La rueda no gira sola. Necesariamente debe ser activada por algo o alguien. Pero una vez activa, la rueda cambia el mundo y la perspectiva del estado de las cosas. La teoría del movimiento cobra fuerza y vida cuando la rueda gira y gira, cuando la rueda cumple su función de llevarnos a algún lugar.
Ponte en movimiento. ¡Levántate! No esperes una señal o una orden. El rumbo de tu vida es más que una decisión, es movimiento, es acción. Ralentizar tus actos solo significa que la meta demorará más en llegar, si llega. Así que, cuando creas que no vale la pena, ¡muévete!, porque sí puede valer la pena.
Nada más despreciable que dar por sentado algo sobre lo que apenas se tiene una idea vaga. Nada más perverso que emitir juicios de valor sobre personas que no se conocen a fondo.
¡Rompe las reglas! ¡Ve allá donde se pierde el horizonte! No te detengas en pensar si es o no es, si de pronto, o quizás. Suelta la cuerda que te ata al pasado, a tus temores, a tus prejuicios.
Permite que la rueda gire en cada acto de tu vida y solo se detenga, si acaso, cuando tengas que tomar otra acción. ¡Convierte tu miedo en poder! ¡Que una decepción no te detenga! ¡Que una crisis no esté por encima de tu identidad!
¡LEVÁNTATE, AHORA!
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CUANDO AMAR ES UN FASTIDIO (Y otros asuntos del presente)
Spiritual¿Quién no ha amado y sufrido por amor? ¿Quién sufre por amor en este momento? ¿Quién no quiere dejar atrás al pasado? ¿Quién no ha podido cerrar círculos porque el miedo es más poderoso? Lo pregunto porque he vivido en carne propia sus consecuencias...