The night we met (Miguel C.M)

Capítulo 01

I - REUNION

—Te ves grandiosa en estás fotos —dijo Matthew observando su cámara.

Hoy vine a una sesión de fotos con Prada y los encargados de las fotos y mi maquillaje son Matthew y Bella.

—Gracias —sonreí.

—Bueno pequeña nos vemos el próximo mes —dijo Bella al otro lado del estudio.

—Sí, adiós —salí del edificio donde estaba y me dirigí a la camioneta con John.

—Ahora ¿a dónde vamos? —respondió con flojera.

—¿Podemos ir a Starbucks? Y luego ya a mi reunión —lo mire sonriente.

—Solo haré una de esas dos cosas.

El es John, mi chofer y mayordomo, mamá y papá lo contrataron ya que ellos no podían llevarme a los lugares que quería por el trabajo, el llegó a mi vida a los 8 años y desde ahí es mi amigo, el suele ser un poco flojo y algo malhumorado.

Hoy iba a conocer a mi nuevo elenco y como siempre me emociona saber con quienes voy a trabajar. Por lo que papá me contó del contrato es una película de terror y en la mayoría de estás son con personas mayores pero igual me emociona saber.

—Vamos te invito algo —insistí.

Me miró cansado y encendió el auto. Cuando llegamos baje mi ventanilla y hablé.

—Holaa, me das un Moka helado y... —mire a John —¿Qué quieres?

—Quiero un sándwich de queso suizo y un frappuccino de chocolate blanco —me dijo sonriente.

Devolví la mirada hacia la ventanilla y hablé de nuevo.

—También un sándwich de queso suizo y un frappuccino de chocolate blanco.

—Perfecto señorita, pase a la siguiente ventanilla para recoger su pedido.

—Gracias.

John siguió conduciendo hasta la otra ventanilla, nos dieron nuestro pedido y John me lo entregó

—Toma, esto es tuyo —le di su comida

—Gracias.

***

Los nervios estaban a todo lo que daban, pues ahora me encontraba en la puerta para ir a conocer al elenco.

—Bueno, Riley vengo por ti a las 9:30, ¿bien?

—Si John, gracias.

Baje y me dirigí a la puerta, entre al lugar y una señorita con una gran sonrisa me habló.

—¡Riley! que gusto poder conocerte —dijo amablemente—, tus amigos están adentro esperándote.

—El gusto es mío, gracias... —sonreí amablemente y espere una respuesta acera de donde estaban todos. Vi que no iba a tener una respuesta así que opte por preguntar —. Disculpa, ¿en donde se encuentran?