" ¿Quieres jugar Yoongi? pues créeme que esto será una guerra, y yo la voy a ganar"
Taehyung se acercaba a la mesa de ese par que disfrutaba la noche con tranquilidad, veía a Jungkook con una radiante sonrisa, ese fue lo que peor le puso, sentía como su sangre hervía, apretujaba sus dientes para poder controlarse y no golpear a ninguno de los dos.
- Pero que casualidad encontrarnos aquí- Taehyung interrumpió con seriedad, Jungkook dirigió su mirada al azabache sorprendido, sin embargo Yoongi ni siquiera se inmutó ignorando su presencia por completo.
- Que grata sorpresa Taehyung- dijo Yoongi mientras veía el menú, en su tono se podía notar sarcasmo, Taehyung lo notó a la perfección pero prefirió guardar la calma, en estos momentos no quería tener ninguna escena en aquel restaurante. Minho veía todo a lo lejos mientras se cubría con un menú para evitar ser encontrado. - También vino contigo Minho, que casualidad- continuó ahora mirando al azabache quien trataba de no golpearlo. Jungkook tan solo observaba todo en silencio, estaba algo nervioso por la presencia de su jefe.
- Verdad que si es una casualidad, mi asistente saliendo con Min Yoongi , espléndida escena- en su tono se podía notar su rabia aunque este trataba de disimular lo más que podía, Yoongi soltó una pequeña risa nasal, negando con la cabeza mientras esbozaba una sonrisa.
- No estoy saliendo con tu asistente, lo invité a cenar porque me pareció una forma de recompensarlo por hacerlo llegar tarde hoy y que tu lo regañaras- Jungkook miró a Yoongi sorprendido por lo que había dicho pero aunque quisiera decirle algo prefería mantener el silencio, la escena se vio interrumpida por el mesero que llegaba a tomar la orden.
- ¿Los señores ya desean ordenar?- preguntó mientras miraba a Taehyung un poco confundido.
- Si, tráigame un vino tinto- pronunció Yoongi con seriedad.
- ¿Alguna botella en específico?- Taehyung observaba todo en silencio, se enfurecía cada vez más, al parecer ignorarlo era cosa de cada día.
- A.Cetto Petite Syrah- pronunció el pelirrojo cerrando la carta, Taehyung bufó en un tono burlesco.
- Que vulgar eres Min, olvide esa orden traiga un Monte Xanic Calixa Blend- el mesero miro al susodicho sin saber realmente que hacer, asentó con la cabeza para que este pudiera retirarse, al estar completamente solos de nuevo Yoongi miró al azabache recargándose en su asiento, su rostro estaba sereno como si aquella escena no le hubiera causado algún problema.
- Si ya estás ordenando, ¿Por qué no te unes a nosotros?- preguntó desinteresado, aquella actitud era lo que más le molestaba a Taehyung quien trataba de mantener la compostura a duras penas. – También puede estar Minho con nosotros, por mi no hay ningún problema, ¿Para ti Jungkook ?- preguntó mirando al rubio quien estaba sin decir ni una sola palabra desde que Taehyung apareció, aquel brillo pareció esfumarse junto con esa sonrisa encantadora.
- Ni, ningún problema- habló con nerviosismo evitando a toda costa la mirada de su jefe, el mayor tomo una silla sentándose en la mesa con tranquilidad quedando con la vista hacía Minho que veía todo atónito, esperaba gritos y golpes pero se tranquilizaba al ver que todo parecía estar normal. Taehyung le hizo una seña para que se acercara, el peliblanco lo miro extrañado pero decidió ir dejando el menú encima de la mesa para después caminar con rapidez hasta la mesa, esbozando una de sus mejores sonrisas.
- Disculpen la interrupción de mi querido Presidente pero a él le encanta venir a saludar cuando se encuentra con alguien conocido- mintió, este tomaba una silla para sentarse junto al rubio, la cena se volvió tensa, Taehyung quien estaba sentado justo frente a Jungkook no dejaba de mirarlo y este se sentía más incomodo que nunca, por su parte Yoongi seguía viendo el menú en silencio.
Volvió el mesero a la mesa junto con el vino en mano, mostró la botella hacía Taehyung, este no dijo nada solo alzó la mano dando a entender que comenzará a servir las copas de vino, pero en la mesa solo estaban colocadas dos pertenecientes a Yoongi y Jungkook , el mesero lo notó se sentía un poco intimidado por el azabache así que realmente no sabía que hacer.
- Ve por las copas, no te quedes ahí parado- dijo con rabia, Jungkook lo miró enfadado, odiaba la actitud del azabache, pero era mejor no decir nada si no quería perder su trabajo. El mesero dio un sobresalto y se fue de ahí enseguida dando una pequeña reverencia. La mesa se quedo en silencio, todo el ambientes estaba tan tenso que era difícil encontrar una forma de aliviar aquel panorama tan desalentador.
- Bueno, ¿Y qué van a ordenar?- Preguntó Minho con una sonrisa mirando a todos en la mesa, pero nadie dijo nada simplemente se torno aún pesado aquel ambiente, Taehyung seguía observando a Jungkook quien tan solo se acomodaba en su asiento incómodo. De forma casi inmediata volvió el mesero con un par de copas junto con cubiertos para colocarlos a Minho y Taehyung, lo hizo lo más rápido que pudo sirviendo el vino de igual forma.
- ¿Ya desean ordenar?- preguntó con la mirada baja, se sentía bastante incómodo.
- Si, yo quiero un chuletón a termino medio- dijo Minho con una sonrisa, Taehyung suspiró pesadamente.
- Quiero un Fettuccini Alfredo- dijo Taehyung sin más, Jungkook tan solo veía el menú sin entender nada de lo que significaba aquellos nombres extraños.
- Baya elección tan interesante Taehyung, aunque prefiero la comida francesa, a mi tráigame Escargot, ¿Tu ya decidiste Jungkook ?- Yoongi miró a Jungkook quien tan solo estaba buscando un platillo en el menú que le pareciera conocido aunque entre tantas cosas con nombres extraños no sabía que pedir.
- ¿Tiene algo Coreano?- preguntó al mesero algo apenado, Minho soltó una pequeña risita ante tal comentario, Jungkook lo miró avergonzado se sentía tan ajeno a ellos que le causaba mucha incomodidad. Yoongi le sonrió con dulzura.
- No señor, aquí es comida Europea- habló con amabilidad el mesero que lo miraba con tranquilidad, como si tratara de decirle que comprendía su situación.
- Él querrá un Spaghetti al Ragu alla bolognese- habló el pelirrojo mirando al rubio quien no sabía exactamente que decir, Taehyung bufó mientras bebía un sorbo de la copa de vino. El mesero se fue de la mesa dejando todo en silencio nuevamente.
- Disculpe Yoongi, pero exactamente ¿Qué me pidió?- preguntó apenado, el susodicho solo miró regalándole una sonrisa, Taehyung notaba cada cosa, tratando de calmarse. Minho miraba todo, divertido de lo evidente que era su amigo y su carácter explosivo.
- Es pasta, tu tranquilo, te gustará- habló con seguridad, Jungkook lo observaba, estaba maravillado de aquel hombre aunque debía ser algo discreto sobre todo por la actitud tan extraña de su jefe, quien aún no paraba de mirarlo, se sentía tan hostigado que lo único que quería era irse de aquel lugar. Pasaron al menos 20 minutos, los 20 minutos mas eternos que ocurrieron en aquella mesa, nadie dijo nada, solo se podía escuchar el eco de las platicas lejanas de otros comensales en el restaurante.
Llegaron los platillos, el mesero lo coloco frente a cada dueño del platillo, él se sentía bastante incomodo por atender esa mesa pero no le quedaba de otra, era su trabajo y lo trataba de cumplir con rapidez. Al terminar de colocarlos dio una reverencia y se fue de ahí, Jungkook miraba su platillo con sorpresa, jamás había comido otra cosa que no fuera coreana y era una experiencia nueva para él, tomo el tenedor y comenzó a comer tratando de no sorber la pasta para evitar que los demás se burlasen de él.
En cuanto probo el platillo quedo fascinado por exquisito mangar que probaba, sus ojos brillaban, miro al pelirrojo feliz.
- ¿Te gustó?- preguntó Yoongi mientras con su tenedor de mariscos sacaba los caracoles de su caparazón para después comerlos, Jungkook lo veía asqueado pero prefirió concentrarse en su comida.
- ¡Esto sabe riquísimo!- exclamó con felicidad aunque su sonrisa se borró al notar la mirada punzante de su jefe, el pelirrojo sonrió orgulloso por su elección tan acertada. La cena continuó en silencio, la tensión parecía disminuir, cada quien estaba concentrado en su plato de comida evitando hablar, ciertamente fue la cena más silenciosa que alguno de ellos pudo asistir pero no decían nada para no convertir aquello en una platica hipócrita.
El reloj marcaba las 9 de la noche, y fuera del restaurante se podía notar el bellísimo jardín trasero que se alumbraba por la decoración que se desplazaba a lo largo de los arboles de fuera, Jungkook se centro en la vista de fuera tratando de bloquear toda incomodidad que se ocasionaba en aquella mesa.
- Ya nos debemos de ir, en un par de horas me voy de viaje y Jungkook tiene que madrugar para su trabajo, aquí les dejo el dinero de la cuenta, yo los invito- Yoongi sacó su tarjeta de su cartera dejándola en la mesa, el rubio miró la tarjeta, esta siendo de color negro se sorprendió sabía bien que esas tarjetas eran una de las más costosas, el pelirrojo se levantó de la mesa acomodando se traje colocándose detrás del asiento de Jungkook para ayudarle a levantarse.
- Yo llevaré a Jungkook a su casa- musitó con seriedad el azabache levantándose de igual forma de la mesa, acomodó su saco, Minho y Jungkook observaban todo en silencio.
- No es necesario, yo le dije que YO lo llevaría- insistió, pero Taehyung esta vez no cedería a ningún intento de Min.
- ¡Yo lo puedo llevar!- exclamó Minho con una sonrisa.
- ¡Cállate!- gritaron ambos al mismo tiempo, el peliblanco solo se encogió en su asiento alzando sus manos en señal de rendirse ante esos dos.
- Yo se dónde vive, yo lo llevaré- Taehyung se acercó al asiento de Jungkook, tomándolo de la muñeca y alzándola con brusquedad, Yoongi le tomo de la otra mano jalándolo hacía sí, Jungkook quedó en medio de aquella pelea frunció el entrecejo algo irritado por la situación.
- ¿Pueden dejarme de tratar como un objeto?- dijo, zafándose del agarre de ambos, el par lo miró sorprendido pues no creyeron que este les hablase así, Jungkook se levantó de su asiento mirándolos con enojo a ambos. – No soy un objeto para que me traten así, ¿Pueden calmarse ambos?- preguntó un tanto fastidiado.
- Lo lamento Jungkook , no quise incomodarte- se disculpó el pelirrojo con una sonrisa. - Pero creo que esta vez no podré llevarte a tu casa Kook, mi vuelo sale en tres horas- el pelirrojo miró a Taehyung con enfado, mientras este solo tenía una sonrisa triunfante.
Taehyung 1 vs Yoongi 0
- Yo pediré un taxi, no se preocupe por mí- Taehyung borró su sonrisa al escuchar aquel comentario, Minho lo miró dándole una señal de que este actuara rápido.
- Yo te llevo, no es necesario un taxi- habló con seriedad, Jungkook lo miró con nerviosismo, no quería irse con él pero no tenía otra opción, no tenía el dinero suficiente para tomar un taxi.
- Gracias Taehyung, sé que cuidarás bien de mi Kookie- habló con una sonrisa notando como Taehyung apretujaba los dientes furioso, el rubio solo pudo ocultar un pequeño sonrojo que le ocasionó aquel comentario. El azabache lo tomó de la muñeca jalándolo hacía sí de una forma un tanto brusca. - Bueno debo irme, te encargo mi tarjeta Jungkook, será tu responsabilidad ¿vale?- se acercó al rubio dándole el plástico en su mano restante, Jungkook la tomó un tanto sorprendido.
- Pero...- pronunció un tanto extrañado.
- Cuando regrese de mi viaje, ya tengo una razón para buscarte... así que te la quedarás- se acercó a Jungkook para darle un beso en la frente, Taehyung lo apartó con brusquedad para evitar que se lo diera, Yoongi sonrió hacía el rubio alborotándole los cabellos con ternura. - Debo irme, cuídate mucho- le dio una ultima sonrisa antes de pasar por un lado de Taehyung chocando hombros, ambos se miraron con frialdad como si se tratara de una competencia.
Jungkook solo tocaba su cabellos, amaba ese tacto tan cálido que tenía el pelirrojo, estaba tan confundido, su corazón estaba en un choque enorme y no sabía realmente que hacer. Minho se levantó de la mesa en silencio tratando de no llamar mucho la atención. Yoongi apartó la mirada del azabache comenzando a caminar hacía la salida.
- Fue un gusto cenar con ustedes pero tengo una dama que me espera en casa, yo me retiro- dijo con incomodidad mientras se dirigía al pasillo que le llevaba hasta la salida, Yoongi ya había salido del lugar dejándolo solamente a Jungkook junto a su histérico jefe.
- Paga y vayámonos de aquí- pronunció con seriedad, Jungkook le cedió la tarjeta al mesero que observó toda la escena un tanto tenso de lo que pudiera pasar entre los mayores, este la recibió pasándola por el lector, a los pocos minutos se la devolvió junto con el ticket de compra, se soltó del agarre de Taehyung y comenzó a caminar hacía la salida, el azabache solo suspiró con pesadez siguiéndolo.
Salieron del lugar, el viento soplaba con fuerza y el frío se sentía aun peor. Taehyung salió detrás suyo, sacó las llaves de su auto abriéndolo a lo lejos con el control, camino hacía su deportivo dejando atrás al rubio, Jungkook lo siguió en silencio, no tenía ánimos de hablar con su jefe, no con lo que había pasado una noche anterior.
Ambos entraron al auto en silencio, Taehyung arrancó con lentitud saliendo de aquel jardín, miraba el camino que se alumbraba con las luces de su auto, todo estaba en silencio.
- Esto que hiciste fue una falta de respeto- habló Taehyung después de varios minutos en silencio, Jungkook lo miró un tanto extrañado, no comprendía a que se refería.
- ¿Qué quieres decir Señor Kim?- preguntó, el azabache negó.
- En estos momentos no soy tu jefe, pero quiero saber ¿Que sucede contigo?- trataba de dar su mejor actuación y parecía funcionar, Jungkook trataba de comprender todo lo que pasaba.
- No sé que quiere decirme- habló confundido, Taehyung ya un tanto irritado lo miró furioso, deteniendo el auto en medio en la carretera, lo miró con seriedad, el rubio tan solo lo evitaba a toda costa.
- Ayer te confesé mis sentimientos Jungkook y parece que eso no significó nada para ti- continuó mintiendo, el rubio agachó un poco apenado, estaba hecho una maraña de sentimientos que lo confundían demasiado.
- Yo... yo no puedo corresponderle Señor Kim, usted es un hombre comprometido- replicó apenado, Taehyung negó, este trataba de encontrar las palabras adecuadas para convencer al rubio pero su mente estaba en blanco. Jungkook apenado agachó la mirada tratando de no chocar con los ojos de Taehyung.
- ¿Y por qué correspondiste al beso que te di?- preguntó de la nada, aunque no quisiera admitirlo si le causaba un tanto de curiosidad. El rubio lo miró con un leve sonrojo que se dibujaba a lo largo de sus mejillas.
- Yo... yo no sabía que hacer- trató de justificarse, el azabache se acercó cada vez más.
- Tu me gustas demasiado Jungkook, y no puedo resistir que alguien más se acerque a ti, quiero tenerte conmigo- el susodicho lo miró perplejo, no sabía que hacer tan solo sentía como su corazón se aceleraba ante tales palabras.
- Señor… pero usted tiene novia- trataba de calmarse, Taehyung lo miró con seriedad.
- Ella no me importa, me importas tú... quiero estar contigo y que tu estés conmigo- Taehyung trataba de actuar lo más natural y al parecer funcionaba a la perfección, podía sentir la respiración agitada del rubio, aquellos ojos azules que lo miraban con sorpresa le daba un indicio que realmente podía conseguir algo con el rubio.
- ¿Me está pidiendo ser una pareja?- preguntó avergonzado, Taehyung se apartó del rubio acomodándose en su asiento, apartó la mirada del rubio, mirando la ventana del piloto - Yo no quería incomodarlo...- habló de nueva cuenta el rubio al ver tal acción del azabache.
- Si Jungkook, te estoy pidiendo que seas mi pareja- dijo mientras tenía la mirada fija en el paisaje junto a él, rodó los ojos sin que lo notase el menor, Jungkook al escuchar eso sintió como su corazón se aceleraba y realmente no sabía la razón exacta, odiaba a ese hombre con todas sus fuerzas pero aquellas palabras parecían que aquel odio desaparecía.
- Yo... yo tengo que pensarlo Señor Kim... no me siento cómodo saliendo con alguien quien tiene pareja- musitó con vergüenza.
-¿Es por Yoongi cierto? ¿Te gusta él, no es así?- Taehyung apartó la mirada del paisaje mirando de nuevo al rubio quien trataba de sostenerle la mirada al mayor sin conseguir un buen resultado, aquellos ojos azabaches le ponían tan nervioso que odiaba mirarlo, odiaba esos ojos más que a nada.
- No... no es así... yo, yo no sé si salir con usted estando en una relación sea lo correcto- Jungkook lo miraba con seriedad.
- Cancelaré mi matrimonio pero dame tiempo a que pueda hacerlo, pero Jungkook ...- guardó silencio un par de segundos para tomar valor - Te necesito a mi lado- terminó la frase, el ambiente se silenció por completo, el rubio no sabía que hacer, trataba de procesar todo lo que estaba pasando, no entendía nada, le parecía tan sospechoso lo que ocurría pero decidió confiar en aquellas dulces palabras que comenzaban a cautivarlo.
- Esta bien, me mantendré a su lado- pronunció con dulzura, acariciando su mano con ternura, Taehyung notó aquel detalle, lo miró con seriedad, acercándose de nueva cuenta al rubio. Lo jalo hacía si, besándolo con rapidez, Jungkook cerró sus ojos ante tan acto sintiendo los suaves labios de su jefe que aprisionaban los suyos con desesperación, el azabache comenzaba a mover sus labios en una vaivén lento que se acoplaba al paso del rubio, el menor disfrutaba de aquella acción, de un impulso este colocó su mano en el rostro del mayor para poder besarle con más profundidad.
"Más vale que este sacrificio funcione para cancelar todo con Jiyeon " pensó el azabache con amargura, era su segundo beso con su rubio asistente y a comparación de otros besos que tuvo este fue el peor, el que más le asqueó.
Después de varios segundos, se separaron del beso, Jungkook miró a Taehyung con un sonrojo en sus mejillas, el mayor le sonrió un tanto fingida pero era experto en eso así que era fácil camuflarse.
- Debemos irnos- pronunció, mientras encendía de nuevo al auto, piso el acelerador conduciendo hacía la ciudad, todo el trayecto fue en silencio, la música clásica que sonaba por el radio daba un ambiente calmado, sin embargo Jungkook estaba inmerso en sus pensamientos, tocaba su corazón tratando de calmarse pero por más que lo intentaba nada parecía funcionar.
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Castigo De Amor - Taekook
FanfictionKim Taehyung un joven multimillonario, CEO de unas de las empresas multinacionales más grandes de Corea y del mundo; un mujeriego empedernido por excelencia y tiene la vida perfecta que muchos de nosotros sonariamos; repletas de dinero, mujeres y do...