❥Faldas blancas y ojos tapados ⁀⋱‿ ♡▕Jυɲʛƙơơƙ▏

◈ 12

❝Secreto del bosque❞

Regresamos a estar entre esas paredes blancas cuando la tarde comenzó a caer. Teníamos que ser cuidadosos para no ser descubiertos, pues padre parecía estar más que nunca atento a nuestros movimientos. Aunque el hombre sabía ser discreto, si no hubiese sido porque también estábamos atentos a sus acciones, probablemente ni siquiera nos habríamos dado cuenta de su mirada que se posaba en nosotros cada vez que podía.

No lo soportaba, y Joohyuk mucho menos.

Acaricié la pequeña mariposa intentando tranquilizar mi corazón. Me sentía valiente por querer hacer un cambio y salvar a todos los que podía, pero también había una gran inquietud que se instalaba en mi pecho y parecía no poder deshacerme de ella, no al menos hasta que destapáramos todos esos secretos que no nos dejaban dormir por lo que podrían causar.

—No te quedes atrás, Sunbin. Si te pierdes sería un gran problema.

—Perdón. Estaba pensando en qué otras cosas podemos descubrir más rápido. Realmente me inquieta saber que en cualquier momento podría pasar algo.

—Es tu cumpleaños, deja que tu mente descanse un solo día. No va a pasar nada malo solo porque dejes de pensar en eso un momento.

Guardé silencio. Tenía razón, pero era algo que no podía evitar. No importaba el día o la hora, estaba segura de que algo iba a pasar en cualquier momento. Había mucha tranquilidad y no me podía fiar de ella. ¿Creer que todo estaba bien? No, eso no era una opción que tenía presente. Si comenzaba a bajar la guardia en ese sentido, no sería difícil caer en los discursos de ese hombre que me había prometido un hogar. Por mucho que ya no fuera tan ingenua, en el fondo todavía esperaba encontrar un lugar donde sentirme segura. Jungkook se había llevado consigo todo ese cariño que podía darle a alguien, pero esperaba que de a poco pudiera volver a encontrar a alguien a quien querer de esa forma.

—Mira a quien me encuentro aquí.

Una voz que no había escuchado nunca antes, hizo presencia entre los árboles. Apuré el paso para quedar mucho más cerca de Joohyuk, quien al igual que yo se giró en varias direcciones viendo de dónde venía la voz. Finalmente, y pasados unos segundos, una figura alta se mostró ante nosotros. No era un señor, pero se notaba mayor que nosotros. Tenía una sonrisa rara que me hizo pensar que había algo mal. De por sí nunca nos habíamos encontrado con nadie. Joohyuk siempre me decía que el pueblo más cercano se encontraba lejos y nadie se atrevía a meterse al bosque luego de un incidente que había sucedido años atrás.

—¿Qué haces aquí? Sabes que el bosque es peligroso —se puso delante de mí, dejando una especie de barrera entre el extraño y nosotros—. La gente del pueblo sabe que no es bueno estar por estos lados, deberías marcharte antes de que caiga la noche.

—¿Y tú qué haces aquí? ¿Y quién es ella? —empezó a caminar hacia nosotros— Déjame adivinar... Una buena follada en el bosque no le hace daño a nadie. Parece que no te bastaba con ir al burdel del pueblo.

Se formó un pequeño silencio que pareció parecerle divertido al extraño, pues soltó una risa como si alguno de nosotros hubiera dicho un chiste muy gracioso. ¿Un burdel era lo que estaba pensando? No había escuchado esa palabra nunca antes viniendo de alguien, pero una vez en un libro la había leído y me había hecho una idea de lo que podía ser. ¿Joohyuk realmente había ido a un lugar así? No es como si hubiera querido juzgarlo por ello, pero me sorprendí mucho por las palabras del tipo. Para empezar ni siquiera había dado mi primer beso y eso... Sonaba muy fuerte. Ni siquiera podía repetir la palabra en mi mente.

—No digas estupideces, es mi hermana —el tono que utilizó Joohyuk dejó en claro que sus palabras le habían molestado—. Y no iba al burdel a follar, estaba buscando a mi madre, lo sabes perfectamente, Sang.