vuelto muy incomodo... cuando quise darle un momento incomodo a el, me lo montan a mi, esta noche seria muy larga.

-Bueno es mi turno de presentarte a mi familia- dijo mi padre, terminando con aquel incomodo que digo incomodo... torturante silencio.

-Ella es mi esposa Mariana... el es mi hijo mayor Francisco con 18, el es el hijo del medio Tomas con 18 también- como verán mi familia toma a Tomas como todo un Castillo de sangre - y ella mi pequeña muñeca Violetta Castillo con 17 años- dijo mi padre sonriendo.

-Es un gusto- dijimos Fran, Tomy y yo en unisono.

-Bueno ya que hemos terminado todas las presentaciones, ya podemos pasar a la mesa- dijo mi madre.

Todos corrieron literalmente hacia la mesa, yo por mi parte decidí ir con calma, cuando llegue me arrepentí totalmente de mi decisión, solo había un lugar y era junto a León... parecía que todos se habían puesto de acuerdo para que yo me sentara ahí.

-Vamos hija, siéntate... o piensas quedare ahí- dijo mi madre, mirándome fijamente.

-No claro que no- a toda cuesta me senté junto a León, quien me sonreía de forma sensual, le devolví una sonrisa mas falsa y mire para el frente.

Comenzamos a cenar tranquilamente. mientras el Sr. Blanco y mi padre charlaban animadamente sobre negocios, mi madre y la madre de León charlaban sobre las fiestas de alta sociedad, Tomy y Fran como siempre charlando sobre fútbol, la hermana de León solo se dedico a mirar y comer al igual que su hermano Daniel, por otra parte León se dedico a mirar mis piernas descubiertas, había olvidado el por que no utilizaba este vestido cuando me sentaba se subía demasiado dejando demasiado a la imaginación de otros.

-Podrías solo podrías... dejar de mirarme así- le dije en un susurro, para que nadie mas escuchara.

-¿Así como?- pregunto en un susurro haciéndose el desentendido.

-Así como si me fueras a comer, me provocas asco Blanco - le dije haciendo una mueca con la boca.

-Oh vamos- dijo riendo por lo bajo -se que te gusta, no lo niegues dulzura- dijo con una sonrisa amplia dejando a la vista esos perfectos dientes blancos, me distraje por un momento, cuando volví a poner mis pies sobre la tierra lo mire de manera fea.

Sweet Love #LeonettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora