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Tarde

Habían pasado dos días desde que llegamos al pueblo.

Sangho estaba frente a nosotros. Jungkook y él estaban hablando sobre el paradero de su madre mientras yo tan solo escuchaba su conversación y comía un par de galletas que me habían dado.

Todavía me sentía rara. Pero estaba haciendo lo posible por mantener la calma y no volver toda la situación en algo insoportable. Ya me había bastado actuar de esa forma el primer día, no quería volver a llamar la atención, y mucho menos quería tener problemas con Jungkook por estar actuando de esa forma. Cada uno tenía un límite de paciencia y no podía jugar con la suya a mi antojo.

—No encuentro una parte por la cual entrar sin ser descubiertos, y por lo visto, tu madre se la pasa todo el día en esa mansión. No la he visto salir desde que descubrí que estaba quedándose ahí...

—¿Y la casa está muy lejos? Me gustaría verla con mis propios ojos.

—Está un poco retirada del pueblo, pero definitivamente podemos ir. ¿Ella también va?

Entonces sentí que los ojos de ambos chicos se posaron en mí. No terminé de llevar la galleta a mi boca cuando Sangho estiró su mano para pinchar mi mano con uno de sus dedos.

—No te conozco mucho, pero puedo decir que se nota bastante que te pasa algo. ¿No te agrada la idea de ir?

—No es eso. Perdón, solo estaba un poco distraída, me sorprende el calor que hace por estos lados...

No estaba mintiendo, pero el chico había acertado. Me pasaba algo que ni siquiera yo misma podía explicar del todo. ¿Desde cuándo enfrentar el mundo real se había vuelto tan difícil? Me sorprendió pensar que el resto tenía corazones bondadosos después de todo lo que había experimentado en el último tiempo, pero en el fondo tenía la esperanza de que todo ese sentir sería momentáneo y se me iba a pasar en cualquier momento.

—¿Quieres ir a descansar a la habitación, Sun? Si te sientes mal no dudes en decirme.

—No, estoy bien aquí. El aire fresco me da a ratos y es agradable. Cómo digo, solo estaba un poco distraída... Pero díganme, ¿cuándo podríamos ir a visitar esa casa?

—Conozco a alguien que trabaja ahí y aunque es difícil entrar, me dijo que a mediados de mes el señor y la señora de la casa se van de viaje —Sangho parecía bastante serio. Se notaba que aunque era muy imprudente también podía ser alguien atento—. Si es así... Podemos ir uno de estos días.

Perfecto. Por fin teníamos un avance que podíamos ver. Algo que estaba tan cerca y no solo eran ilusiones de niños. Sangho no era precisamente de mi agrado, pero si lograba llevarnos, iba a estar muy agradecida con él por darnos esa oportunidad.

Iba a poder conocer cómo era la mujer que había criado a Jungkook grande, y sobre todo, él se iba a poder encontrar con esa mujer que tanto quería. Todos salíamos ganando de alguna forma... Aunque me mantenía un poco inquieta el no saber si Sangho luego pediría algo a cambio.

—Vamos hoy mismo por la tarde, cerca del atardecer. A esa hora todavía hay luz pero es más tranquilo. Podemos dar unas vueltas por el lugar sin tantas preocupaciones. Siempre hay algún espacio por el cual se puede ingresar.

Y así fue como quedó tomada la decisión.

Sangho se marchó para juntarse un rato con sus amigos, y mientras tanto Jungkook y yo permanecimos sentados en silencio. Las cosas estaban un poco incómodas entre nosotros desde el primer día. No nos habíamos vuelto a separar a pesar de la incomodidad, pero el ambiente tenso era algo molesto cuando solo nos teníamos a nosotros para compartir.

❥Faldas blancas y ojos tapados ⁀⋱‿ ♡▕Jυɲʛƙơơƙ▏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora