Sin piedad. | Megumi Fushiguro x T/N +18 [FINALIZADA ✔️]

🍃 Capítulo 42 🍃

Salí del baño topándome a Hared.

Su mirada expresaba tristeza.

—Hared —lo tome del brazo

—__________, llegaste

—¿Tienes algo? —levante su barbilla para que me viera

—No pasa nada, ¿a qué hora sales hoy? —preguntó

—A las dos ¿por?

—Preguntaba solamente. Debo ir a clases, te espero al rato —aviso mientras me dejaba sola en el pasillo

—Hola sigo aquí te recuerdo —habló Gojo

—Ya se, debería colgar, ya fue mucho por hoy —saque mi celular y colgué sin pensarlo dos veces

Me uní a mi clase sin pasar desapercibida, saque mis libretas para ir anotando lo que está en la pizarra. Sentí vibrar el celular para sacarlo de inmediato, era Hared.

Ojitos bonitos.

¿Te puedes saltar las clases? No me siento bien, perdón por mentir _______ ):

¿Quieres que vayamos a un lado? ):

Sii, te invito un helado. Te espero en la entrada<3

Le tomé unas cuantas fotos a la pizarra para anotarlo después, guarde mis cosas para irme con Hared. Sabía que esa mirada no era un “no pasa nada” ¿qué Hared me mienta? Si que es raro.

Baje las escaleras que van a la puerta principal, salte los últimos escalones para ir corriendo a la salida, se veía su auto estacionado esperando recargado con la mirada al suelo.

—No vuelvas a mentir cuando te sientas triste por favor —golpee su hombro

—No lo haré más —me abrazo ocultando su rostro en mi cuello

—¿Me quieres contar? —acaricie su cabello

—Akira…

Akira es su novia.

—Le gusta alguien más —sollozó —Dijo que ya no sentía lo mismo por mí y que era un mal novio, piensa que estoy con ella sólo por su “fama” de niña rica, pero lo que más me dolió fue que me engaño

—¿Mal novio? ¿Está ciega o se hace? Eres realmente increíble Hared, muchas desearían estar en su lugar, tú no eres malo sabes tener una relación, eres dedicado, sabes escuchar, atento, delicado, sabes querer de manera sana y siempre tratas de dar lo mejor por tu pareja. Qué eso no te haga sentir mal eres mucho mejor que con el que se metió, se dará cuenta muy tarde lo increíble que eres como persona. Así que mejor que la dejaste no merece tenerte —sobe su espalda

—Me siento fatal _______, sabes lo mucho que la quería, era la única nunca mire a otras personas que no fuera ella, me dolió muchísimo

—¿Quieres ir a casa? —me aleje para poder verlo

Asintió.

Subimos al auto, me puse el cinturón de seguridad, lo mire y le sonreí. Puso el mapa con destino a nuestra guarida de niños. Pasamos a comprar unos helados para seguir con nuestro camino.

La guarida a la que me refiero es algo vergonzoso la creación de ella. Era principios de otoño cuando mi amistad con Hared creció, nuestros papás eran muy amigos desde la preparatoria, nuestras mamás se embarazaron casi al mismo tiempo pero diferente año.

Todos los días salíamos a jugar al bosque, a Hared le gustaba esconderse en las cuevas, hasta que un día tuvo un pequeño accidente; fue un error de ambos, ya era muy noche la única luz que teníamos era la de la luna llena, Hared era terco y quería escalar una pequeña montaña para poderse meter a la cueva. Yo insistí en que no porque no había más luz pero no hizo caso, empezó a escalar la pequeña montaña pero a mitad de camino una roca se desprendió y Hared cayó al piso de tierra, máximo eran unos cuatro metros de altura, él se creía una araña pero le falló creerlo. Lloraba en su máximo esplendor, siempre decía que nunca lloraría por algo absurdo para él.