Capítulo 6: inapropiado.

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XXX

Trataba de caminar derecho, estaba demasiado nervioso para recordar la manera correcta de desfilar, el pasillo se encontraba adornado por las flores más hermosas de la temporada y los omegas pasaban entre ellas caminando en fila siendo observados por los posible pretendientes, era como exhibir un producto con la intención de encontrar al mejor comprador, Harry trataba de no tropezar con el vestido y los largos velos que a su parecer no eran adecuados para la ocasión, su madre se había encargado de escoger lo que usaría y después de lo sucedió no se pudo negarse a nada que ella le ordenará.

El vestido era de un color verde horrendo.

Los alfas los miraban como si fueran carne fresca, algunos demasiado ancianos para estar ahí, pero eran ricos o de casas nobles, por lo que no importaba que quisieran un Omega joven, a Harry aun le dolía la pierna, era el primer baile al que asistía después de lo sucedido, se había ausentado al menos a cinco lo que según su madre ya era una desgracia, él no se sentía listo para salir de casa, a cada paso sentía que la herida se abría y tenía una extraña sensación de sangre aunque no fuera así, a veces realmente sentía que le estaba sangrando y cuando revisaba no había nada.

- el diamante es exquisito - escuchó al anciano y sintió náuseas, antes muerto que estar con alguno de ellos, los conoció en el desfile de Gemma y el cómo miraban a los omegas y como hablaban de ellos y ellas, era desagradable.

- y es peligroso como me gustan - opinó otro y quiso aventarles un zapato

- la cicatriz debe ser ruda y exótica.

- además tiene el interés del comandante - Harry sintió escalofríos, pero eso era completamente falso.

- soy más rico, tal vez me elija por la cartera como su hermana

- oye - una chica lo empujó - tu aroma - Harry la miro y lo recordó, cómo era posible que siempre lo olvidara.

- gracias - levantó la mirada y lo liberó, enseguida dos de los alfas de la sala se enfocaron en el, uno en especial sintiéndose sin aire y sin entender lo que le pasaba, sus sentidos se agudizaron y sentía a su lobo pelear para obtener una mirada del Omega.

Llegaron al final del pasillo y entraron al gran salón, cada Omega tomo su lugar y los alfas entraron con su toque de autoridad, el baile daría inicio y era momento de la guerra, pelearían para tomar al Omega de su agrado y Harry solo quería retroceder.

- respira - Niall lo empujó ligeramente, estaba sentado a su lado

- no quiero hacer esto.

- no puedes evitarlo, además ¿viste cuantos alfas te miraron?

- a ti también.

- sí, pero nadie se va a atrever a acercarse - miro al chico junto al comandante, que lo miraba fijamente.

- qué suerte tienes - Harry sonrió - es muy guapo y amable

- y lindo y atento y adorable, además de caballeroso y romántico

- el chico perfecto

- lo es, he pasado los últimos bailes con el

- yo los pase con mi oso maloso - era el juguete que le habían regalado en el pueblo y desde siempre había dormido con él.

- esa cosa ya está horrenda.

- deja a mi bebe.

- hoy estamos aquí - habló el rey - para el baile de cortejo, alfas está noche podrán cautivar a su Omega y exigir lo que es suyo - tocaron las campanas en lo alto y todos se pusieron de pie - que el cortejo inicie.

Juramento De SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora