historias que estuvieron en mi cabeza desde que conocí a Joseph Quinn interpretando a Eddie Munson y que ahora se encuentran plasmadas aquí.
disfruten mucho y dejemos volar la imaginación 🌼🤍
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Suelto un leve gruñido sintiéndome un poco fastidiada, me coloco de nuevo sobre mi espalda e intento sacarme las sábanas de encima, pero una mano colocándose suavemente sobre mi vientre me hace detenerme.
—¿Qué sucede, cariño? – la voz grave de Joseph al lado de mí me hace girar mi cabeza y mirarlo mal, las hormonas estaban terminando conmigo.
—Tengo calor y el bebé se está moviendo mucho. – mi voz sale quejumbrosa como niña pequeña haciendo berrinche.
Joe pasa su mano por mi hinchado vientre. Deja un beso en mejilla y yo me quejo y lo aparto con un manotazo, él ríe suavemente y quita las sabanas de nuestros cuerpos. Suspiro feliz al sentir el aire fresco de la ventana entrar.
—Ahora vamos a hacer que el pequeño bichito se calme para que te deje dormir un poco. – Joe se coloca de rodillas y subiendo la blusa de mi pijama deja al descubierto mi gran barriga, el castaño acerca su rostro a esta y empieza a dejar suaves besos. — Hola bichito, es ya un poco tarde para estar jugando, ¿no crees? – al hablar sobre mi vientre hace que me den cosquillas por lo que rio y coloco una de mis manos sobre su cabeza y juego con sus rizos.
—Al hablarle solo le inquietaras más, es como su madre y ama tanto tu voz que solo va a comenzar a patearme, cariño. –y dicho y hecho, el bebé da una patada justo en el lugar donde Joe tiene su mano. — Te lo dije.
Joe suelta una risa como si fuera un niño pequeño después de hacer una travesura y se encoge de hombros.
—Sé que soy tu favorito, bebé, pero tienes que disimular un poco o si no mamá se va a poner celosa. – el bebé da otra patada y se mueve aún más. Suelto un gemido ahogado al sentir el dolor que me ocasiona y pronto Joe comienza a dar algunos masajes a mi vientre — ok, se terminó la hora de juegos cariño, es hora de dormir. Mamá tiene que descansar, bichito, ya mañana podrás seguir jugando.
—Ayúdame a ponerme de pie, necesito ir al baño. – con esta panza no podía hacer muchos movimientos así que necesitaba de la ayuda de mi esposo.
Joe sale de la cama y se acerca a mi lado de la cama. Me extiende sus manos y con cuidado las tomo para sentarme en la cama. Suelto un quejido al sentir mi espalda baja doler. Joe me mira preocupado, pero hago un gesto haciéndole saber que todo está bien.
—Me parece que alguien ha dado mucha guerra últimamente. – Joe peina un poco mi cabello y después me ayuda a ponerme de píe. Y tomándome de la cintura me ayuda a caminar hacía el baño.
El chico me ayuda en todo momento y se asegura que esté bien y no vaya a tener algún accidente. Una vez que termine de lavar mis manos, caminamos juntos de regreso a la cama y es cuando estoy a punto de sentarme que siento un liquido bajar por mis piernas. Alarmada miro hacía abajo y pronto Joe también lo hace, mis shorts se mojan rápidamente y eso solo puede indicar algo. Bichito ya viene en camino.
