Hurt Me And You'll Understand // Taiju Shiba x Oc

CAPITULO VEINTISEIS

Las noches en Amasya, Turquía eran heladas, las mayoría de las personas andaban abrigadas y las cafeterías se llenaban, Nazareth se había puesto muchos abrigos para cubrirse del frío sus manos se ponían rojas por lo frío que el aire se sentía.

Se había bajado del avión y un taxi la esperaba la llevaba a su nuevo hogar donde ella se quedaría, Yazuha había arreglado todo para su escape desde su boleto de avión hasta su nueva identidad y hogar. Había llegado a unos pequeños departamentos donde los espacios eran grandes y estaban cerca del lago y las montañas, miró que una mujer la esperaba afuera Nazareth se acercó a saludarle y la mujer le sonrió.

—Debes ser Angel Miller, ¿Cierto?—Hablo la mujer, Nazareth asentó con la cabeza.—Yazuha me informó de tu llegada Tatlım.

—Oh ya... lo siento por llegar de repente.

—Tranquila, están ansiosa por recibir a alguien en mi casa. Tu habitación está preparada, vamos te ayudo.

La mujer había agarrado los equipajes para ayudar a Nazareth, había entrado a la casa era muy hermoso y acogedor a diferenciar de la enorme mansión donde vivía encerrada.

—Llegamos.—Sonrio la mujer abriendo la puerta y dejando que el aire del día entrara, era una habitación pequeña donde solo había una cama y estaba equipada con lo básico.—Espero que te agrade Tatlım.

—Es demasiado lindo Señora, muchísimas gracias.

—De nada, oh si, me dijeron que te de esto igual.—La mujer había salido por un momento mientras Nazareth veía su nueva habitación y le ilusionaba el echo de acomodarlo con toda sus cosas. La mujer regresó y le entregó unos libros a Nazareth.—Yazuha me dijo que te de esto, es un libro para aprender Turco, te ayudará demasiado en que te quedarás aquí.

—Oh si, muchas gracias.

La mujer le sonrió por última vez saliendo de su habitación para dejarla sola. Se sentía como su hogar, miraba alrededor y se acosto en la cama, estaba teniendo sueño y eso no le pasaba es de hace mucho tiempo que deseaba dormir plácidamente así que decidió levantarse y darse una ducha para desempacar y descansar un poco después un viaje largo.

Se sentía cómoda y ansiaba por lo que pasaría así que se levantó para desempacar todo y empezar a buscar a Alice, amiga de Yazuha que era una costurera de Amasya, hacía vestidos y arreglos de trajes una de las cosas que aprendió hacer Nazareth mientras trabajaba con Yazuha. Miró su pequeña maleta para sacar la poca ropa que tenía y todas las cosas que le regalaron, poco a poco sacaba las cosas pero no vio su diario en alguna parte, se levantó y miró su bolso donde estaba el pasaporte y no encontró nada más que el diario que Mads le había obsequiado pero no estaba el diario donde ha escrito desde hace mucho, sintió la presión en su pecho creyendo que lo había perdido pero lo que más le frustraba era que lo hubiera dejado en esa mansion.

"Me vestí de blanco, jamás pensé que podría lucir alguno de ellos. Mi boda fue rápida pero el me miraba a mi y me sostuvo, me sentí protegida y cuando nos tomaron la foto matrimonial sentí mariposas. Estaba siendo la mujer más feliz del mundo, Taiju me hacía feliz, me salvo y lo estaba haciendo por segunda. Era mi boda, era un nuevo comienzo."

"He conocido a Candy Dibenetto, es una mujer hermosa, los ojos de Taiju se iluminaban al verla, el nunca me miró así"

Taiju pasaba cada página desde el inicio, no había salido de la habitación de Nazareth, se había quedado ahí esperando que sus hombres regresaran con ella pero aún no había señal de ella, el diario lo sostenía y aunque las páginas eran mucha Nazareth sabía cómo ser específica con cada detalle que quería expresar.

"Hoy llamo de nuevo, el contesto contento. Han pasado muchas llamadas y las he escuchado todas, cada vez que el se iba sabía que era con ella, el no me volteaba ver y tampoco me hablaba, solo me avisaba por medio de los demás y mi deber solo era quedarme a esperarlo. ¿Se llama eso amor? Taiju, me gustaría que me vieras aunque sea por un instante y pensarás en mi pero tu mente solo estaba lleno de alguien más."

Taiju alzo la mirada y recordaba las veces que Nazareth lo miraba cada vez que llegaba de una visita a Candy, lo recibía con una sonrisa y se levantaba a darle la bienvenida aunque el estaba con alguien más, con la otra mujer como Nazareth la llamaba.

Había escuchado todas las llamadas que hacía con Candy, como el la hablaba e invitaba a lugares que había ido ya desde hace mucho, pero nunca se detuvo a pensar si Nazareth le interesaba o tan siquiera Nazareth sabía de la existencia de esos lugares.

Taiju pasó más páginas donde Nazareth relataba todo lo que ellos decían en las llamadas.
"Verás, ella es tan... débil, tan frágil. Siento que rompería a llorar en algún momento, procuro no ver su rostro con el miedo de hacerla llorar."

La sangre de Taiju se heló cuando leyó cada palabras que dijo cuando Nazareth se trataba de levantar para subir al auto cuando ella se aventó.

Se sentía un completo idiota, Nazareth sabía todo lo que pasaba sin que nadie se lo dijera o que alguien quisiese molestarla con eso, ella permanecía ahí esperando por el siempre con una linda sonrisa.

"Cada día veo como el se va y regresa pasando tantos días. Aveces regresaba temprano pero solo se guardaba en ese habitación de abajo. Había pasado ya mucho tiempo que no lo veía, conocí a alguien y sentí como la primera vez que vi a mi esposo cruzar por esas grandes puertas de su edificio, creo que era amor. Pero estaba sintiendo algo diferente... me sentía extraña, no quisiera sentirme así por alguien más que no seas tú."

Los sentimientos de Nazareth eran confusos a su perspectiva de ella pero Taiju entendió que empezaba a sentir sentimientos por alguien más, Justo como ella sintió cuando lo vio, no sentía miedo o algo por el estilo confío ciegamente en el y permaneció ahí, en esa cama donde estaba sentado leyendo el diario de la persona que lo esperaba cada día, enamorada de él y esperando aunque sea una reacción tierna que viniera de él, pero ella escuchaba y veía la infidelidad que el hacía, Taiju había prometido en sus votos que el la vería por igual, se encargaría de ella dándole las comodidades de una esposa que estuviera casado con el pero Nazareth no esperaba nada a cambio, jamás pidió joyas o viajes por el mundo, ella solo quería ser feliz con el por qué entendía ahora que ella deseaba felicidad con el, pero solo se dedicó a romperle el corazón.

Taiju no sabía que hacer, se sentía decepcionado y desesperado no tenía esa sensación desde que se enteró que su padre había sido asesinado. Su corazón palpitaba sentía el miedo de que ella no regresara y le pasara algo después de esto junto con su hijo, tenía tanto perder esa pequeña parte de ella. Tenía que recuperarlos y arreglar todo, aunque sea intentarlo un poco.

Taiju pensó que encontraría algo más en el diario, un lugar donde Nazareth hubiera deseado ir pero no había nada hasta la ultima página donde la tinta estaba esparcida y las páginas algo sucias por ello.

"Cuando me enteré de mi embarazo me sentí... como un oruga, tenía la sensación que daría vida a una mariposa. Cada vez que mi bebé crecía mi estómago crecía tanto aunque las náuseas eran demasiadas pero... al menos Taiju estaba ahí, bueno de vez en cuando. Desayunaba ahora conmigo y estaba Yazuha igual, me sentía tan feliz de tenerlo en mis brazos y abrazarlo...pero ahora no podré, jamás podré.

Como una persona podría ser tan cruel conmigo si nunca le hice nada, yo... me case y quise tener una vida feliz pero me arrebataron mis sueños. Esa otra mujer me arrebató mi sueños juntos con mi esposo, quitándome todo y haciendo que perdiera a mi bebé en mis brazos. Pensaba que lloraría al nacer pero... solo había sangre en él y en mis manos. Mi corazón se partió hasta el último pedazo, basta solo eso para darme cuenta que solo no valía nada para el, tal vez nunca valí algo para alguien."

La habitación había quedado en silencio, se escuchaba los choque en la ventana. Taiju sólo veía la página, su respiración se detuvo y alzó la mirada con las manos temblando de impotencia mientras empezaba a sudar.

Se había enterado de todo.