Maldito Deseo [ Completa ✔]

34. El bar

Jackson

Hace una horas recibí la llamada de Álex pero no llega. Siempre tarda unos minutos. Miré por la ventana y aún no se divisaba a nadie

Se me acercó alguien por la espalda besando mi cuello.

- Quisiera que me prestes atención, has mirado la ventana unas veinte veces - mi novia me rodeo para besarme

Sus manos se adentraron en mi camisa para luego desender, pero la detuve.

- Va a venir Álex, ahora no sería prudente.  - dije acariciando su melena roja

- ¡¿ seguro?! - comentó de manera seductora, haciendo divagar mis pensamientos luego de verla esta mañana en ropa interior

- Si en unos minutos no llega, acepto la oferta. - Ella me volvió a besar y sonó el timbre

- Rayos. - dijo chasqueando su lengua - eso estuvo cerca - fue a cocina y yo abrí la puerta

Iba a saludarlo como siempre, pero Álex se veía muy mal.

- Hey, ¿ todo bien?  te ves horrible.

Después de mi sinceridad, el negó con la cabeza y se sentó en el sillón. Luego me mostró el anillo que le había comprado a Daila hace un tiempo y creí saber que le sucede

- Ella terminó conmigo. Estaba junto a Martín, él la abrazaba. - se recostó en el sofá

- ¿Pero te explicó que sucedía?- estaba muy curioso por la respuesta

- Fui y empujé a Martín, después me dijo que la llevo al hospital. No pregunte más estaba furioso, no se qué pasaba por mi cabeza ¿ella estaba buscando consuelo en él?...

Parecía que estaba hablando para si mismo. Mi chica me miró y luego a Álex cuándo lo observó frunció su cara, señale una botella de licor y ella me entendió. Álex estaba sudoroso, desaliñado con el cabello alborotado. Parecía loco. Mi chica saludo a Álex y se fue, no es necesario la comunicación con ella, siempre me entiende.

Trajo licor y nos dejó a solas, le brinde a Álex y este bebió sin pensarlo. Estaba muy lastimado y eso era claro

- me dijiste que ya no sé habla con la amiga rubia qué tenía, qué la mamá nunca está, ella dijo que la acompaño al hospital, debe ser cierto y no tenía a nadie más a quién pedir que la acompañe

- ¡¿ y yo?! - habló indignado - ¿ porqué no me llamó a mí?

Estaba dolido por eso.

- Acabó de pasar lo del escándalo por Gine, trata de entender - le hablé suave para que se tranquilice, pero bebió con más ganas

- yo no la besé, yo no quise hacer esas escenas, yo no quiero ser lo que soy. ¡ pero mírame! No tengo más opción, toda mi vida se ha convertido en el infierno. Martín le quiere hacer daño, no tengo más fuerzas para volverlo a amenazar o golpearlo, no sirve de nada hacer eso.

-¿ y qué harás? - pregunté sin pensar y sólo me miró bebiendo nuevamente

- Nada. Ya la perdí, y me siento cansado.

Me quedé callado mientras observé levemente una lágrima salir de uno de sus ojos y agacharse para disimular su dolor.  Me sentí muy mal por mi amigo, yo llevó conociéndolo hace años, es un buen chico, un buen amigo. Él se merece estar feliz . Traté de quitar la botella pero la agarró y bebió directamente de ella. Está vez las lágrimas rodaron con intensidad, yo sólo estaba a su lado mientras desahogada su dolor.

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Álex se quedó dormido en el sillón luego de enborracharse. Le dije a su mamá la situación y ella entendió, claro está , mentí sobre una que otra cosa.

Salímos en el coche con mi novia para acompañarla a comprar su vestido. Estaba muy emocionada por eso y se lo había prometido, ahora Álex duerme profundamente, cuándo llegue seguirá ahí. Luego de unas horas de viaje llegamos a una famosa tienda de la ciudad. Ayude a elegir un vestido negro satinado a mi novia ,luego de probar miles de vestidos. Pero si ella está feliz, yo lo estoy, así qué no importa el tiempo qué le tome.

- Gracias por el regalo. Prometo que lo estrenaras- dijo sonriente y yo imite su sonrisa

- Dios te oiga. Porque fue exitante verte con el- se acercó para besar mi mejilla y luego acomodó las compras

Viajando unos kilómetros ya estábamos cerca de nuestro destino, paramos en un semáforo, estaba mirando los coches hasta que me codeo mi novia

- ¡esos no son Martín y Gine!- habló asombrada

Seguí su indicacion y me quedé estupefacto. Estaban cerca de un túnel que pasa por el estudio, estaban hablando.

- ¿ Qué raro? - mencioné y luego se basaron, mi novia tapo su boca porque hizo ruido de la impresión

Los carros empezaron a pitar detrás de mí y no tuve más opción que avanzar, golpeé el volante con frustración

- ¡Diablos no alcancé a tomar una foto, eso le hubiera servido a Álex ! - maldeci una y otra vez en mis pensamientos

Que mal amigo soy...

- tranquilo mi amor. Yo lo hice. - volteé mi rostro en unos  nanosegundos, casi lesionando mi cuello, elevó el celular mostrando un video corto y yo aplaudi fuerte

- Eres increíble. - admiti y la besé

- Lo sé- dijo triunfante - también se qué lo quieres más a Álex que a mí- habló entre risas y yo también reí

Luego acelere para llegar lo más rápido posible a mi departamento. Álex tenía que saber ésto.

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Entré inquietó a la casa y Álex estaba con una bolsa de hielo en la sien. Sin esperar que saludara o hiciera algo le mostré el video

- Está. Está es la prueba para qué ella te crea, esa mujer estaba ayudando al tonto. - Álex tomó el celular y luego de repetir unas cinco veces el video, quedó perplejo 

- ¿ cómo obtuviste esto? ¿ cómo es posible qué quién yo consideraba mi amiga me traicióno de esta manera? - me senté en el sillón

- cuándo veníamos los vimos algo lejos de aquí, mi novia logró grabarlos. Al final Gine nunca me agradó- admiti y me recosté sonriente

- Tengo que buscarla. Si ella no quiere estar conmigo lo aceptaré y no la molestare, pero tengo que demostrar que no la engañe. Tengo que irme. - Álex tomó sus llaves y nos abrazo a mí y a mi novia dando las gracias, estaba tranquilo

Me pare y miré fijamente a mi peliroja

- Es hora de compensar todo lo que te debo - su sonrisa y la mía se expandieron, la bese hasta llevarla al cuarto y disfrutar de nuestra victoria

Disfruten el capítulo