Después de tomar la Máscara del Odio en sus manos, Lloyd sintió un cambio en su cuerpo: un click que conectó alguna parte su ser... pero ¿a dónde exactamente?
Pronto descubriría que esto se debía a una parte de su descendencia que no estaba dispuest...
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¡Ha sido obra de _Shuna_! y le doy un especial agradecimiento a ella en este capítulo <3
Kai había esperado con impaciencia todo el día. Había caminado por todo el monasterio ensayando lo que había de hacer, y repasaba en su mente varios escenarios posibles. Ahora que la noche había caído, comenzaba a asustarse.
Su misión era clara: encontrar a Lloyd, explicarle lo mejor posible lo que sucedía, y hallar alguna manera de traerlo a casa. Eso... si aún recordaba quién era...
Claro. Si no estuviera tan nervioso podría hacerlo bien.
Los ninjas habían preparado a Kai para lo que fuera. Traía un artefacto que lo protegía de cualquier ataque con una barrera invisible (último invento de Pixal) y su espada escondida de manera que estuviera a su alcance. Los Oni eran rápidos y sigilosos, y si las sospechas de Zane eran ciertas, Lloyd bien podía actuar completamente como uno. Además, aquella especie era una de las más peligrosas que hubieran existido, y la última aventura sólo les había dado una prueba de lo que realmente podían hacer.
-¿Estás seguro de que vas solo? -le preguntó Nya, quizá por décima vez, mientras le acomodaba el traje.
-Si vamos todos tal vez sólo consigamos asustarlo -razonó Kai-. Además, ustedes podrán verme a través del comunicador.
-Oh, vamos, siempre termina perdiéndose o algo -intervino Jay.
-Jay... -comenzó Cole.
-¿Qué? Ha pasado desde... desde siempre. Nada bueno sucede cuando alguien va solo.
-Entonces ven conmigo -Kai sonrió, retando a Jay.
El chico se sonrojó.
-¿Con un Oni en quién sabe dónde? No, gracias.
Cole le dio un codazo.
-¡Oye! ¡Sólo digo la verdad!
-El rastreador ha detectado que Lloyd ya no está en movimiento -anunció Zane-. Será mejor que te vayas ahora, Kai, antes de que se ponga en marcha de nuevo.
Kai inspiró hondo.
-De acuerdo. ¿Dónde está?
-A las afueras de Ninjago -contestó Zane-. La señal es débil. Ha de estar bajo tierra.
-¿Bajo tierra? -preguntó Cole-. ¿Cómo es posible?
-Hay muchos lugares de Ninjago que no hemos visto... -pensó Kai-. Seguramente Lloyd ha encontrado algún refugio.
Nadie más dijo nada. Seguramente todos pensaban cosas distintas respecto a la aventura en la que se sumirían a continuación. Ninguna era buena.
Antes de que se arrepintiera, Kai subió a la motocicleta que Pixal le había preparado, y, después de despedirse de los demás, marchó con rumbo a la ubicación de su amigo...
