Biel seguía bastante cansado de su carrera para cuando el timbre anunció el receso.
—No vuelvo a usar la bicicleta en lo que me queda del año —exhaló el chico, dejándose caer sobre la banca tras la mesa junto a Cloe, quien le veía con aire divertido.
—Es adorable lo cansado que te ves —se burló ella, apoyando su barbilla sobre el dorso de su mano y esbozando una sonrisa ladina—, ¿en serio vives tan lejos? —agregó haciendo un leve énfasis en "tan".
Biel le dedicó una cara amargada, dibujando una mueca de disgusto en sus labios.
—Por supuesto —se limitó a responder, dándose cuenta que de Nathan se estaba acercando a ellos desde la distancia—, hasta a veces siento que vivo en otra ciudad.
—Hum, sí que eres todo un caso —comentó Cloe, saludando con la mano varias veces a Nathan una vez que se sentó frente a ellos—. Hey, Nathan, adivina por qué Biel parece que está por morirse.
Nathan parpadeó varias veces, un tanto confundido y esbozando una sonrisa a medias.
—Este... No lo sé, ¿se enteró que a nuestro grupo le hicieron examen de diagnóstico en educación física y nos obligaron a dar cinco vueltas al edificio? —atinó a decir, titubeando.
Biel abrió los ojos de par en par.
—¡¿Nosotros también vamos a tener que hacer eso?! —exclamó, frotándose los ojos con perplejidad.
Cloe soltó una carcajada.
—¿Será que es verdad eso de que los músicos no son nada atléticos? —cuestionó con tono pensativo. Nathan frunció el ceño.
—Hey, yo sí hago ejercicio —contestó él con fingido aire ofendido.
—Ah, ¿sí? ¿Y qué haces?
—Levanto muchísimo mis brazos y los agito cuando tocó la batería, eso es ejercicio...
—Hum, no, no lo creo —contradijo Cloe, ahora mirando hacia Biel—. Bueno, pues la respuesta a mi anterior pregunta es que el ganador al premio nobel atrasó su reloj y tuvo que recorrer kilómetros en su bicicleta hasta la escuela... Mira, ¡qué cosas! Biel es como de esos chicos de rancho.
Nathan miró a Biel con incredulidad.
—¡¿Es en serio?! —dijo, partiéndose de la risa mientras Biel ocultaba su rostro rojisimo de la vergüenza.
—Hum... —fue lo único que emitió el chico como una queja, apoyando su frente con la superficie de la mesa—. Por cierto, se supone que hoy dan la lista oficial de los integrantes aceptados, ¿cierto?
Los ojos de Nathan cambiaron de sentimiento, ahora fluctuando entre la preocupación y la duda.
—Es verdad —contestó, pasando una mano por su cabello. Biel no le había contado ni a él ni a Cloe acerca de lo que Grady le había dicho sobre estar aceptado... Es decir, ¿qué sucedía si al final sí era una broma? Seguro quedaría fatal y, por si fuera poco, sus amigos lo verían con lástima—. No había pensado en eso... ¡Ahora estoy nervioso!
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Solo Se Vive Una Vez #1 © [COMPLETA] PGP2023
Roman pour AdolescentsBiel es un chico talentoso cuyo mayor deseo siempre ha sido de tocar junto a otras personas. Y, el primer paso para estar más cerca de ese sueño, es entrar al club de música de su nuevo instituto, cuya entrada incluye una carta de recomendación a c...