9. La ley del hielo

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ÁLEX.

Una vez que llegue a mi casa no pude volver a dormir. Caminé de un lado a otro, por primera vez no tenía ganas de hacer nada. Me asomé al cuarto de mi mamá para acercarme a ella y conversar pero estaba felizmente dormida. Y eso era más que obvio eran las cuatro y cincuenta de la madrugada.  Dormir a esa hora es lo mejor.

Subí a mi cuarto nuevamente para colocarme una camisetilla y un calentador, me puse mis zapatos deportivos y llene una botella con agua

Y como un loco y con una luz leve  en mi patio me puse a hacer ejercicios. Tampoco es de gente demente hacer esto, se que hay personas que se levantan a las tres o cuatro de la madrugada a ejercitarse. Primero calenté. Utilice una pesas que tenía para hacer sentadillas. Salte en la cuerda, hice abdominales, flexiones de pecho. Hice un trote leve alrededor, algo de peso muerto y unas pesas más pequeñas para mis brazos

Quizás ya iban a ser las seis de la madrugada todo estaba más claro. Me senté un momento en el césped y me quedé en blanco mientras todo mi cuerpo sudaba. De pronto un miedo estúpido se mezcló en mi cabeza y tuve la extraña sensación de qué alguien me vigilaba.  Alcé mi cabeza y unos ojos detrás de la vaya que había en mi casa mi observaban

Me quedé petrificado.

Los ojos parpadeaban con lentitud, y luego una mano arrugada se asomó para abrir el seguro de la puerta qué bloquea el paso hacia mí patio.

Su melena blanca y negra se hizo paso por la apertura junto con su vestido de flores

- ¿ Estás bien hijito? - la voz de la abuela Marcus se introdujo en mis oídos y yo solté un suspiro de alivio

Casi me hago en los pantalones.

- s- sí señora Marcus. - tartamudee un poco

- llámame abuela Marcus, y no te creo hijo. Tu madre me dice qué te falta poco para que entres en estado de invernacion - dijo con una risa algo contagiosa, yo reí junto con ella

- ella suele exagerar. Aunque no niego que amo dormir - ella dio un asentimiento

- ¿ Entonces qué te sucede muchacho? , ¿ Acaso tu novia sólo te aceptas si tienes un buen cuerpo? ¿ haces ejercicio porque estás estreñido niño? ¿ te hacen bulling en la escuela ? - yo la interrumpí de inmediato negando sus preguntas y algo avergonzado

- No. No a ninguna de sus preguntas - de pronto me encontraba riendo del nerviosismo - Sólo que no puedo conciliar el sueño, no paro de pensar por las noches. Puede qué sólo sea insomnio 

Ella dio un asentimiento muy fuerte y sonrío

- Mi esposo solía decir lo mismo cuando estaba vivo. Decía cada ocurrencia qué se le viniera a la cabeza, unas noches me decía qué tenía un problema enorme pero nunca me contaba que.  Otras decía qué podía volar. E incluso que era un cuervo. - su risa era muy amplia. Pero sus palabras me dejaron mudó  - ¿ Tú también eres un cuervo muchacho? - dijo mientras reía  y empezó a caminar hacia su casa

- ¡abuela Marcus! - le grité y ella se giró algo asombrada por mi voz - disculpe la pregunta. ¿ qué fue lo qué le sucedió a su esposo?

Se giró sobre sus talones para estar frente a mí.

- Lo encontraron muerto en el bosque. Algunos dicen que fue por el ataque de un animal , pero todo fue muy confuso. Incluso había el resto de una fecha en su torso. Nadie sabe si alguien lo hizo apropósito.  Su muerte fue el momento más doloroso para mí. ¿ por qué muchacho?

Mientras me contaba lo qué pasó sentí una punzada de dolor en mi pecho. Quise preguntar más pero no quería incomodarla

- Por nada abuela. ¿Y desdé cuando empezó con esas historias que decía? - pregunté mientras me puse de pie

- Dos años y medio antes de que muriera. A veces pienso qué pudo a ver sido por un animal, me decía que iba a casar por qué la luna le ayudaba a ver mejor y siempre iba de noche. El bosque es un lugar peligroso. No te acerques allí hijo , nos vemos - sin más salió por aquella puerta hacia su casa

Yo por el impactó de las palabras me volví a sentar. Eso tenía sentido. Al menos en mi cabeza lo tenía. Y sí es así cuándo tiempo sobreviviré,  no me siento libre. Hoy más qué nunca presiento qué esto aún no acaba y qué cuánto menos lo espere mi cuerpo será el de un ave. Probablemente el señor Marcus fue cazado. Había historias que hacían que las personas de aquí le tuvieran odio a los cuervos porqué se creía eran demonios

En la actualidad por ese tipo de historias muchos animales se han extinguido.

Solo son lo qué se oyen. Animales. Seres vivos que no tienen la culpa de los miedos de las personas

Pero que más se puede esperar de los humanos. Las personas siempre andan destruyendo las cosas hermosas que tiene este planeta y un día terminaran por destruirlo completamente.

Me encaminé a darme un baño y cambiarme para ir a la secundaria. Hoy será un día difícil, si es cierta esa historia no quiero que Daila un día termine extrañando mi presencia de algún modo y no quiero acercarme más a ella hasta qué tenga por seguro qué mi problema está solucionado. Es lo más razonable qué puedo hacer. No  involucrar a nadie para que nadie sufra por mi problema

Suficiente tengo conmigo sin poder parar de pensar en las noches y desarrollando problemas de ansiedad e insomnio.

Tendré qué acercarme más a la abuela para que me diga más sobre lo que pasó, quizás se pueda hacer algo e incluso llegue a prevenir cosas que me pasarán

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- ¡Hey! Come más despacio por favor, aún queda comida de sobra - mi mamá me extendía un platillo con tostadas para untar con mi desayuno

- Come así porque su novia Daila lo está  esperando,  pobre de mi hermano por eso no quiero tener una novia.


- No es mi novia enano - le advierto y Will empezó a tomar su bebida mirándome de reojo

- Hacen muy bonita pareja. ¿ cuándo la invitas a cenar aquí? - un pedazo de comida se me fue por el lado equivocado y tuve que tomar medio vaso de jugo


- Qué no es mi novia mamá. 

Ella y mi hermano empezaron a reírse.  Cuándo ellos dos se juntan hacen mi vida una locura


- Por cierto hermano. Gracias por acompañarme a  mi recital de navidad. ¡Eres increíble! - giré mi cara con brusquedad hacia él y mi mamá se mordió la boca para no reír con fuerza


- Hijo estoy orgullosa de ti. Eres un gran hermano, gracias por comprender mi situación y acompañar a tu hermano al recital del día sábado para oírlo cantar villancicos - colocó su mano en el pecho y fingió que le caía una lágrima


Por otro lado mi hermano me daba palmadas en el hombro y asentía

- Dos chantajistas. Ustedes me volverán loco. Me voy antes de que termine siendo la criada de la casa - las risas inundaron el comedor y yo me puse de pie


- ¡ Qué tengas un buen día! - dijeron al unísono y les di una sonrisa de lado

Para colmo tengo que asistir a un recital y ahora me toca ignorar a Daila.  El mundo conspira en mi contra

Disfruten el capítulo!

Maldito Deseo  [ Completa ✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora