Scars {Justin Bieber y Tú}

Capítulo 21 (Parte I)

"Selena"

Me quedé parada al verles juntos, Selena estaba hablando con él pero justo cuando se dio cuenta de mi presencia, pocos segundos después de salir del estudio con la chaqueta de Justin, se calló y se quedó mirándome atenta.

Dejaste tu chaqueta adentro, Justin - dije con algo de nervios en mi cuerpo, Selena no paraba de mirarme cada movimiento que hacía y eso me incomodaba.

Cierto, se me había olvidado - dijo algo incómodo mientras yo me acercaba a ellos y le daba la chaqueta a Justin.

No hay nadie más en el estudio? - preguntó Selena curiosa, mientras arqueaba una ceja.

No - respondí adelantándome a Justin, sonreí fingida cuando le respondí - Todos se acaban de ir, estarán seguramente en el hotel, ya es tarde - sonreí para irme y dejarles a mis espaldas, mientras Selena no paraba de mirarme curiosa.

No tenía ganas ni de decirles adiós, ni siquiera de pronunciar una maldita palabra más, no soportaba aquella escena. Por eso me fui de allí, parecía como si estuviera huyendo de ellos, y era verdad, para qué negarlo?. Cada vez soportaba menos la actitud que tenía Selena cuando me veía o coincidía en algún lugar conmigo, y Justin... para qué hablar, se notaba como indiferente ante lo que pasaba, como si las cosas no fueran con él, ni siquiera se comportaba como si me conociera. Y él sabía perfectamente que lo conocía en todos los aspectos, como su novia Selena.

No pude evitar poner una sonrisa pícara mientras pensaba en esas palabras en mi mente, vinieron a mi cabeza las imágenes de hace unos momentos en la playa. Su cuerpo sobre la arena, con tan solo unos boxers sobre sus caderas. Empecé a sonreír sin parar, no sabía el motivo por el que lo hacía, pero no me vendría mal olvidarme de todo esto un poco y reírme un rato, al menos decían que reír alargaba la vida, no?.

Entré a la habitación del hotel y lo primero que hice nada más al entrar en aquella gran suite de Miami, fue arrojar sobre el sofá que había en la entrada de aquel paraíso mi bolso y rápidamente me metí en la ducha para quitarme cualquier resto de arena que quedara por mi cuerpo.

Mientras el agua caía lentamente por cada parte de mi cuerpo, cerraba los ojos mientras el cansancio me invadía por completo, estaba tan agotada.

Apenas salí de la ducha, me puse los shorts de mi pijama y una camiseta de tirantes negra, agarré el nestea y salí a la gran terraza de aquella suite que daba a las calles de Miami.

Tenía unas vistas preciosas, de noche se podía ver todo iluminado, y la playa estaba a un lado, bastante cerca y se podían escuchar como las olas rompían al llegar a la orilla. Cerré los ojos mientras el aire que hacía en ese momento en la calle, chocaba con mi cara y de nuevo vinieron a mi cabeza las imágenes en la playa con Justin. Nuevamente no pude evitar sonreír al ver en mi cabeza su cara. No entendía por qué hacía esto, estaba volviéndome loca o qué?. Noté que alguien me miraba y volteé hacia todos los lados de la terraza, para poco después encontrarme con él...

Vaya, parece que te diviertes mucho sola - dijo sonriendo mientras me miraba reír, y cuando volteé para encontrarme con su mirada me quedé quieta, seria. No sabía que estaba mirándome.

No sabía que estabas ahí - dije más seria que antes.

Seguramente si lo hubieras sabido, no te hubiera visto de esa forma - dijo riendo mientras me miraba atento, arqueé una ceja.

Qué te hace tanta gracia Justin? - dije molesta, se estaba riendo de mi - Nunca viste a nadie reír o qué?.

Tenías que ver la cara de sorprendida que tenías cuando te volteaste y viste que te estaba mirando reír - contestó sin parar de reír. No sabía por qué le hacía tanta gracia aquello, la verdad.

Sinceramente, no le veo lo gracioso - arqueé la ceja, sin entender sus risas y lo dejé de mirar para seguir viendo las hermosas vistas que tenía desde aquella terraza.

Hey! ____ vamos no te molestes - dijo dirigiéndose a mí, para que lo mirara pero no le presté atención y seguí mirando la ciudad iluminada por la noche.

Quién dijo que estaba molesta? - dije sin importarme lo que me decía.

Nadie, pero se nota que te molestaste - hizo una mueca graciosa mientras miraba por el rabillo de mi ojo.

Puedes pensar lo que quieras, al fin y al cabo... no te intentaré cambiar de opinión - sin hacerle mucho caso, noté como se volteaba a mirar las vistas que yo estaba observando. Ya no se reía y estaba más calmado y serio que antes.

Hay unas vistas hermosas desde esta parte del hotel, no crees? - dijo esperando una respuesta de mí.

Por eso me encanta esta habitación - esbocé una pequeña sonrisa, mientras observaba maravillada la playa que estaba iluminada por la luna que lucía en el cielo oscuro.

Se produjo un silencio que parecía interminable y que no iba a ser interrumpido por ninguno de los dos. Estábamos solos en aquella terraza con esas hermosas vistas ante nosotros y no parábamos de observar los edificios iluminados por diferentes luces en el frente, estaba todo tan hermoso, y no podía estar mejor acompañada, no podía negarme a reconocerlo, me encanta estar con él. Aunque estaba dos terrazas más alejado, no estaba tan cerca como hubiera deseado que lo estuviera.

Solo con saber que estaba en el mismo lugar que yo, aunque fuera un poco más alejado de mí, pero solo con saber que podía contar con su compañía y escuchar sus palabras me hacía sentir bien.

Me gusta estar aquí. Donde nadie te puede molestar, ni decir nada que te haga daño - dijo alzando su vista hacia el cielo y mirándolo atento, mientras yo volteé mi cabeza y me quedé mirándolo curiosa.

No estás con Selena? - pregunté curiosa, captando rápidamente su atención y volteó su mirada para verme atento.

Tenía que irse a grabar la película que está haciendo. Solo pasó por el estudio para verme -contestó algo serio - Por qué te interesa tanto Selena? - preguntó curioso mientras miraba mi reacción.

Qué!? - dije molesta - A mí no me interesa nada de lo que haga tu noviecita, solo tenía curiosidad - me quedé mirándolo unos segundos y me aparté de la terraza, estaba algo molesta. Qué le hacía pensar que yo estaba interesada en lo que hiciera o no su noviecita? No me importaba en absoluto.

Al instante de irme de la terraza de la suite, algo molesta con él, se pudo escuchar su voz que venía de afuera, de su terraza. No paraba de pronunciar mi nombre sin parar. Yo intentaba no hacerle caso, me senté en medio de la cama y apoyé mi espalda en la misma. Di un suspiro y levanté la cabeza para quedarme mirando al techo mientras seguía escuchando una y otra vez su voz.

_____, estas ahí? No te enfades por lo que te dije, no pasa nada... Vamos _____ por favor! - se le notaba preocupado por mi repentina ida de la terraza. Pero la verdad no tenía ganas de volver a salir para hablar con él.