la desaparición de will byers - pt.2

293 21 0
                                    

Expulso el humo del cigarrillo, mis manos tiemblan y mis soy incapaz de pensar en otra cosa que no sea Will

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Expulso el humo del cigarrillo, mis manos tiemblan y mis soy incapaz de pensar en otra cosa que no sea Will. Me comienzo a recriminar el dejarlo solo, fueron un par de minutos y él no tenía que hacer una carrera con Dustin por un tonto comic.

No puedo esperar más, mi niño me necesita. Así que me pongo de pie y abro la puerta principal, decidida tomo mi bicicleta y cuando estoy por montarme en ella las luces de un auto viniendo hacia mi dirección me dejan ciega por unos segundos.

La camioneta estaciona frente a mí de manera abrupta, la puerta se abre de la misma forma y de ella sale un chico alto y de cabello rizado. Corre hacía mi toma mi cara entre sus grandes manos.

—¿Cariño que ha pasado? — Eddie pregunta de forma suave, más no puedo evitar distinguir la preocupación y desesperación en su voz.

No soy capaz de decir ni una palabra, el nudo en mi garganta me corta la respiración, las lágrimas amenazan con empezar a caer de mis ojos. Solo puedo negar con mi cabeza, soltar mi bici y refugiarme en los brazos de mi novio.

Eddie empieza a dejar suaves caricias en mi cabello y susurra palabras tranquilizadoras que no puedo distinguir del todo. Lloro y sollozo desconsolada presa del miedo, temo por la seguridad de mi hermano, Will es mi pequeña gran adoración y desde que papá nos abandonó me prometí a cuidar de él, me juré que nada ni nadie lo iba a lastimar y he fallado estrepitosamente.

—Will no está, desapareció. No lo encuentro por ninguna parte, Eddie tengo miedo.

—Quizá solo este gastándote una broma. — él intenta convencerme.

—Él no haría eso, le gasta bromas a Jonathan, pero jamás lo hace conmigo. Y menos jugaría con algo así.

Me separo de Eddie y limpio mis lágrimas, el chico me mira fijamente y muerde su labio de forma nerviosa. Pasa las manos por su cabello despeinándolo y se da la vuelta dándome la espalda.

—Vamos a encontrarlo, buscaremos toda la noche sin excusa. — se gira nuevamente hacía a mi — Lo tendremos de vuelta, lo prometo.

Toma mis manos fuertemente y me dirige a su camioneta, cuando él sube comienza a conducir y nos adentramos al profundo y oscuro bosque dispuestos a encontrar a mi hermanito.

La búsqueda solo ha comenzado.

.

.

.

.

El bosque se ilumina por completo, el sol se encuentra saliendo dando paso a un nuevo día en Hawkins. Mi desesperación solo aumentaba a cada hora que pasaba, Eddie y yo jamás dejamos de buscar, mi garganta arde de tanto gritar su nombre, pero vuelvo a fallar. No he sido capaz de encontrarlo y si el miedo antes era grande, ahora es gigantesco.

Resignada veo como nos vamos acercando cada vez más a mi casa, el auto de mamá se encuentra estacionado y puedo sentir un escalofrío recorrerme completamente el cuerpo.

one shots / joseph quinn & eddie munsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora