𝐌𝐨𝐫𝐧𝐢𝐧𝐠 𝐒𝐭𝐚𝐫 | ᴰᵃʰʸᵘⁿ ʸ ᵗᵘ

𝐌𝐨𝐫𝐧𝐢𝐧𝐠 𝐒𝐭𝐚𝐫 - 19

T/n despertó en el instante que su recuerdo se desvaneció por completo, está se encontraba acostada en el suelo en posición fetal y aún estando desnuda. Dahyun rápidamente fue al rescate de la mayor, arropando a la azabache con su abrigo. La pálida miraba cada centímetro de piel del cuerpo de su amada, verificando que no tuviera rasguño alguno o una herida. Al verificar que ella estaba bien y después de sonrojarse un poco cuando la vió en aquellas partes privadas se relajó, tosió levemente y la abrazó. T/n al estar en sus cinco sentidos devolvió el abrazo con la misma intensidad que le era dado.

—¿Lo lograste? ¿Ya terminó todo? -Dahyun preguntó, T/n asintió levemente con la mirada metida en la curva de su cuello- Por un momento desapareciste y y-yo... Yo m-me preocupé de que no volvieras -esta susurró débilmente, pero su voz denotaba felicidad pura- Pero regresaste, estás bien...

La azabache sonrió tiernamente, está cubrió más su cuerpo con el abrigo. —Prometí cuidarte en cada una de tus vidas Dahyun, regresaría una y millones de veces por ti -esta respondió, T/n no esperó más y besó a la pálida con suavidad y amor, su mano acariciaba las mejillas de la pálida, Dahyun siguió el ritmo del beso, demostrando cada gota de amor en este, poco después se separaron, juntando sus frentes mientras reían- Gracias...

Luego está se separó, y con una vista rápida miró a sus hermanas, a su madre y a sus amigas. —Las cosas aún no han terminado, pero al menos ya podemos dar lucha -esta dijo, Dahyun la ayudo a ponerse de pie, la azabache miró a sus demonios- Pronto iniciará una guerra, mi padre nos atacará con todo su ejército y no sé apiadará de usar todo su poder, deben de estar listas, lastimosamente no contamos con todos nuestros hermanos y hermanas, lucharemos para vengar la muerte de cada uno de ellos  -Nayeon, Jeongyeon, Chaeyoung, Sana e Irene asintieron, T/n sonrió y se dirigió a sus hermanas- Nuestro padre no les hará daño a ustedes, su lucha es contra mí así que ustedes no estarán en la primera línea, solo van a intervenir única y exclusivamente si es necesario, no puedo permitir que les haga daño.

Jihyo sonrió y negó, está se acercó hasta la menor.

—Ya hemos hablado de esto Luci, nosotras te metimos en esto y nosotras te vamos a sacar, no te preocupes mucho, sabemos cómo defendernos -esta dijo y tanto Mina, como Momo, Rosé y Tzuyu asintieron- En estas semanas nos hemos dado cuenta de que tú... Bueno. No estabas tan equivocada respecto a nuestro padre, lucharemos contigo -musitó Jihyo- Por nuestra hermanita daríamos lo que sea.

Luego, desde el fondo de la habitación se escuchó una tos bastante fingida, todas las miradas fueron a dar a Jennie, está sonrió disimuladamente mientras se acercaba. —Y no olviden a mamá -esta dijo- Sé que aún te cuesta confiar en mi, pero te demostraré que puedes hacerlo, ya sabes, quiero ser una buena madre.

—Papá va a estar muuuuuy enojado -Momo habló riendo, apoyándose en la también sonriente Sana- Será cómo en los viejos tiempos cuando mamá y papá regañaban a T/n por sus travesuras. De hecho hasta mamá parece enojada ahora mismo.

—A si es mi rostro normal -musitó Jennie, ahora sí pareciendo enojada- No me provoques Park Momo, cuando me enojo soy peor que tu padre enojado.

—Nah, no lo creo. Lo único que harás es que me gritarás un poco, y me has gritado antes -dijo Momo riendo, pero está hizo silencio cuando Tzuyu le pegó con su codo en el abdomen- Ok...

Dahyun sonrió al ver la sonrisa de felicidad en T/n.

—Si papá se enoja no será por lo que hice, si no por lo que haré -expresó T/n después de que la risa terminó- Antes fui expulsada del cielo solo por qué no me atreví a dañar a mi padre, no puedo permitir que ocurra lo mismo una segunda vez, está oportunidad es única, no la podemos desperdiciar.

La pesadez se instauró en el aire.

—¿Y no podemos hacer algo para... Que nadie muera? -Mina habló en voz baja, ella no se sentía tan a gusto de tener que arrebatarle la vida a alguien- Sé muy bien que Jimin y papá les han hecho demasiado daño, pero... No creo que ellos merezcan morir...

—Concuerdo, pero como dijo T/n no tenemos otra opción -agregó Tzuyu- el Dios que conocemos murió hace mucho tiempo, en su lugar quedó un monstruo insensible que debemos de parar antes de que haga más daño, lo único que me preocupaba era quién iba a ocupar el trono del universo, pero para eso está mamá y T/n -esta aclaró la duda de todas, luego miró hacía el suelo- Respecto a Jimin... Bueno, el mismo eligió su propio camino, nadie lo ha obligado a estar del lado de nuestro padre, es nuestro hermano, pero si se entromete y pretende destruirnos... Bueno, se sabe muy bien lo que debemos de hacer con él.

—Yo me encargo de eso -dijo T/n- Él me odia a mi, debo de ser yo quién debe de acabar con él, no por nada lo dejé casi muerto.

—No por nada es Lucifer -Jeongyeon habló desde el fondo, siendo secundada por las demás demonios.

T/n sonrió y asintió. —Ahora vamos a casa, este cuarto fue diseñado para sellar mí poder, al cumplir su propósito será destruído.

Dicho y hecho el lugar comenzó a desmoronarse, los escombros de las paredes comenzaron a caer por todas partes. Sin pensarlo dos veces Jennie creó un portal que las llevaría de regreso a Seúl, rápidamente todas lo cruzaron antes de quedar enterradas bajo cientos de miles de kilómetros de tierra.

Para poder estar en paz T/n debía de entrar al ojo del huracán, enfrentar a su némesis, la antigua reina del infierno debía de terminar lo que había comenzado millones de años atrás en el inicio de los tiempos. En poco tiempo se vendrían días oscuros.

Pronto llegaría la tormenta.