xvi.

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—¿Ya dejarás de perderte en tu vacío existencial? —preguntó Rin con una ceja alzada, el cuerpo ligeramente inclinado hacía adelante para acercar más sus rostros, y claramente intentando intimidarlo un poco con la diferencia de altura. —Relajate, estúpido. No te voy a demandar. Quería asustarte un poco, eres lindo cuando te asustas.

Después de hablar, vió las mejillas de Isagi enrojecerse, e intentó no avergonzarse él también, cuando notó que había admitido en voz alta que ese chico le parecía lindo.

—¿N-no vas a demandarme? —Yoichi titubeó.

—¿Para qué? No tiene sentido.—Rin le restó importancia con un gesto en su mano y es que realmente no se sentía molesto, ni ofendido sino más bien halagado por el hecho de ser retratado. —Me sorprendió ver mi cara en este tipo de dibujos, es todo. Realmente he visto muchos de esos con el rostro de Sae. Incluso algunos sin ningún tipo de censura.

Hizo una mueca de asco de solo recordarlo, ganándose una risa de su acompañante.

—Joder. Debió ser horrible ver eso. —comentó él, y Rin sabía que estaba intentando establecer una conversación, así que le hizo las cosas más fáciles.

—Trauma de por vida. —contestó con una sonrisa torcida. —Aunque si lo vieran desnudo, los artistas quedarían decepcionados con lo que tiene.

Isagi se cubrió la boca con su mano, mordiendo ligeramente su dedo índice. Rin lo observó con una sonrisa ladeada.

—¿Y contigo estarían satisfechos? —preguntó él, Itoshi estaba seguro de que quería molestarlo, pero no sé lo dejaría tan fácil.

—Tu incluso me dibujaste, así que supongo que te dejé más que satisfecho. —Una sonrisa socarrona abordó los labios de Rin, viendo el sonrojo abarcar el rostro de Yoichi.

—De ser así lo habría agregado al dibujo ¿No crees? Rin tu rostro es precioso, pero ¿El resto? Nada muy extraordinario.

Esa había sido una buena respuesta, y Rin lo admitió para sus adentros, aunque obviamente no se echaría para atrás en ningún momento.

—Eso no dijiste ese día. Acaso no era yo, déjame citarte, ¿Lo mejor que había estado dentro de tí? —respondió él.

El rostro de Isagi se deformó debido a la vergüenza, junto a sus mejillas pintadas de rojo, a Rin le pareció tan único y divertido que ni perdió la oportunidad de levantar la cámara para fotografiarlo. Sonriendo cuando vió el resultado.

—A esta foto la llamaré, “Silencio de un perdedor". —comentó con diversión, viendo la mirada furiosa del chico frente a él.

—Vete a la mierda, Rin.

Monocromático. |RinSagi|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora