CUANDO AMAR ES UN FASTIDIO (Y otros asuntos del presente)

CUANDO AMAR ES UN FASTIDIO

Cuando amar es un fastidio, nuestra vida se llena de zozobra, nuestros ojos se opacan por la tristeza que los invade, y sentimos que cada día perdemos un poco más de esa energía vital. Nos angustia llegar a casa después del estudio o trabajo porque no queremos estar solos con esa persona que nos hace sentir que amar es un fastidio. Y lo peor: no podemos soltarnos porque algo dentro de nosotros nos lo impide, porque no sabemos cómo, porque justificamos una cosa y otra, porque nos duele.

¿Cuándo amar es un fastidio? Son tantas y variadas las situaciones que podrían responder a este interrogante. Es un fastidio pensar que no te quieren, que solo tú amas, que por mucho que hagas nada cambia, nada nuevo pasa, que poco le importas a él o ella. Que cuando suena ese celular o escribe con la luz baja es porque se trata de otra persona. Que no te tiene en cuenta para sus decisiones más importantes, que le da lo mismo si no se ven o no se llaman en días, que te reprocha cada cosa que haces. Que está ahí solo por costumbre o porque nadie hará por él o ella lo que tú haces. Que la vida es lenta a su lado porque nada le entusiasma, que flotas en un vacío donde no vas para ninguna parte, que te consumes en el olvido, en el desamor y en la desesperación que produce su falta de interés en tus cosas más elementales. Que conoces tan poco de él o ella pese a llevar años juntos, que hay dudas y dudas y desconfianza hasta llevarte a hacer cosas dignas de un programa televisivo de infidelidades, que te ahogas en esa relación y no sabes si es más doloroso estar ahí o terminar... En fin, de seguir no acabaríamos en estas páginas.

Cuando amar es un fastidio, no hay nada que justifique vivir bajo esa sombra, intentándolo todo, aguantando todo, opacándonos como si fuésemos una sombra. Amar es todo lo contrario, pese a los altibajos que se suscitan a lo largo de una relación amorosa. Pero si amar te opaca, te oprime, te destruye día a día porque no ves salida posible y sabes ya que estás ahí por esa costumbre ciega de tener una relación, debes alejarte, debes empezar a construir un nuevo camino. La soledad no es tan mala como se cree. El silencio que encuentras en la soledad es un lenguaje necesario para recomponer tu historia. Por supuesto, depende de ti, todo depende de ti. No es el tiempo la mejor manera de dejar atrás el pasado; eso de que el tiempo lo cura todo es una expresión que debe ir acompañada de tu deseo inabarcable de cambiar lo que te hace daño. El tiempo por sí solo no hace milagros.

Recuerda: una relación se construye permanentemente, por parte de ambos, pero si de ninguna manera esto es posible, no hagas que el amor se convierta en una debilidad para ti. Amar puede ser un fastidio cuando nos aferramos a expectativas irreales y a relaciones dañinas. Aprender a amar de manera saludable, sin apegos destructivos, nos permite disfrutar del amor en su forma más pura y genuina.

El amor por alguien no debe ser una debilidad para ti. Si el amor no te fortalece, si la relación es insana, dañina, es cuando puedes decir que amar es un fastidio. Y una persona no puede estar, jamás, al lado de otra que le hace daño, que no está dispuesta a meter las manos al fuego por la construcción de un buen amor, cuando antepone sus caprichos, deseos o impulsos y te relega a una cosa en su vida.

Si amar ya es un fastidio en tu vida, escapa, muévete. Hay relaciones que se vuelven imposibles de continuar. Y si la tuya es una de ellas, ya tienes la respuesta.

Sin embargo, una vez que hayas sanado y te sientas fuerte, estarás listo o lista para abrirte a nuevas oportunidades. No tengas miedo de amar de nuevo. Cada experiencia amorosa es única y valiosa. Aprende de tu pasado, pero no dejes que te impida disfrutar del presente y del futuro. Recuerda que mereces ser feliz y que siempre hay nuevas oportunidades para encontrar el amor. Mantén tu corazón abierto y tu mente receptiva (no a la defensiva hasta volverte una persona solitaria o huraña). La vida está llena de posibilidades y de personas maravillosas que están esperando conocerte.

Pero ve lento, eso sí. Y ten presente que, por contradictorio que parezca, no siempre amar es un fastidio: hay relaciones genuinas, transparentes, que exaltan y dignifican el sentido de lo que es el amor.