El ruido del pasado

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El ruido del pasado no es un ruido cualquiera. A veces es casi imperceptible y, otras, tan ensordecedor que no sabemos cómo silenciarlo. En todo caso, sea cual sea su intensidad, siempre está ahí, carcomiéndonos, lacerante, abriendo viejas heridas o recordándonos que vayamos con cuidado.

El pasado es como una cicatriz que siempre estará ahí, tatuada en la piel y los huesos, pero eso no significa que debamos vivir atados a él, como si fuera una persona o una necesidad vital.

Debemos soltar el pasado, no temerle ni basar nuestro presente en las experiencias del ayer. Ese sería un error fatal que tarde o temprano nos pasará su cuenta de cobro. Imagínate viviendo como en los tiempos de las cavernas o al principio de la creación del mundo. ¡Ni pensarlo! La vida fluye. La vida debe abordarse como un río que fluye con constancia, no desbordado.

El ruido del pasado no nos debe abrumar. ¡NO TE DEJES! Sé más grande y fortalécete en esa experiencia. No te reproches tanto, solo te harás daño. Nadie tiene la culpa de lo que te haya sucedido con anterioridad, por frustrante que sea.

Cada uno hace su camino y tiene sus propias cargas. Por eso, lo mejor que puedes hacer cuando ese ruido que escuchas te sacude es interiorizar y aferrarte a las cosas buenas que hayas aprendido o vivido.

Si crees que no hay nada bueno en ese pasado, que todo se vuelve contra ti y se repite como un karma, debes pasar a la acción de buscar profesionales que te escuchen y encuentren por ti las respuestas que no has podido hallar por ti mismo o misma.

Soltar no es olvidar, es recordar sin dolor. Es liberar el apego a lo que ya no es, permitiendo que la vida siga su curso natural. Aprender a soltar es un acto de valentía y de amor propio. Requiere aceptar la realidad, agradecer por lo vivido y abrirse a nuevas experiencias.

Cuando sueltas, te permites vivir el presente con plenitud. El pasado ya no define tu felicidad. Eres libre para ser quien realmente eres, sin las cadenas de las experiencias pasadas.

¡El ruido del pasado no debe interferir con tu vida presente! 

CUANDO AMAR ES UN FASTIDIO (Y otros asuntos del presente)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora