Mis amigas y yo terminamos de estudiar para el examen del lunes; era un sábado por la noche cuando finalizamos el repaso del tema. Ella me comentó que la habían invitado a una fiesta que iniciaba en una hora, accedí a ir pues necesitaba un respiro de la escuela.
Llegamos al lugar quedando muy impresionada pues era una enorme casa, elegante y moderna. Había mucha gente también y la música hacía ritmo con las luces que iluminaba a mi alrededor -pues quiénes son tus contactos?- cuestiono a mi amiga.
-Ay! Qué importa, luego me lo agradecerás- toma de la bandeja dos copas de whisky -relájate y olvídate de tu vida normal. Disfruta porque la noche es corta- pide acabándose el whisky de jalón.
Intenté seguir su consejo acoplándome en la pista de baile pues era lo mejor que se me daba. Me la estaba pasando bien hasta que siento como me pisan los dedos de los pies quedando demasiado adolorida pues hizo que me torciera el tobillo -ouch!!- chillé enojada.
-Ay! Disculpa! No era mi intensión- pide perdón el chico pelinegro -ven, deja te doy una bolsa de hielo- ofrece.
Hace que me apoye en su hombro para que pueda caminar hasta una salita donde la musica apenas y se podía oír. Una vez que prende la luz, noto el rostro del chico que siendo sincera era mi tipo, era bastante lindo y adorable, especialmente sus labios.
Se da cuenta que me le quedé viendo -estoy consiente que en estos momentos me quieres matar- dice mientras me ayuda a sentar.
-Oh no, te quiero comer vivo por justicia a mi pie- bromeo intentando ser amigable.
El chico ríe por mi comentario -ya, ya me quedó claro. Nomás deja te doy el hielo y después me puedes seguir culpando, va?- me sigue la corriente.
Llega con la bolsa de hielo y se hinca para ponerla en mi pie. Suelto un grito ahogado por el frío contacto. Me pide perdón -y continúas lastimándome- juego con él.
-Perdona! Solo intento ayudar- sigue riéndose -cuál es tu nombre?
-Krishna- le respondo.
-Un placer, Krishna. Soy Pedri- se presenta.
-Encantada, Pedri.
Notaba que Pedri no dejaba de sonreír -con esto se supone que te tiene que bajar la hinchazón, deja te busco una pastilla para el dolor- se levanta con la bolsa.
-Qué hacías en la pista de baile?!- cuestiono.
Carraspea -ejem, mis amigos me obligaron a hacer el ridículo porque soy terrible al bailar. Y vaya que te lastimé- explica mientras buscaba por los cajones.
-Haha, bueno, cuando me sienta mejor, si quieres te puedo enseñar a bailar- invito cordialmente.
Pedri llega con un vaso con agua y la pastilla a la mano -pues acepto.
Desde ese día, había conocido al amor de mi vida. Pedri Gonzalez.
Empezamos a salir muy seguido, conocimos muchas cosas de otro. Me enteré que era futbolista del FC Barcelona y representaba a la selección española. Pero eso era lo de menos, yo terminé enamorada por su personalidad, era muy atento conmigo, adorable, tierno y dulce también.
Era el chico de mis sueños.
A pesar de ello, las cosas entre nosotros jamás fueron sencillas, solo éramos dos jovenes adultos que nos quería consumir la fama y hacernos sus víctimas. Empezaban a tacharme del típico estereotipo de moldeo interesada novia de un deportista profesional, pero no era el caso. Yo no andaba con Pedri por su dinero o fama, sino por quien era esa persona detrás de los reflectores. Agregando que lo de modelar lo odiaba y solo lo hacía porque me pagaba la carrera.
Llegué a un punto donde ya no soportaba los paparazzis pues luego de 10 meses intentando ocultar nuestro noviazgo, que tomé la decisión de regresar a mi país natal Chile a concluir mis estudios. Lo peor era que me alejaría de Pedri y no quería terminar la relación.
Un día antes de irme, cité a Pedri en mi casa para comunicarle de mi decisión -es que ya no soporto todo esto. Las criticas de la prensa me están afectando.
-Eso no debería afectarte...
-Pues lo hace, Pedri. Solo tenemos 20!- defiendo.
-Krishna, ignóralos! Es lo que yo hago, a mi no me interesa que se diga de mi- insiste.
Empiezo a desesperarme -pues no puedo!- suelto alzando la voz -soy débil, fíjate!- camino en círculos.
Pedri se acerca -al contrario, has soportado demasiado- intenta relajarme -pero la gente no entiende lo que son los límites. Solo hubiera deseado que me hubieras consultado el hecho de que te vas a otro continente- recalca.
-Lo siento mucho. Es que ya no puedo.
Me acaricia la mejilla -no pidas perdón. Estaré aquí esperándote hasta que regreses- afirma con un fuerte beso en mis labios.
La verdad que el regresar a Chile me vino como anillo al dedo, pues estaba a salvo de todos y me ayudó bastante a terminar mi carrera de fisioterapeuta. Me gradué a los 25 años y lo primero que hice fue buscar trabajo en España, fue como si el destino estuviera a mi favor pues encontré en Barcelona. Pedri seguía triunfando en el equipo de sus amores.
Decidí sorprenderlo yendo a uno de sus partidos y al termino de este, lo fui a ver dentro de las instalaciones del Camp Nou, se nos escaparon las lágrimas al vernos por primera vez. Nos abrazamos como si no hubiera un mañana -joder, como te extrañé, Krishna- confiesa aún sorprendido de verme.
-También yo- sollozo -pero estoy de vuelta para siempre.
-Oh si, desde este momento no te dejo ir ni a la tienda de la esquina- río por sus palabras y nos volvemos a besar.
Retomamos nuestra relación sintiendo el gran cambio de nuestra madurez pues ya no éramos tan vulnerables. Eramos dos personas capaces de manejar una relación sana y hermosa. Pasando mucho tiempo hasta que decidimos comprometernos para ponerle sello oficial a nuestra historia de amor.
La boda fue preciosa y perfecta a pesar de ser sencilla. Yo solo pedía estar con Pedri el resto de mi vida. Esa misma noche, entre pasados de copas y consumidos por la alegría y pasión, hicimos el amor como nunca antes. Sus manos se pasearon por todo mi cuerpo sin dejar ninguna parte vacía, sus labios hicieron sus maravillas no solo en mi boca y vaya que se sintió tan sensual. Nuestros voces y movimientos se hicieron uno solo toda la noche.
Como era de esperarse, a las pocas semanas después de la boda, salí embarazada de nuestro primer hijo, y que mejor manera de decirle que recreando la vez que nos conocimos. Así que estábamos en la misma casa de aquella fiesta gracias a una reunión del equipo. Saqué a bailar a Pedri y este seguía con dos pies izquierdos pisándome el pie, todo acorde al plan.
-Madre mía! Es que si soy malísimo- maldice entre risas.
-Eres un terrible estudiante- me burlo y el español me ayuda a caminar a la misma sala de hace años.
Me ayuda a sentar y se va en busca de la bolsa y hielo. Primero abre el cajon donde había bolsas encontrando un papel -"esperamos"- lee -qué es esto?- pregunta confundido.
-Huh, no lo sé, por qué no revisas en la nevera?- le doy pistas y este me hace caso sacando el hielo.
-"Un"- repite lo que dice el post-it -"esperamos un"- dice aún perdido.
Se me escapa una risita -ya casi lo descubres- aviso.
Pedri se dirige a tomar el trapo desdoblándolo para encontrarse con la cereza del pastel -"hijo"- me voltea a ver sorprendido -Krishna...- queda pasmado ante la noticia.
-Así es, Pedri- le muestro la prueba de embarazo.
-Vamos a ser padres!!!!- se aproxima a mi para levantarme de mi asiento y cargarme, llenándome de besos por todo el rostro.
Este era el siguiente paso de nuestras vidas.
/////entrega para Kriishna_C espero y se de tu agrado🌷🍸
ESTÁS LEYENDO
˜"*°•.𝗦𝗢𝗖𝗖𝗘𝗥 𝗜𝗠𝗔𝗚𝗜𝗡𝗘𝗦.•°*"˜
Roman d'amourHistorias cortas con tus futbolistas favoritos. COMPLETADO