Billy Loomis

2.8K 153 0
                                    

Estás cien por ciento segura de que estás maldita.

Siempre es lo mismo. Conoces a un chico lindo, tienes una cita con él y al día siguiente te enteras por la noticia de que Ghostface lo mató. Es aterrador, y tienes miedo de que esta maldición algún día se extienda a tus amigos y familiares. Quiero decir, si pasas una o dos horas con un chico en un restaurante y muere, ¿quién puede decir que este asesino no eliminará a las personas con las que pasas la mayor parte del día?

Así que has empezado a evitar a todo el mundo y te encierras en tu habitación. La mayoría de la gente comenzó a preocuparse por ti, algunos de ellos saben la razón por la que estás haciendo esto, pero otros pronto comienzan a odiarte por ignorarlos, pensando que te has convertido en una mocosa egocéntrica. Una de esas personas fue Tatum, tu vieja amiga de la infancia, que se niega a creer que tus citas murieron por tu culpa y decidió no volver a contactarte nunca más. Al menos aún podías contar con tus otros amigos, quienes seguían tratando de verte incluso después de que les dijiste sobre el posible peligro de morir si permanecían cerca de ti. Stu y Randy fueron los que trataron de hacerte sonreír, siguiéndote por la escuela actuando como guardaespaldas y haciéndote reír de vez en cuando, mientras Sidney y Billy hacían todo lo posible para consolarte.

Especialmente Billy.

No importa lo que digas o hagas para mantenerlo alejado, él siempre está ahí; ya sea a tu lado en la escuela para mantener alejados a los enemigos o visitándote en tu casa para asegurarte de que estás bien. Él siempre te ha estado protegiendo de todo, a veces hasta el punto de lastimarse en el proceso, y a veces jurarías que está enamorado de ti solo por la forma en que te mira... pero tiene una novia, una novia que es también tu mejor amiga, y tienes que recordártelo cada vez que sientas que estás a punto de perderte en sus ojos oscuros.

-¿Qué estás pensando?

Hablando del diablo, la voz de Billy te saca de tus pensamientos y le devuelves la mirada para verlo sonreírte, sus ojos brillan de una manera que te hace sentir importante.

-Todo -Tomas un sorbo de tu malteada, dando un pequeño vistazo al restaurante al que te obligó a ir después de sacarte de tu casa-. No quiero que mueras por mi culpa.

Él se ríe y vuelves tu atención a él. -¿Cuántas veces tengo que decírtelo? No me pasará nada.

-No puedes saber eso.

Su sonrisa se estira ligeramente. -Sé más de lo que crees.

Le devuelves una pequeña sonrisa, secretamente agradecida de que haya estado ahí para ti durante estas horribles semanas pasadas. Cuando lo piensas, Billy ha estado pasando mucho más tiempo contigo que con Sidney, incluso antes de los asesinatos, y es porque querías poner cierta distancia entre ustedes dos que comenzaste a tener citas en primer lugar. La verdad es que has comenzado a desarrollar algo más que un pequeño enamoramiento por él, y no querías arriesgarte a destruir tu amistad con Sidney debido a tus estúpidos sentimientos.

-¿Cómo está Sidney? Hace tiempo que no sé nada de ella.

Captas sus labios contraerse por un momento, pero se encoge de hombros para tratar de descartar sus oscuros sentimientos.

-No sé -Toma un sorbo de su coca cola, un brillo de complicidad se esconde en sus pupilas-. Ella no ha contestado su teléfono en unos días.

Frunces el ceño. Eso es extraño.

-¿Estás seguro de que ella está bien? Quiero decir, hay un asesino por ahí y su padre no ha estado en la ciudad en semanas.

Da una sonrisa extraña. -Estoy seguro de que ella está totalmente bien.

𝐑𝐀𝐍𝐃𝐎𝐌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora