Holaaa, perdón que estuve desaparecida pero estoy en época de exámenes pero ya la semana que viene termino❤️ Prometo darles otro capítulo cuanto antes.
El cap está sin corregir pero después lo hago.
Nos vemos bbs
JuliLuego de unos 40 minutos de caminata ahogada en mis propios pensamientos había llegado a una conclusión, Nicholas me atraía, si, era definitivo, ya no iba darle vueltas al asunto porque negarlo era igual de estúpido que decir que las cebras tienen rayas rosas aunque...¿sería posible en algún mundo paralelo que las tengan? porque en todo caso, en ese mundo no me sentiría tan atraída por el.
Bueno, me estoy desviando del tema.
La cuestión era que había llegado a una conclusión con respecto al tema: Me gustaba, sí. ¿Que iba a hacer entonces? Pues nada. Sip, esa es mi conclusión. Solo ignoraré lo que me sucede porque es pura y solemne atracción. ¿los cosquilleos que siento en nuestros pequeños momentos de roce? Es porque seguro me sube la presión por comer tanto dulce.
La presión no sube por comer tanto dulce, ignorante—dijo mi consciencia.
Shh, tu callate.
Como decía antes de ser interrumpida, ejem ejem, entendí que todo lo que siento es una imaginación que genera mi propio cerebro. Procedo a la explicación para convencerme...eh...convencerme yo no..solamente comentarlo para repasar los puntos. ¿La emoción o anticipación que siento antes de verlo? Seguro es por la falta de diversión en mi vida. ¿Sentirme comprendida y escuchada? Una ilusión óptica. ¿Lo poco que me molesta su presencia o mejor dicho no me molesto nada e incluso, disfruto? Bueno, tengo que ser sincera, no tengo una explicación lógica para eso.
El sol brillaba de una forma intensa, y maldecí al no haber traído mis gafas de sol o aunque sea un sombrero. Debía de ser al rededor del mediodía y el calor me envolvía de forma intensa así que decidí dirigirme a una calle peatonal llena de locales. No pude evitar sentirme fascinada a todo lo que había allí. Había tiendas de las marcas de ropa de lujo más conocidas. Joyas únicas y carísimas. Autos por doquier que rozaban los valores millonarios. No era algo que me sorprendiera demasiado en lo que a precios respectaba, sino más bien la abundancia de ellos que había en esta ciudad.
Seguí caminando, hasta toparme con una fuente gigante preciosa. Me quedé parada, admirándola. Tenia varios metros de ancho y era de forma circular. Un chorro gigante caía de una mujer parada en el centro sosteniendo una fuente con pequeñas figuras que la rodeaban, parecían niños. Todos observándola con distintas miradas. Felices, tristes, intrigados.
— C'est beau non? —Escuché una voz masculina decirme a mi lado. Tenía un acento marcado.
Al girar mi cabeza, un hombre joven me miraba. Tenía el pelo lacio de un tono azabache precioso, tanto que parecía azul a la luz del sol, unos lentes de sol colocados sobre su cabeza. Una piel bronceada naturalmente con unos prominentes ojos color chocolate. Era de contextura alta pero no demasiado y tenía un cuerpo delgado, se encontraba vestido con una elegante camiseta de verano color celeste y unos pantalones de color beige claro que combinaban con sus lentes. Definitivamente le gustaba lucirse.
—Lo siento, no se italiano, solo hablo inglés—sonreí en forma de disculpa.
—No te preocupes—las comisuras de sus labios estaban estiradas hacía arriba y tenía una mirada coqueta que le sentaba demasiado bien ya que era bastante apuesto— aunque debo corregirte, es francés pero también puedo hablar inglés así que no habrá problema—¿Por qué todos sabían hablar más de 2 idiomas menos yo? Me sentía una ignorante.—Te decía que es una fuente maravillosa, se encuentra aquí hace 150 años construida por Fredderick Moteinz, un excelente escultor. Lamentablemente fue una de sus últimas piezas antes de morir a sus 40 años de edad.
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Ambición
RomanceMaia siempre había sido una chica muy ambiciosa, siempre fue criada para hacer lo que le gustara, pero también para hacer todo lo posible para tener un futuro exitoso, por eso mismo decidió irse a sus 26 años a vivir a Manhattan por un importante pu...