× Capítulo 21 ×

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Después de haberlo pensado durante muchas horas  tome la decisión de ir a visitar a mi amigo Syd al hospital donde estaba.
Habían pasado muchísimos meses desde que lo internaron y esperaba su peor reacción hacia mí.

En la recepción me entregaron un gafete y un hombre vestido de blanco me acompaño por los largos y fríos pasillos del lugar hasta la habitación "135".

—Barrett, tienes visita— Dijo el hombre mientras se hacía a un lado para dejarme entrar.

En ese momento nada existía, solo estábamos él y yo en esa habitación llena de dibujos y letras apenas entedibles.
Sin dudarlo me acerque a él para poder abrazarlo y acariciar su cabello para después dejar un beso en su cabello, tenía tanto miedo de que los medicamentos hubieran afectado su memoria.

—Te tardaste en venir.— Murmuró Syd mientras respiraba profundamente—¿Te había dicho lo mucho que amo ese perfume de rosas blancas que utilizas?

Solté una pequeña risa mientras retiraba las lágrimas que caían sin cesar sobre mis mejillas.
Me separé un poco y tomé su rostro para observarlo mejor, se veía cansado y aburrido de estar ahí.

—Te extrañé tanto, Syd. Perdón por no haber venido antes, me costaba muchísimo verte aquí.

—No te preocupes,_______. Mejor dime, ¿Cómo van las cosas con la banda? Me imagino que ya progresaron bastante desde la última vez que estuve —Preguntó Syd con la voz un poco temblorosa—

—Les esta yendo de maravilla y todo es gracias a ti, ellos componen pensando en ti. —Respondí mientras pasaba una de mis menos por su largo cabello.

—¿Y al fin me hiciste caso con eso de que no salieras con David y Roger?.

—Bueno, te fallé amigo. —Le mostré el anillo que David me había regalado como promesa de nuestro amor— Termine totalmente enamorada de Dave.

—¡Ay, _______!. No me hiciste caso, tan solo necesito que te cuides mucho, no quiero que te haga daño, a veces David no es hombre de una sola mujer.

× 𝑇𝑤𝑜 𝑑𝑎𝑛𝑔𝑒𝑟𝑜𝑢𝑠 𝑙𝑜𝑣𝑒𝑟𝑠 ×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora