Capítulo 23

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Nos metemos en el coche con dirección a casa. El ánimo se me ha apagado un poco a pesar de que intento que no se me note. Pero obviamente Jones se da cuenta porque mientras conduce se gira un momento a verme con el ceño fruncido.

一Como sabes mi madre falleció y no conocí a mi padre.

Asiento con la cabeza.

一Estuve en bastantes casas de acogida, de un sitio a otro.

Asiento de nuevo.

一Y no siempre me trataron bien.

Suelto una especie de exclamación pero no añado nada más. Se está abriendo y es algo que agradezco porque sé que no es fácil para él.

一Tuve que hacer cosas de las que no me siento orgulloso.

Me mira durante unos breves segundos.

一Karlie... son cosas que prefiero que no sepas... no quiero que se manche la imagen que tienes de mí.

一A no ser que mataras a alguien, no creo que cambie la visión que tengo de ti.

Me coloca la mano en el muslo.

一No maté a nadie pero me metí en peleas.

一Bueno... supongo que las circunstancias no serían las idóneas.

一Hice algunas cosas peores...

Pongo mi mano sobre la suya y la aprieto.

一Joey, 一me mira brevemente一 nuestro pasado no nos define, solo lo que hemos aprendido de ello. Todos esos errores te han convertido en lo que eres ahora y quizás no fueron las cosas más idóneas, quizás no viste otra solución, pero mira dónde estás ahora. Si no lo hubieses hecho, probablemente no estarías aquí, yo no te habría conocido y ahora no me imagino qué sería de mí sin ti.

Jones se queda en silencio y veo que mueve el coche hacia el arcén y pone las luces de emergencia.

一¿Ha pasado algo? 一Pregunto alarmada.

一No, pero no quiero distraerme mientras hago esto.

Y antes de que pueda hablar se inclina hacia mí, coge entre sus manos mis dos mejillas y me besa con una intensidad impropia para hacerlo en un espacio público. Siento como el fuego surge en mi interior y automáticamente mis manos se colocan en su pelo atrayéndolo más hacia mí.

一Te quiero. 一Dice con su boca a milímetros de la mía.

一Yo también.

Volvemos a besarnos, a juguetear con la lengua. Giramos la cabeza para hacer el beso más profundo. Noto cómo su mano intenta entrar por debajo de mi vestido pero la aparto.

一No vamos a follar en el coche después de que me hayas dicho que me quieres.

一 ¿No? 一Me mira con pena.

一No, vamos a casa y entonces lo celebraremos.

Me mira de nuevo con cara de pena pero no voy a caer, así que lo empujo.

一Venga, no quiero que nos pare la policía.

Eso parece motivarlo para arrancar el coche.

El camino a casa parece mucho más corto que cuando salimos de allí y nos dirigimos al restaurante. Quizás se deba a que Jones está algo excitado por llegar. Aunque bueno, yo también.

Estamos cerca y puedo notar como su mano va subiendo por debajo de mi vestido. Él sigue centrado en la carretera, pero obviamente tiene la cabeza, o quizás sería mejor decir los dedos, concentrados en otra tarea. La de apartar mis bragas.

La regla de los 3 díasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora