32. Luz divina

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Daila.

El piso estaba frío e incómodo, mis ojos después de algunos parpadeos se adaptaron a la luz. El viento erizó mi piel y yo me empecé a incorporar tratando de recordar que sucedió, después todo se me vino a la mente cuando escuche un graznido atrás mío.

- ¡pájaro tonto! - Grité con fuerza mientras le lancé una roca - casi me matas.

Miré mi mano con mucha preocupación, habían algunos rasguños pero la sangre ya estaba seca ¿ cuánto tiempo habré pasado aquí? Mirando mis celular mis ojos se abrieron de par en par. Eran las cinco y pronto serían las seis de la mañana ya va a salir el sol, volviendo a observar el lugar miré que estába unos metros lejos de la fuente, creer que un pájaro me hizo ésto es ridículo.

Traté de pararme  pero estaba sin fuerzas, así que solo me senté. Entonces todo mi cuerpo me empezó a palpitar de dolor, mis pies me ardían, intente levantar  mis brazos pero fue doloroso. Al menos estoy viva. Aunque eso no me ánima en lo absoluto. El motivó que me trajo aquí al menos lo olvide por algunas horas, aunque me puse melancólica al volver a recordar todo. El cuervo me empezó a picotear mi pierna sin lastimarme, yo estaba molesta con él pero no le iba a hacer nada, buscaba mi mano con su cabeza y deduci que quería caricias, empecé a rascar su cabeza y acariciarlo

- tus plumas son muy brillosas - admiti

Este se acercó más e inclinó su cabeza en mi pecho acurrucandose

- Hay dos opciones, o te sientes mal por lastimarme o tienes frío.  Probablemente es la segunda. Quizás te fastidie por seguirte, las aves cómo tu son muy curiosas e impredecibles - dije aspirando el aire frío, podría darme una hipotermia así que decidí volver a casa

Pero el cuervo no se movía de donde estaba. Yo estaba estática y buscando alguna idea sin llegar a volverlo a enojar. Empezó a aclarar y decidí esperar a que el cuervo se fuera, quizás estaba enfermo o lastimado. No quiero sentirme mal después de irme. El ambiente empezó a aclarar, los rayos del sol salían levemente pero yo miré hacia abajo con preocupación al ver como el cuervo graznia por lo bajo

- qué te pasa bonito, ¿ te duele algo? - me sentí muy mal ,aquel sonido que emitía lo sentía tan triste y doloroso

Así que lo empecé a acariciar y abrazar su pequeño cuerpo.

Los rayos del sol iban a llegar hacia dónde yo estaba y me sentí agradecida por estar apunto de sentir la calidez de la luz. Pero algo en el aire capto toda mi atención, un humo negro estaba saliendo de algún lado y cuando miré hacia abajo me aleje del cuervo ¿ algo se está quemando?  ¿ qué sucede? Me aleje otro poco más y la sombra se estaba expandiendo más y más a medida que el sol avanzaba, un grito muy raro se escucho, parecía una persona sufriendo. Luego creí ver un cuerpo alzándose y me alejaba con más rapidez arrastrándome mientras veía la brutal escena.

Veía a una persona tomando la forma de aquel nube negra y grite con fuerza. Estaba horrorizada

- ¡ auxilio! - Grité, la verdad mi cuerpo se negaba a levantarse

Cuándo volví a ver aquel moustro unos rasgos se me hicieron muy similares y raros. Mi boca formó una o ,mis manos temblaban, quería pensar que estaba soñando

Frente a mí Álex elevó su mirada, desnudo con manchas negras como si hubiese estado acostado en carbon. Acabe de ver un ave ser humo, luego ver como le crecieron extremidades y trasformarse en alguien que conozco

Esto no es posible...

- Daila, tranquila por favor ,yo sé que esto...

- ¡No! ¡ no te me acerques! - hablé rápido cuando vi que avanzó hacía mí- ¿ Qué cosa eres? ¿ qué es lo qué acabo de ver? ¿ qué es ésto?...

Seguí haciéndome hacía atrás y choque con una roca enorme. Cosa qué me hizo parar de retroceder.

Cerré los ojos muy fuertes y los volvi a abrir con la esperanza de despertar de un sueño, pero no paso nada. Álex se arrodillo ante mí y suspiro muy fuerte, tan fuerte que escuchaba su respiración y la mía

- Hace mucho tiempo dijiste que me notaste raro. Y fue allí, por culpa de la fuente a la que estabas a punto de pedir un deseo que me convertí en esto tan raro y sin sentido que ves. Parece irreal, imposible, estúpido, pero es lo que me sucede. Hace tiempo desdé que llegó a hacerte  visitas ese cuervo , era yo. La razón por la qué no te pedí antes que fueras mi novia era esto, saber que un día me podía pasar algo he ibas a sufrir. Si me odias o me tienes asco por lo que acabas de ver esta bien, lo entiendo. Pero quiero que sepas qué no bese Gine, ella lo hizo. Yo también te amo Daila. La única chica que besaría, serias tú.  Déjame ayudarte mi amor...

Sus palabras abrieron una herida que apenas estaba hecha, ésto es de no creer, Álex es un cuervo. Cuándo se me intentó acercar me incliné hacia atrás y negué

- tienes que irte, yo no se qué pensar de esto. Tengo miedo de tí.  - confesé temblando de frío y miedo

El retrocedió con una mirada perdida en su rostro. Sus ojos estaban vidriosos, empezó a caminar hacia algún lado, quien sabe a dónde.  Sólo me quedé allí procesando todo lo que me vi

Agarre mi celular y la última llamada que recibí fue una que no conteste, era Martín.  Volví a llamarlo y ni siquiera lo deje decir algo.

- te voy a cobrar lo que dijiste. No puedo moverme porque me siento mal. Puedes ayudarme a volver a mi casa estoy más allá de la entrada del bosque, en la gran roca...

- voy para allá, ¿necesitas algo más? - preguntó

- Sí, medicina para el dolor. Mi cuerpo está muy estropeado y algo para dormir también- terminé de decir y colgué

Mis ojos me dolían, mi cuerpo, mi alma, mi corazón, todo.

Maldito Deseo  [ Completa ✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora