Aclarando mis sentimientos. Nueva familia.

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FlashBack.

Korrina y Ash estaban en el bosque hablando un rato.

Korrina: Oye, Ash...

Ash: Dime, ¿Qué pasa?

Korrina: Bueno... sabemos que mañana estaremos llegando a Ciudad Relieve ¿Verdad?

Ash: Así es...

Korrina: Pues... Escuche que la ciudad es muy llamativa.

Ash: De acuerdo...

Korrina: Bueno.... No sé si tú quieras, pero...

Ash: Pero... ¿Qué?

Korrina (sonrojada): ¿T-te gustaría que diéramos una vuelta tu y yo solos?

Ash: O sea...

Korrina: Si, como una cita.

Ash se le queda viendo el rostro colorado de su amiga antes de contestarle.

Ash (sonriendo): Claro, no hay problema.

Korrina: ¿E-en serio?

Ash: Si, ¿Por qué no?

Justo en ese momento escucharon una ligera explosión cerca de donde se encontraban, así que los 2 "amigos" fueron a ver que sucedía.

Fin del FlashBack.

Esto era algo que ya veía venir, pero no esperaba que fuera tan pronto. O sea, si, Korrina me parecía linda, y podría ser que me guste. Ya hemos tenido nuestros momentos, aunque nunca pudimos llegar a una conclusión clara. Supongo que seria una buena manera de acostumbrarme a la falta de Serena, quien me dijo que iríamos a Pueblo Boceto a dejarla en su hogar. Por un lado, me sentía mal por mi amiga, quien nos dejaría, pero a la vez entendía la situación en la que nos encontrábamos con Kalm y sus amigos, así que era mejor de mantener a la menor cantidad de personas involucradas.

Además, no quería tener más preocupaciones de las que ya tengo con la advertencia de Mewtwo. Desde nuestro ultima "conexión" (podríamos llamarlo así), no hemos vuelto a tener contacto. Como el legendario no había recibido muchos detalles de su visión, sabía que tendría que esperar un tiempo hasta tener noticias de él. Además, no podía llamarlo a menos que sea para una verdadera emergencia, así que no tenia de otra más que esperar el tintineo de mi pokewatch.

Ahorita nos encontramos a las afueras de la Ciudad Relieve, después de un día entero de caminata. Partimos en la mañana y llegamos a eso de la media noche, así que no podría retar al gimnasio hasta el día siguiente.

- ¿Cómo es que nos convenciste de seguir caminando hasta estas horas? – se quejaba la peli miel.

- Si nos quedábamos a descansar, hubiéramos tardado más. – replique.

- Aun así, tendrás que esperar hasta mañana para tu batalla.

- Bueno... – dije agarrándome la nuca – creo que estaba muy emocionado, jejeje.

- Solo cállate y ballamos de una vez al centro pokemon, que ya quiero dormir.

Sin más que replicar, concedí la petición de Serena.

Deje a las chicas en el centro pokemon y me dirigí, como era mi costumbre, a un árbol cerca del lugar donde deje a mis amigas. Me acomodé, colgué mi mochila y me gorra y me dispuse a sacar a un pokemon, pero creo que no será necesario, ya que Noibat salió de su pokeball y se acorruco conmigo. Ya eran varias noches en las que el pequeño murciélago se salía sin permiso y se acomodaba para dormir conmigo, pero esto tiene una explicación lógica.

Ash y Serena. ViajeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora