yo en tate no yuusha (Reescribiendo)

aquí no soy una leyenda... todavía

Rey: ¿El... desapareció?

Dijo el Rey Aultcray cuando su mensajero regresó de revisar la habitación de Héctor, luego de que el Semihumano no apareciera por la mañana.

Sirviente: Su ventana estaba abierta de par en par, y todo lo que encontramos fueron algunas botellas vacías

El sirviente informó a su majestad con la cabeza inclinada.

Motoyasu: Entonces el hombre cabra ha desaparecido, ¿eh?

Dijo un poco desinteresado mientras giraba su lanza en una mano con torpeza.

Itsuki: Tal vez se fue temprano, tratando de adelantarnos

Itsuki añadió, molesto por la idea de que alguien se le adelantara

Naofumi: ¿Cómo puede alguien que destaca tanto como él logra salir del castillo sin que nadie se dé cuenta?

Preguntó Naofumi, el más razonable de los tres.

Todos se habían reunido a pedido del Rey para recibir a los miembros de su grupo, un grupo de aventureros seleccionados por la corona para ayudar a los héroes elegidos en su búsqueda para salvar el mundo.

Solo que uno de los Héroes estaba misteriosamente ausente de la fila.

Aultcray no estaba seguro de si estaba aliviado de que el semihumano se hubiera ido, o preocupado por cómo logró pasar a todos sus guardias sin ser detectado.

Guardia: ¡Su Majestad!

Gritó un guardia, corriendo hacia el patio con miedo desesperado.

Guardia: ¡Su majestad, estamos bajo ataque!

Rey: ¿¡Qué!?

Aultcray gritó con incredulidad.

¿Su plan de convocar a los cuatro Héroes Sagrados Legendarios ya había recibido represalias de los otros países?

¡Imposible! ¡Solo ha sido un solo día!

Héctor: Jajaja, diría que estar 'bajo ataque' es un poco demasiado dramático

Se escucho la voz de Héctor cuando dobló la esquina de la puerta que conducía al patio.

El grupo originalmente se sorprendió al verlo, parado allí con una armadura de plata completa y con su arma transformada en una forma mucho más intimidante.

Detrás de él había un grupo de animales y un par de niños, que lo miraban con los ojos muy abiertos.

Guardia: At... ¡Atrás! ¡No te acerques más!

Gritó el aterrorizado guardia, interponiéndose entre el 'intruso' y su Rey con la espada desenvainada.

Solo provocó una risa de diversión del tryhard