QUÉDATE ESTÁ NOCHE - BY NATH 🥀

3.

Capítulo 3.

Niall.

No sé que estoy haciendo... O quizás si lo sé. Es confuso, porque no quiero pensar que está mal. No hay nada malo en ello, fue solo un detalle, no debería darle tanta importancia. Lo haría por cualquiera... No, no lo haría por cualquiera ¿O sí?
¡Joder! Me aferro a las sábanas e intento guiar mis pensamientos a lo que Amelie, mi fabulosa novia está haciéndome. Me despertó muy temprano y claramente sus intensiones era darle mimos a mi polla, porque lleva tiempo entre mis piernas. Y sí, me fascina, pero mi mente está muy dispersa como para correrme.
Últimamente he estado muy ocupado en mi último álbum, dándole publicidad en este increíble crucero, y eso conlleva a sentirme nervioso y tenso por el qué dirán cuando las canciones estén en Internet...

-Vamos nene, correte para mí —Su boca vuelve a bajar por mi longitud, lentamente, soboreándome.

No hay dudas que es una experta en el sexo oral, y que muchas veces me ha llevado a las jodidas estrellas, pero aún así...

-Cariño... —Joder, estoy lamentando mucho esto, sobre todo porque no suelo defraudar a mi novia —Lo siento nena, estoy... —Ella alza sus intensos ojos azules y me observa —No puedo, lo intento pero... —

-Ya ¿Otra vez?

Dice secamente. La observo incorporarse y alejarse de mí. La llamo, pero escapa al cuarto de baño ¡Maldita sea Horan! Me levanto y voy tras ella. No quiero comenzar nuestro día así, y sé que le jode mucho el hecho de que me encuentre pensando en otras cosas cuando debería darle la atención que merece.

-Nena.

Amelie termina de quitarse la pequeña braguita que está usando y se mete dentro de la ducha, ignorándome. Debo reconocer que su mal carácter y su temperamento me calientan, es sexy y su actitud de chica mala, me hacen sonreír. No debo ser un idiota con ella.
Entro en la ducha y situándome por detrás, dejo que el agua caliente me empape. Mis manos abrazan su pequeña cintura por unos instantes y no me aleja cuando deslizo las mismas por sus lindas tetas.

-No sé qué te pasa últimamente —Dice al fin —Intento ser buena en la cama, pero siempre estás distraído.

-Perdóname, ya sabes que esto del álbum me tiene nervioso —Murmuro besándole el hombro, dispuesto a comportarme y darle mucho placer.

-No se trata solo del álbum, siempre estás así —Su voz tiembla. No, no quiero hacerla llorar.

-Mi amor —Susurro dándole la vuelta y cortando el grifo del agua. Somos casi de la misma estatura así que su rostro está a centímetros del mío —Te amo, lo sabes. Sé que en primera instancia este viaje sería para nosotros, pero se dio la oportunidad de promocionar el álbum y no pude negarme.

-Eso ya lo sé.

-Entonces entiéndeme, lamento estar distraído, pero será hasta cuando las promociones hayan terminado y el álbum este liberado en Internet.

Ella asiente, pero no deja de mirarme con tristeza, como si existiera algo más.

-Me siento sola —Admite —Te echo de menos por las noches, cuando decides sentarte en el sofá y estar de lleno en el portátil. Cuando hablas horas y horas por teléfono con Andy. Cuando cancelas nuestras citas, cuando cancelas las cenas con mis padres por correr al estudio...—

-Amelie.

-Te echo de menos cuando hacemos el amor, porque siento que no te gusta lo que hago. No se trata solo del álbum, son muchas cosas que me hacen sentir así, como si esto... como si esto no estuviera resultando.

-Está resultando, porque tú eres todo lo que yo he deseado. Me gusta todo de ti —Le aclaro —Eres preciosa, encantadora... Sexy... —Sonríe un poco, pero no lo suficiente como para dejarme tranquilo y creer que estamos bien —Lo último que deseo es que te sientas sola, y con respeto a la cancelación de nuestras citas y cenas, es netamente esto: el álbum, nada más. Prometo que será diferente, solo dame tiempo, por favor.