[Capítulo 9]

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Biel estaba tan avergonzado por lo que había sucedido que solo le contó a Nathan a medias sobre ello

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Biel estaba tan avergonzado por lo que había sucedido que solo le contó a Nathan a medias sobre ello... En realidad, dio a entender la mayor parte de los hechos con su mirada y postura.

—Siento que no hayas tenido la oportunidad —murmuró Nathan a su lado. Ahora estaban caminando por el patio trasero de la escuela. Ya faltaban alrededor de quince minutos para que sonara el timbre de salida—, entiendo lo que es eso, así que también sé la decepción que hay detrás.

Biel asintió con la cabeza, pasando una mano por su cuello y observando a lo lejos que Cloe estaba con sus compañeros de club, quienes estaban organizando todo para volver a guardar sus cosas y stand. Optó por no acercarse, sopesando la idea de simplemente marcharse sin decirle nada.

—Vas a quedarte después de clases por eso del castigo, ¿cierto? —preguntó de pronto Nathan a su lado, mirándolo con deje curioso. Antes de salir al patio y al intenso sol que había ahí se había colocado una gorra para cubrirle parte del rostro y un par de lentes oscuros.

Por unos momentos, Biel no supo a qué se refería... Y, luego, lo recordó de golpe.

—Oh, demonios, es verdad —exhaló de mala gana. Sintió una punzada de angustia dar contra su pecho ante la idea de estar en la misma habitación que Grady... Esperaba que al menos su castigo fuera por separado—. Sí, supongo que tengo que hacerlo.

—No te preocupes por eso —le consoló Nathan con gesto distraído, mirando hacia su derecha—, es bastante común que la profesora Salazar castigue a todos... Son contados los que no han tenido algún castigo con ella. Y en cierta forma eso es bueno, porque no distingue las familias de los alumnos como hacen otros maestros.

Antes de poder responder, Biel observó que un par de chicos se acercaban a ellos. No los reconoció de inmediato, aunque su mente no tardó en hacerle saber poco después que eran los mismos jóvenes que había visto acercarse a la mesa de Nathan durante el receso. El recuerdo le causó un escalofrío y tensó los hombros, preparado para cualquier cosa.

—Hey, Nathan —habló uno de los chicos con una amplia sonrisa que carecía de sinceridad. Tenía el cabello teñido de color verde oscuro que contrastaba con la luz del sol; sus ojos eran de intenso azul y poseía facciones adustas—, ¿hoy también vienes con nosotros? Tenemos un montón de cosas por hacer y nos vendría bien una ayuda.

Si bien el comentario no tenía rastro de malicia, había algo en la forma de hablar del chico que hizo que Biel mirara hacia Nathan, notando en el proceso que él no se veía particularmente feliz con la presencia de los desconocidos.

—Bueno... —empezó diciendo Nathan vacilante y como quien quiere deslindar el asunto.

—¡Qué bueno! Me alegra que tengas tiempo libre —le interrumpió el chico de antes, apoyando su mano en el hombro de Nathan y haciendo entrever que, aun si su altura era menor a la del albino, había algo en su postura que lo volvía más intimidante en comparación—. Nos vemos en la salida.

Solo Se Vive Una Vez #1 © [COMPLETA] PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora