06

18.4K 1.9K 247
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Visenya había vuelto a la Fortaleza Roja hacía algunas semanas, y no tuvo noticias de Daemon más que parecía estar apoyando a Corlys Velaryon en una batalla que se volvía más complicada con el paso de los días

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Visenya había vuelto a la Fortaleza Roja hacía algunas semanas, y no tuvo noticias de Daemon más que parecía estar apoyando a Corlys Velaryon en una batalla que se volvía más complicada con el paso de los días.

— ...y el violeta siempre lo hemos tenido, — Concluyó Rhaenyra, tocando la nariz de Visenya con cariño, quien tenía su cabeza recostada en las piernas de la joven heredera mientras hablaban de sus antepasados— normalmente los bastardos no, pero tú eres especial.

— Porque nací de dos hermanos puros,— Le siguió mientras observaba los anillos en su mano— Saera y Aemon Targaryen... soy el resultado de la infidelidad de los hermanos, el recuerdo constante de que el primogénito heredero no era el hombre que todos creían y de que "la princesa ramera" logra llevarse a la cama a cuanto tipo se propone. —

— Visenya...— Murmuró la princesa heredera. –No seas tan dura contigo. —

— Iré a mis aposentos— Comentó dándole un beso en la mejilla antes de irse, no quería tener una conversación donde le recordaban que ella no tenía la culpa, que era tan valiosa como un legítimo y bla bla bla... palabras vacías que conocía de memoria.

Cuando regresaba a su habitación, alguien acudió a ella con un mensaje importante.

—¿Qué sucede?— Preguntó bajando la voz para que nadie pudiera escucharlos.

— Princesa, se me informó que, aquellas personas que la golpearon una vez como símbolo de advertencia, van a estar reunidas en un mismo barco, el que saldrá en unos instantes, también me comunicaron que Gwayne Hightower está entre los abordantes, es el momento que usted estaba buscando. —

La joven le entregó el dinero por la información, todavía no estaba segura de que haría con ella, siguió su camino hacia sus aposentos, dejando a la guardia fuera de su recámara. Notó que alguien se encontraba recostado en su cama y con un poco de temor se acercó. Logro reconocer el cabello negro del joven Maven y una leve sonrisa se instaló al saber que era él, al fin había regresado.

—¡Maven!— Dijo con total entusiasmo, removió su hombro con delicadeza, buscaba molestarlo un poco antes de llenarlo de besos y abrazos, pero notó que algo no andaba bien— Maven...— Lo volteo por completo, con cuidado y temor de que sea lo que imaginaba. Vio una profunda herida en su cuello, y se quedó inmóvil, sus ojos se llenaron de lágrimas, ¿cuánto más iban a quitarle?— No, no... — Comenzó susurrando mientras negaba enérgicamente. –¡No! ¡Maven! — Gritó con todas sus fuerzas, la garganta le ardía. –Regresa, Maven, regresa a mi, por favor— Volvió a susurrar.

𝐏𝐔𝐑𝐄 𝐁𝐋𝐎𝐎𝐃 ⋆ 𝐃𝐀𝐄𝐌𝐎𝐍 𝐓𝐀𝐑𝐆𝐀𝐑𝐘𝐄𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora