Capítulo 21

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-Mike, responde, necesitamos que nos digas dónde estáis- insiste Nancy, pero no responden- Nada

-Déjame a mí- le pido cogiendo el walkie- Código rojo, Dustin, Mike, Lucas, si estáis ahí necesito que respondáis, es un código rojo

-Lydia, te escuchamos, aquí estamos- dice Mike al otro lado, los amigos de mi hermano me quieren mucho ya que cuando han venido a casa hemos jugado varias veces juntos.

-¿Estáis todos bien?- pregunto.

-Sí, estamos todos bien- dice Mike.

-¿Dónde estáis?- pregunta Hopper arrebatándome el walkie- Sabemos que tenéis a una niña y la están buscando, os están buscando. Podemos ayudaros y protegeros, pero tenéis que decirnos dónde estáis

Están en un lugar que tiene vehículos abandonados y viejos, así que Hopper va a por ellos mientras Jonathan, mi madre, Nancy y yo nos quedamos en casa esperando.

Y tardan tanto que hasta se hace de noche. En cuanto escuchamos el motor de un coche salimos corriendo a verles, están sanos y salvos.

-Mike- dice Nancy abrazando a su hermano.

-Me alegro de que estéis bien- digo abrazando a Lucas y Dustin, ellos me devuelven el abrazo con una sonrisa.

-Cuánto tiempo sin verte- dice Dustin feliz de verme, ese niño es un encanto.

Todos entramos en casa y nos sentamos en el salón, los niños nos explican algo bastante raro de entender.

-¿Estáis diciendo que existe otra especie de dimensión igual que la nuestra?- pregunto confusa.

-Sí, algo así, es el Mundo del Revés- dice Mike.

-¿Y cómo se puede acceder a él?- pregunta mi madre.

-Por un portal- dice Dustin. Nancy, Jonathan y yo nos miramos a la vez, creo que donde entró Nancy a través del árbol es el Mundo del Revés, pero ese portal ya no existe.

-¿Cómo encontramos el portal?- pregunta mi madre de nuevo.

-El norte de las brújulas se manipula cuando hay una gran fuente de energía cerca- dice Dustin.

-El portal- interviene Hopper- ¿Está bajo tierra?

-Sí- responde la niña, que resulta que todos la llaman Eleven por alguna razón, tal vez el doctor ese le puso números a todos los niños para identificarlos y hacer que se olviden de su vida anterior.

-¿Y es muy grande?- pregunta Hopper.

-Sí

-¿Cómo lo sabes?- pregunta Dustin.

-Porque lo ha visto- adivina Mike.

-¿Y decís que ahí está atrapado Will? ¿En ese lugar?- pregunto confusa.

-Sí, El tiene poderes, puede encontrarle, a él y a Barbara- dice Mike.

Poderes. Una niña con poderes.

¿Qué? ¿Es eso posible?

Nos sentamos todos alrededor de la mesa de la cocina y le damos un walkie a Eleven puesto en un canal muerto para que pueda comunicarse con Will, cierra los ojos y se concentra durante 5 minutos.

Después los abre y le sangra la nariz, la pobre se asusta.

-No les encuentro- dice asustada.

-No pasa nada, descansa un poco- le digo, ella decide ir al baño.

-Cada vez que usa sus poderes se debilita y necesita descansar- explica Mike.

-¿Y cuánto necesita para reponerse?- pregunta Hopper impaciente.

-No lo sé- responde Mike.

-La bañera- Eleven aparece detrás de nosotros asustándonos.

-¿Qué?- pregunta mi madre.

-Puedo encontrar a Will en la bañera- dice Eleven.

Dustin decide llamar a su profesor de ciencias, y por suerte contesta.

-¿Qué te ha dicho?- pregunta Hopper.

-Para construir un tanque de privación se necesita sal, mucha sal

-¿Cuánta?- pregunto.

-700...kilos

-¿700 kilos? ¿Dónde vamos a encontrar tanta sal?- pregunto asombrada.

-Yo sé dónde hay- dice Hopper- ¿Qué más?

-Una piscina

-La tengo- dice Joyce.

-Entonces vámonos- dice Hopper, nos lleva al instituto, ahí es donde encontraremos toda la sal que necesitamos.

Jonathan y Hopper van a por la sal, Nancy y Mike a por las mangueras, Dustin y Lucas a montar la piscina y mi madre, Eleven y yo a construirla unas gafas con las que no vea nada.

Son unas de buceo, y yo las estoy envolviendo en cinta americana gris para que no pueda ver nada con ellas puestas.

-Ya está, con esto no verás nada- digo dándole las gafas, ella me mira con una cara inocente- Vas a estar bien, mientras estemos a tu lado no podrán hacerte daño

-Estaremos sujetando tu mano todo el tiempo, vas a estar bien- dice mi madre cogiendo sus pequeñas manos para transmitirle confianza.

Al parecer funciona porque la niña asiente y pone una mini sonrisa.

Las tres nos dirigimos al gimnasio, donde ya han montado la piscina y la han llenado de sal, así que todo está listo para encontrar a Will.

No puedo creer que mañana tenga un examen y que esté haciendo esto, con una niña que tiene superpoderes.

Mi madre le da las gafas a Eleven mientras se mete a la piscina con su ayuda y la de Hopper, a la vez que yo recorro los rostros de los presentes. Está claro que todos estamos nerviosos por saber lo que va a pasar, y si puede ser posible, que Eleven nos de buenas noticias.

Lo único que no quiero oír es que Barb o Will están muertos o en peligro, es lo único que no podría soportar escuchar, ya que sé que no podría hacer nada en ninguno de los dos casos. Y me mata saber que no puedo salvarles.

-Vamos allá- dice mi madre hacia Eleven para que se calme, la niña se sumerge en el agua y en seguida flota, lo que nos hace saber que el agua tiene la suficiente sal.

Mi madre ve mi cara de angustia y rodea mis hombros con su brazo, para tranquilizarme.

-Barb- dice Eleven, y Nancy y yo nos ponemos alerta con lo que sea, de hecho cruzamos miradas esperanzadas.

-¿La has encontrado?- pregunta Nancy.

-Barb- repite Eleven- Muerta- el corazón me da un vuelco y creo que he dejado de respirar- Muerta. Muerta. Muerta- repite una y otra vez elevando el tono de voz- ¡Muerta! ¡Muerta!

-Tranquila, tranquila- dice mi madre quitando su brazo de mis hombros para tranquilizar a Eleven sujetándola del brazo y de la mano.

Nancy se lleva la mano a la boca con lágrimas en los ojos y yo me levanto asustada, también llorando.

Barbara está muerta...

(1) Insecurities (Steve Harrington) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora