Capítulo 10
Sin embargo, y a pesar de nuestro abrazo, una vez en la cocina no puedo hacer nada para evitar sentirme extraña y cohibida ante la atenta mirada de Nathaniel.
—¿Qué hacen aquí? —Pregunté un tanto consternada hacia Katy, Sam y Nathaniel.
—Dylan nos llamó, nos dijo que ya sabías sobre nosotros y los que somos, así que tuvimos que venir para verlo por nosotros mismos —se apresura a decir Sam.
—Bueno, ahora ya sabes que eres mi mate, no te puedes mantener más alejada de mí ¿entiendes? —Frustración, ira y enojo corren por los ojos de Nathaniel.
Doy unos cuantos pasos hacia atrás, por preocupación, y porque algo más dentro de mí, me dice que debo mantenerme fuera de su alcance. Yo no soy su mate y aunque lo fuera, él no tiene ningún derecho sobre mí.
Caly reparte vasos de limonada a todos en la habitación. Yo me lo zampo de un solo trago y espero a que alguien diga algo más.
—Eso está aún por verse Nathan —rompe el silencio Caly mientras se sube de un brinco a la isla para sentarse.
—¿Qué? —Nathaniel parece enojado.
—No sabemos realmente si ella es tu mate ¿sabes? Estamos esperando que lo sea, porque es lo mejor para la manada... pero hay un amplio margen de error y puede ser que Dani en realidad no sea tu mate —ella termina.
Nathaniel le dirige una mirada demasiado fría a Caly, pero ella no parece inmutarse. De hecho le responde con una mirada bastante seria y que no admite discusiones, me pregunto a qué se debe, pero no es un buen momento para preguntar por ese detalle ahora.
—Sé que ELLA ES mi mate —escupe Nathaniel, Sam pasa una mano por su hombro tratando de que se relaje, parece funcionar por poco, pero su mirada no abandona la expresión de recelo hacia Caly.
—No, no lo sabes. No puedes estar tan seguro de ello —le devuelve Caly.
La habitación está tan viciada que la tensión es casi palpable. Respiro agotada, esto no nos está llevando a ningún lugar. Y yo sólo necesito tener más respuestas.
—Dani parece enferma —comenta Jace con un tono divertido y afortunadamente logra que su madre y Nathaniel terminen con su guerra de miradas.
—¿Te sientes bien? —Pregunta Katy visiblemente angustiada.
—S-sí, es sólo... estuve con Austin y le hice algunas preguntas, pero él no respondió la última de ellas, me dijo que debería buscar respuestas en otro sitio.
Todos se miran en la sala, comunicándose algo que yo estoy lejos de poder entender.
Entonces Dylan carraspea y me anima a continuar —Si no nos dices de qué se trata, no podemos responderte.
Tomo aire y dejo que la pregunta salga de mi sistema.
—¿Por qué no siento nada dentro de mí? Es como si no hubiera nada... me hace sentir bastante humana.
Nadie me responde inmediatamente, pero a Katy le tira una sonrisa de las comisuras y espera atenta mirando fijamente a que Caly o Nathaniel contesten.
El último lo hace por fin —Creemos que es por un hechizo.
¿Un hechizo, en serio?
—Más específicamente un hechizo de barrera. Jace es bueno liberando a los lobos dormidos, ha habido más casos en los que el lobo de alguien está dormido —Caly toma aire y vuelve a retomar su discurso—, pero Anthony pudo notar que efectivamente una barrera se mantenía adherida a ti... de algún modo, suprimiendo a tu loba.

ESTÁS LEYENDO
Luna plateada
Про оборотней«Y todo lo que sabía se rompió detrás de mí» Si de por sí ser una adolescente casi adulta ya era difícil, ahora teníamos que agregar el hecho de que ella no es cualquier chica de dieciocho años. Daniela tiene que descubrir que hay una vampira vivie...