Molly era una niña normal que asistía a una escuela poco común, tenía una amiga cercana y unos padres amorosos a quienes quería con todo su corazón, pero aunque se vieran normales por fuera, su familia no era para nada normal. Todo el mundo guardaba...
Era una mañana de otoño en las zonas residenciales del distrito Brandt. Como todos los días, la familia Gallow habían iniciado su jornada reunidos tomando el desayuno y despidiendo a la hija del matrimonio, quien fue llevada por el autobús escolar a la unidad educativa donde estudiaba. Se suponía que luego de eso, Alastor se encerraría un par de horas en su estudio y Charlie iniciaría sus labores de limpieza en el único día libre que coincidían en casa.
Pero sucedió algo inesperado. Un mínimo error de cálculo los tumbo contra el suelo de la sala uno encima del otro. En circunstancias normales, con la presencia de Molly en la residencia y con su cabeza ocupada con otros pensamientos, Alastor hubiera podido levantarse sin problemas, excusando su torpeza y ayudando a levantar a su compañera. No obstante, no pudo hacerlo.
Charlie había tomado una audaz iniciativa, arriesgándose por una vez por algo más que una cordialidad y amistad sencilla. Ella estaba clara que una situación así no podría repetirse fácilmente, sin obstáculos, sin posibles interrupciones, solo los dos juntos allí, había tomado la fuerza y valentía que no había logrado en todo ese tiempo.
Por ello alzó su mano con decisión, pasando sus brazos alrededor de los hombros de Alastor y obligándolo a seguir cerca de ella. Este se quedó congelado, preso de un abrazo repentino que le tomo desprevenido y desarmado.
Con los dos solos, el reconocimiento de una tensión que había pasado desapercibida o ignorada, se hizo palpable de repente en la mente del espía. Teniéndola justo debajo de él con una mirada que claramente denotaba un deseo, hizo que el sentimiento de hambre que había estado conteniendo por tanto tiempo se hiciese más difícil de soportar. Y es que la presa que era su corazón se había llenado poco a poco de tantas emociones diferentes que, para poder controlarlas, las había encerrado bajo llave. El problema es que esa presa estaba por romperse, incapaz de mantenerse estable por más tiempo y que solo necesitaba de un único impulso para liberarse.
Con una delicadeza de la que no se creía capaz, Alastor acuno la mejilla de Charlie, quien cerró los ojos presa del estremecimiento que el toque le provino. El locutor sabía que lo que estaban haciendo no estaba bien, su matrimonio era solo una fachada conveniente que habían construido para seguir con sus propios propósitos, la interacción que tenían solo había sido una ganancia positiva en ese juego que llevaban.
Entonces ¿Cómo fue que dejo que pasara eso?
Se suponía que él era un espía. Un hombre destinado a trabajar bajo las sombras, que había abandonado su identidad y que estaba en un constante peligro por las acciones que realizaba. Un hombre como Alastor que desde el principio tenía clara la vida que había aceptado desde el momento que su determinación se había alzado con el ansia de sangre y venganza. Un deseo que lentamente, al paso de su presencia y de sus cálidas atenciones, se había convertido en un aspecto negativo de su nueva misión.
Porque en sus circunstancias, enamorarse no era una opción, no era correcto y en toda su profesionalidad, debía negarse y no sucumbir ante sus deseos o instintos.
Sin embargo, estaba allí, acercándose lentamente a ese rostro que adoraba, anhelando besar esos labios y admirar la gentiliza de sus ojos, en los que veía tanto amor reflejado, que cuando se hubo percatado, huyo de su brillo y franqueza, porque aceptar los sentimientos de Charlie significaba aceptar que él tenía el mismo sentimiento hacia ella.
Por eso había intentado negarse, huir de esa patética emoción y abandonarla, como el resto de ellas que podían interferir en su vida libre de cadenas. Pero sencillamente no había podido resistirse.
A través de su mirada, de sus gestos, de sus palabras y de la luminosidad de su alma, Charlie fue poco a poco envolviéndolo, haciéndolo sentir atraído cada vez más hasta que no pudo alejarse. Acostumbrado a su cercanía y a los momentos que realizaban juntos en esos breves instantes de paz, donde el café los unía por las tardes llenas de baile y risa, donde los periodos de lectura en soledad se habían acortado, hasta reducir las distancias y sentarse juntos en el sillón de la pequeña sala. Eran cosas sencillas, no eran citas estrafalarias o acercamientos sexuales que podrían amenazar el hilo de su cordura, eran solo ellos dos viviendo una fantasía que estaba amenazando con volverse realidad.
—Alastor —lo había llamado con esa voz siempre suave, pero esta vez llena de añoranza y miedo. El temblor de su cuerpo lo había alertado, y el locutor no había podido tomarla entre sus brazos, sintiéndose atrapado.
Ese sentimiento prohibido que lo envolvía era tan doloroso, al punto que se le cortaba la respiración y el pecho se le comprimía y, aun así, el hecho de verla todos los días era tan magnifico.
En el momento que acepto que se había enamorado, en que había decidido aceptar lo que sentía y corresponder los sentimientos de Charlie, el fin último de su misión había quedado relegado a eslabón más bajo, siendo reemplazado por la dicha de estar con ella.
Ya no podía negarlo, Charlotte Morningstar, su amada Charlie lo había atado en cuerpo y alma hacia ella.
Y en ese tortuoso camino lleno de espinas, Alastor había decidido quedarse, recibiendo el sincero consuelo de su amada.
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¡Hola! nuevamente encontramos en este bello escenario que es Secretos de familia, volviendo al pasado, cuando Alastor aun dudaba de aceptar sus sentimientos por Charlie, notamos como considera esos sentimientos un obstaculo para su misión, pero cayendo irremediablemente ante nuestra hermosa Charlie. Sinceramente, este fue uno de los primero capitulos que escribi de este libro y lo adoro, espero les haya gustado.
¿Recuentan la sorpresa que dije que iba a anunciar el domingo con relación a la semana de mi cumpleaños? Bueno, por diversos motivos personales decidí adelantarlo y anunciarselos hoy ¡Tenemos nuevo fanfic! Uno de trama interesante y que avecina una guerra contra el cielo, lo he titulado Lady Hazbin y sera públicado el día 23 de octubre, que es mi cumpleaños, espero lo puedan leerlo. Si quieren saber más sobre él, puede buscarme en mi twitter @Ellexlightccs
y podran conocer los detalles así como visualizar su portada. No se olviden de comentar y votar, siempre aprecio leer sus comentarios, les dejo un gran saludo desde Venezuela y nos leemos mañana.
