♣️ 046 ♣️

118 20 59
                                    



Kim Sohye





—Joven Hwang, señorita Kim —siempre me había quejado por la seguridad que mi familia me demandaba tener, pero la seguridad de Hyunjin era cinco veces peor. Entramos a la camioneta para dirigirnos al velorio de mi abuelo. Los dos estábamos en silencio fingiendo que nada pasaba, o eso creía.

—¿Cómo has estado? —preguntó sin verme a mí, su vista estaba en la ventana.

—Bien, ¿tú?

—Ocupado.

—Me imagino —mis manos temblorosas no se mantenían quietas. Me sentía nerviosa. En toda mi vida de conocerlo jamás me había hecho sentir tan nerviosa como lo estaba en ese momento. Tal vez porque yo era la culpable de haber dejado las cosas congeladas entre nosotros.

>> ¿Y tú... Qué has hecho de nuevo estos meses? —me atreví a preguntar luego de unos segundos.

—Trabajando. No tengo mucho tiempo para salir y conocer personas como me pediste. Tú sí lo has hecho, ¿cierto?

—Algo así. He hecho muchas cosas últimamente. En un año empiezo en Jgroup y quiero aprovechar al máximo antes de que empiecen a entrenarme para cambiar la sucesión.

—Me alegro.

—¿Tú no piensas volver?

—Aún no, volveré cuando sea momento. Luego veré que haré con mi vida.

—¿Con tu vida?

—Espero tengas claro que no te dejaré ir fácilmente.

—¿Por qué dices eso de la nada?

—Solo es un aviso. Por los momentos veremos dónde estamos parados. Yo estaré un tiempo en Londres, tú estarás aquí. Tú y yo seguimos estando juntos.

—Nos estamos dando un tiempo.

—Al final terminaremos juntos de nuevo —Hyunjin y Yohan eran iguales, tercos y obstinados. La diferencia era que Yohan era posesivo, y Hyunjin era más calmado porque sabía que tenía las situaciones bajo su control. Tal vez él sabía que probablemente estaba "saliendo" con Kyungsoo, pero no hacía nada porque con un solo movimiento podía deshacerse de él. Respetaba mucho mi espacio y mis decisiones y se mantuvo al margen hasta que no aguantó más.

Bajamos del auto en la funeraria. Había periodistas reportando la muerte de mi abuelo y calando la llegada de cada visitante. Los autos que resguardaban a Hyunjin siempre se identificaban por la bandera de Corea adornando los retrovisores y la insignia de las empresas de su familia, así que captaron el momento en el que bajó del auto junto conmigo como si fuera la noticia del año. Su familia era muy poderosa, incluso más que la mía, pero por alguna razón su abuelo de 79 años respetaba mucho a mi abuela Seyeon. A mi abuela hasta yo le tenía miedo.

—Joven Hyunjin, señorita Kim, es muy grato verlos juntos de nuevo. ¿Podemos hacerles unas preguntas?

—No.

—Solo será una.

—No tenemos tiempo.

—¿Qué pasará ahora que el señor Kim falleció? ¿Piensan comprometerse para unir a las tres empresas?

—En un futuro. Adiós.

—Pero...

—Guarden las distancias —los guardaespaldas nos hicieron una pequeña barrera hasta entrar de lleno al salón donde se estaba velando a mi abuelo. Todos estaban igual de atónitos que los periodistas, juraban no volverlo a ver a mi lado.

♣️Your♥️Eyes♦️Tell♠️ (♣️House♥️OF♦️Cards♠️)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora