CAPÍTULO 3. LUNA

148 14 1
                                    


Danna baja por las escaleras de las gradas y se reúne con Alba y conmigo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Danna baja por las escaleras de las gradas y se reúne con Alba y conmigo.

—Estaba empezando a dudar si ibas a querer que me quedase esta noche en tu casa o si te ibas a llevar a la rubia —le digo cuando está a nuestro lado.

—¿Te has puesto celosa? —bromea Danna sonriendo.

—Mucho... —respondo siguiéndole el juego.

—Venga dejaos de tonterías que tengo hambre —dice Alba empujándonos hacia la salida.

Tras cenar pizza las tres juntas en el salón de su casa, Danna me hace un gesto para que vayamos a su habitación.

—Por favor, os vuelvo a recordar... el concierto privado me lo mantenéis a un volumen que yo no escuche —escuchamos decir a Alba antes de que podamos entrar a la habitación de Danna.

Danna cierra la puerta entre risas y acto seguido se lanza a mis labios. Me acorrala contra la pared mientras nos besamos. Sus labios se dirigen a mi cuello, giro mi cabeza hacia un lado para dejarle vía libre. Me dejo llevar por sus besos, abro los ojos un momento y lo que encuentro a mi lado es el costado del armario lleno de fotos de ella con el chico que vimos en la discoteca, su ex. Decido ignorarlo y mis labios vuelve a encontrarse con los suyos. Mis manos y mis uñas juegan en la piel de su espalda haciendo que suelte un ligero gemido. Danna tiene sus dos manos en mi cara y las lleva hacia mí pelo tirando ligeramente de él, lo que hace que yo intensifique mi beso. Le quito su camiseta y ella hace lo mismo con la mía, volviendo a continuación a atacar mi cuello. Mi cara queda de nuevo viendo las fotos.

—¿Por qué tienes todavía las fotos con Alan?

Esa pregunta se escapa de mis labios antes de poder razonar que no era buena idea. Danna se aparta un poco de mí y se queda mirándome a los ojos.

—¿En serio Luna acabas de nombrarme a mi ex?
—Perdón he visto las fotos, me ha dado curiosidad y lo he dicho sin pensar —intento justificarme.

Danna suspira y se aleja de mí. Mierda.

—Sé que no debería tenerlas puestas todavía pero es lo único que me queda de esa relación, ya que todo lo demás lo metí en una bolsa y se lo llevé a él —me explica sentándose en su cama —. Me quería quedar al menos con los pocos buenos recuerdos que guardan esas fotos.

Me acerco a ella y me siento a su lado. No quiero decir nada que pueda molestarle o ponerla triste.

—¿Estás bien? —le pregunto finalmente apoyando mi mano en su rodilla.

—Sí... Pero me has cortado todo el rollo — me responde mirándome fijamente.
Dos segundos después ambas comenzamos a reírnos.

—Tía perdón, de verdad no sé porque te he preguntado eso —digo entre risas.

Cuando dejamos de reírnos Danna se levanta y se dirige al armario. Comienza a quitar las fotos y las amontona en un lado del escritorio. Danna me mira y luego se mira su cuerpo, dandose cuenta de que tanto ella como yo estamos en sujetador y yo le sonrío.

Entre las redes || Historia LGBT ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora