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Aidé...


Por la tarde las chicas me llevaron al doctor, por suerte solo fue un duro golpe, digo suerte por que no tuvieron que hacerme algún tipo de radiografía o algo así. Ellas se fueron a hacer lo que tenían que hacer, me dejaron en casa, recostada en mi cama. Necesito compañía, tomo el celular, busco en contactos. Antonio...

*llamada entrante*

-¿Sucede algo?¿te sientes mal?- oigo su preocupación.

-Necesito que me hagas compañía- digo aburrida.

-Voy para allá... oye quieres que lleve algo en especial?- pregunta agitado.

-Si, tu sudadera azul- digo con los ojos cerrados.

-Esta bien- dice apresurado.

*fin de la llamada*

Me levanto con dificultad, camino hacía el baño para lavarme los dientes, me miro al espejo, me veo fatal, acomodo mi cabello en un chonguito. Salgo arrastrando los pies hasta mi cama, me dejo caer, tomo a Momo -un pingüino con problemas de obesidad-, cambio de canal, en uno de los canales esta: "The First time" con Dylan O'Brien, amo a ese tipo. Solo a mi se me ocurre ponerme short, tengo que buscar una pantalonera antes de que llegue.... tocan a la puerta, ¡rayos!. Abren la puerta, me tapo bien con las cobijas, miro a la puerta, el aparece con su sudadera azul sobre su mano, se recarga sobre el marco de la puerta. Le sonrió, esta decidido a lanzarse sobre mis brazos.-Antes de que me aplastes, de ese cajón saca una pantalonera gris, pásamela- señalo el cajón. Saca la pantalonera, lanzadola hacia mi. Meto la pantalonera debajo de las cobijas, pero cada movimiento hace que me duela la cabeza. Suspiro desesperadamente. El se acerca a mi, quita las cobijas, dejando ver mi short negro de licra, siento como arden mis mejillas. El toma la pantalonera, en un jalón la sube rápido. Pero hace que me maree. Me tiende su sudadera, yo me la pongo, esta tan cálida. Me levante de un brinco, corrí hacia el baño quite la tapa y... vomite. El apareció tras de mi, comenzó a sobarme la espalda, diciendo que todo iba a estar bien. Me puse de pie para lavarme otra vez los dientes, tome el enjuague bucal, el le bajo al baño. Finalmente me abrazo, pero inesperadamente me tomo en brazos hasta llevarme a la cama.


Me recuesta suavemente, se quita sus zapatos para meterse con migo, siento su duro pecho sobre mi espalda, no lo había tenido tan cerca, opte por apagar la televisión, no vería esa película con el aquí. Comienza a acariciarme el cabello, luego mi rostro, soba mi espalda y mis hombros, estoy hipnotizada al tacto tanto que estaba por quedarme dormida, me giro para quedar en su pecho. El comienza a respirar con dificultad, sus latidos se aceleran, comienzo a jugar con su playera, no podre dormir si el sigue así de agitado, me acerco más a el, el toma mi espalda con fuerza, en un movimiento rápido esta encima de mi, Esto esta mal... esto esta mal. Se apoya sobre sus brazos para mirarme antes de acercarse a mi, baja su cabeza hasta mi, sus labios rozan con los míos, cierro los ojos, sus labios besan los míos, es una sensación diferente, es como si no era lo que esperaba, mis hormonas mandan más no mis sentimientos, deja caer suavemente su peso sobre mi cuerpo, su peso es acogedor, su calor abraza mi cuerpo, enredo mis brazos alrededor de su cuello, desciende sus brazos hasta mis caderas, en un solo intento baja mi pantalonera, me siento intimidada ante su fuerza, le saco la playera lanzandola lejos, con sus manos tira del elástico de mi short, no dejo que sus labios se despeguen de los míos, paso a besar su cuello a lo que el hace lo mismo, intento dejarme llevar, toma mis piernas para subirlas sobre sus caderas, mientras sus manos ansiosas tocan mi cuerpo con una agilidad impresionante, no tengo escapatoria alguna, hace un movimiento hacia arriba que hace mi cuerpo explotar, incrusto mis uñas sobre su espalda, el suelta un gemido cerca de mi oreja, me aferro a el con fuerza, estoy al borde de dejar que esto pase. ¡resiste! , sus manos toman mis brazos para hacerlo hacia atrás sobre mi cabeza, aprieto mis piernas a sus caderas, el me mira desde arriba con una mirada irreconocible.


-Antonio...- susurro.


-¿Eres mía?- pregunto con aquella feroz mirada. Lo mire a los ojos, siquiera podía ver aquel brillo era más que obvio que estaba cegado, apego su cuerpo al mio de nueva cuenta, sentía su corazón sobre mi pecho, estaba apunto de estallar, bajo su cabeza a mi pecho, para luego besar mi cuello lento. Volví a llamarlo, pero no cedió, mi cabeza comenzó a palpitar, no me sentía bien, aquella sensación la sentí lejos, el comenzó a llamar mi nombre pero solo veía oscuridad.

...


Al despertar, la ventana estaba abierta, afuera era de noche. Me sorprendí al sentir la mano del chico sobre mi abdomen, su espalda estaba sobre mi pecho, su cabeza estaba sobre mi cuello, sentía su tranquila respiración sobre mi nuca, intente moverme necesitaba agua. Iba a destaparme pero el me apretó.


-Si tienes que ir a vomitar dime para cargarte- hablo con voz aburrida.


-Quiero agua...- dije con mi voz entrecortada. El se puso de pie rápidamente, al pasar el marco note que no tenia su playera puesta, sobre su espalda note aquel rasguño, me sonroje inmediatamente, tome la almohada para esconderme en ella, el brinco sobre la cama, me gire, estaba recargado sobre su brazo, mientras con el otro tendía el vaso para mi, me miro con una sincera sonrisa.


-Me asustaste- hablo despacio.


-Perdona- intente incorporarme sobre la cama. El me tomo para recargarme sobre su desnudo pecho.


-No quiero perderte, nunca- hablo suave en mi oído beso mi cabeza.


¿Has sentido que si una persona te lo dice, cambia completamente tu perspectiva?, al oírlo decir eso sentí como si eso nunca fuera a pasar, esa sensación sobre mi pecho apareció. Le pase el vaso de agua, el la dejo sobre una mesita, me subí encima de el, el me miro confundido.


-Nunca me vas a perder, jamás ¿oíste?- le tome la cara con ambas manos.


-Quiero estar contigo- dijo mirando a mis ojos.


-Hey siempre estaremos juntos- lo abrace tomando su cabeza, el negó pero yo le bese la cabeza, subió la mirada hacía mi, vi como sus ojos se cristalizaban, ¿Que sucede? . Le di un pequeño beso sobre la frente, su pecho se alzo para luego dejar escapar el aire, supe en ese momento que estaba llorando, la primera vez que lo veía llorar, sobe su espalda en modo de consuelo pero algo me decía que yo malinterprete sus palabras, quizá no lloraba de tristeza si no de dolor.



Quizá el me vea con otros ojos, con los cuales no puedo verle...





Una regla/One rule. [Suspendida]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora