Año 1, Diciembre.
Siglo I.
Nunca ha habido guerra.
Saturno.- ¡Ferran! - Grito, buscándolo.
- ¿Qué? - Dice tan calmado desde la cocina.
- Que llegamos tarde, debemos irnos. - Camino hacia la cocina y lo comienzo a sacar a las fuerzas.
- No quiero ir a esa boda. - Niega.
- Eres el padrino, tienes que ir. - Lo regaño.
- Quiero quedarme aquí contigo. - Se acerca y me besa el cuello. - Hace mucho que no...
- Lo hicimos en la ducha, hace un par de horas. - Pongo los ojos en blanco.
- Mucho tiempo. - Susurra contra mi cuello.
Ferran sigue besando mi cuello hasta que mi respiración se comienza a acelerar, qué fácil es hacerme cambiar de opinión.
- ¿Van a ir o no? - Pregunta Hailey.
Yo me separo de Ferran y la veo, tratando de aguantar una risa.
- Sí mamá, iremos. - Asiente Ferran.
- Déjala un poco en paz, que lo hicieron esta mañana. - Hailey se va y yo abro la boca.
- Tiene que mudarse, necesitamos nuestra privacidad. - Concluye Ferran.
Yo río abiertamente y arreglo mi vestido.
Ambos salimos de la casa y nos tomamos de las manos. Veo mi vestido y su traje, ver en traje a Ferran es... La primera maravilla de este mundo.
Mi vestido es lila, de una tela súper suave y me llega hasta los tobillos. Es algo suelto en la parte del torso, y en la espalda se ajusta con unas cintas del mismo color.
El traje de Ferran es muy básico, zapatos, pantalones y saco negro, la camisa que lleva debajo es algo así como gris.
Veo hacia atrás y veo nuestra casa, es preciosa.
Es de un solo piso, tiene tres habitaciones, cada una con su baño. Por fuera parece una choza de estas de hace muchos años atrás... Me encanta.
Sin caminar mucho llegamos al lugar de la boda, no puedo creer que ellos se estén casando, lo merecen.
- Es que es una locura una boda doble. - Ferran se queja.
- Eres el padrino de las dos. - Recuerdo.
- No sé en qué momento acepté. - Niega.
- Es tu primo. - Aprieto un poco su mano. - Y es Sean, entiendo por qué te sentiste obligado a aceptar.
- No, fue porque son tus mejores amigos los que se casan. Tú eres la madrina ¿Lo recuerdas? Es normal que yo sea el padrino si soy tu novio. - Dice con obviedad, vaya, me atrapó.
- ¡Pero tiene sentido que lo seas! - Muevo su mano.
- De acuerdo, de acuerdo, calma. Ya acepté, ya estoy aquí. - Sonrío.
- Es lo bueno. - Asiento.
Suspiramos y entramos al lugar.
Es una especie de cúpula -una broma entre nosotros- adornada con flores lilas y blancas.
Las personas comienzan a llegar. Sean y Hudson están en el altar y comienza la boda.
La canción comienza a sonar, ahora pasan sus parejas, entra primero Tina con un vestido lila muchísimo más hermoso que el mío que combina con aquel brazo robótico que le hicieron hace meses, el brazo es de color gris, plateado y algunas luces lilas y moradas.
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Las Tres Naciones ✓
Science FictionLuego de una guerra ocasionada por disputas gubernamentales, el mundo fue destruído, dejando vivas a tan sólo a miles de personas. Estas Miles de personas se dividieron en tres naciones para así estar en paz entre ellos: La nación Azul, viven en la...